"Solo quiero que sepas que te estás llevando una parte de mi corazón contigo"
Ahí estaba Clarissa conversando con mi novio, con sus mejores amigas y con Camerón el novio de su mejor amiga, ella se notaba mucho más integrada a ese grupo que yo...
Me quería morir de la vergüenza quizás todos sabían ahí que yo era una estúpida.
Aún así deje salir toda la dignidad posible y me acerqué a ellos.
Cuando Alan me divisó su mirada fue como si viera a un fantasma, estaba tan tenso, tan asustado pero yo hice como si nada. Cuando Kelsey me miró fue como si le hubieran arruinado la fiesta.
— Chicas ella es la novia de Alan, se llama Charlie ¿nos es gracioso? — dice muerta de la risa la castaña y en eso la ambas mujeres me miran de arriba a abajo
— Hola, mi nombre es Naomi — dice la pelinegra
— Encantada — le digo dándole la mano
— Un gusto soy Clarissa — dice sonriéndome y mirándome de arriba abajo le iba a contestar pero me lo impide Kelsey
— Clarissa es mi amiga la que te hablé hace un momento — me dice sonriéndome amargamente — ¿a que es guapísima? Solo mírala es una Barbie
— Ya veo
— Además es muy inteligente, es pediatra — dice de nuevo la castaña abrazando a su amiga quien estaba un poco incómoda — en serio esta mujer lo tiene todo ¿tú qué dices Alan? — vuelve a decir mirando a mi novio que se notaba que quería que se lo tragara la tierra
— Creo que todas la mujeres que tengo en frente mío en este momento son realmente preciosas — dice mirando primero a Clarissa y luego mirándome a mí con una sonrisa
— Buena formar de sacártelas Ross — dice riendo Camerón
Alan solo sonrió incómodo
— ¿Y a que te dedicas Charlie? — me pregunta Clarissa muy interesada
— Soy gerente en una distribuidora y exportadora de vinos — le contesto nerviosa
— Espero no seas alcohólica — Dice Kelsey muerta de la risa
— ¿Sabes qué? Ya tuve suficiente de ti esta noche, no sé quién rayos te crees pero eres la persona más antipática que he conocido — okay eso era lo que yo le quería decir pero no pude. Solo por el simple hecho de que si le decía algo, ella me diría lo de Alan con Clarissa y luego yo quedaría como la imbécil más grande del mundo sin mencionar que eso adelantaría a que Alan termine conmigo y me confiese que está enamorado de esa rubia y que hace tiempo que me quería dejar pero no sabía cómo.
— Amor, ¿que te está pasando? Tu no eres así — le dice Camerón a su novia y luego me mira a mi — en serio Charlie perdónala, debe ser los mojitos que se a tomado — y yo solo le asentí con la cabeza en gesto de que lo entendía
— ¡¡Eso no es verdad!! No estoy borracha solo digo lo que pienso — dice molesta a su novio
— Olvídalo, iré a fumar un rato — digo esto y me voy, sé que me carcomía por dentro dejar solo a Alan con la rubia pero es que realmente me sentía mal ahí
— Te acompaño — me dice rápidamente Alan parándose de la barra pero yo le hago un gesto de stop con la mano
— No, quédate con tus amigos voy y vuelvo — digo esto y mientras me voy escucho como Kelsey le dice al resto "vayamos a bailar todos, tu noviecita después volverá si es que aún quieres que vuelva" me dio tanta rabia escucharla pero solo me fui
Yo jamás he fumado pero solo dije eso para poder escapar de ese lugar, sé que Alan entendió que yo quería escapar así que por eso no me dijo nada. Mientras iba caminando entre la gente para poder salir me iban cayendo unas lágrimas, una vez que ya salí me quede afuera por un rato llorando, no me importaba que la gente me viera, de todas maneras nadie me conocía ahí y además ya soy una patética así que daba igual todo. Mi novio estaba con su amante dentro de este club y yo se lo deje en bandeja.
Después de un buen rato decidí entrar por supuesto antes me mire en la pantalla del celular para que no quedara rastro de que estuve llorando.
Trataba de encontrar a mi novio pero no lo podía ver, el corazón se me puso a mil ¿qué tal si se había ido con Clarissa? Eso me asustaba mucho
Seguí buscando a Alan hasta que alguien me agarra de la muñeca, me giré de inmediato creyendo que era Alan pero no lo era.
— ¿Así que a esta fiesta venias? — me preguntó sonriente Elliot
— ¿Que haces tú aquí? — pregunto asombrada, uno porque no esperaba verlo en este lugar por supuesto y segundo porque no podía verse más atractivo, llevaba una camisa negra con las mangas recogidas hasta los codos y con pantalones negros
— ¿Bromeas? Los viernes son de fiestas además... supuse que te encontraría por aquí — me sonríe coqueto y yo siento como me sonrojo
— ¿me estás siguiendo? — le respondo levantando las cejas
— No del todo, me invitaron aquí y acepte pensando en la posibilidad de volver a ver ese precioso vestido — me mira el escote esta vez y luego vuelve a hablar — no te había visto en toda la noche así que creí que no estabas aquí pero luego vi a Alan bailando con una rubia así que me puse en plan de buscarte pensando que estarías sola
— ¿A..Alan bailaba con una rubia? — el solo asintió — ¿y estaban muy acaramelados?
— Mira yo no debería decirte esto porque no me incumbe pero si tengo la posibilidad de ayudar al sexo femenino siempre lo haré así que sí se notaban bien encariñados la verdad — me dice preocupado por mi reacción y yo solo atino a bajar la mirada, ya no sabía que hacer
— Ve hacia allá, dile algo a ese idiota que cree que se puede salir con la suya mientras tú estás aquí — me alienta Elliot pero yo solo me quedó mirándolo
— Yo sabía que el tiene algo con ella....
— ¿Estás de broma cierto? — me pregunta atónito y yo le niego con la cabeza — Charlotte tienes que terminar con ese tarado
— Por supuesto que no — le digo enojada por semejante comentario
— ¿Estás loca o qué? Ni yo le hago eso a las mujeres — me dice tomándome de los hombros para mirarme mejor
— Lo amo ¿ok? Simplemente no lo puedo dejar aunque me engañe — lo miro fijamente a sus hermosos ojos miel
— ¿Y que pretendes hacer? — no le respondo nada — ¿vas a quedarte a esperarlo a que termine de bailar con esa zorra y que luego vuelva contigo como si nada? — me pregunta molesto
— Escucha Alan no es malo ¿si? Además no te hagas el santo conmigo, yo sé perfectamente que tú eres peor que Alan así que déjame en paz — le digo alejándome de su agarre pero me vuelve a tomar del brazo para que yo lo vea
— Sé que no soy ningún santo pero yo no tengo una novia, puedo hacer lo que se me da la maldita gana y las chicas que llevo conmigo a mi departamento saben perfectamente a lo que van — me dice molesto
— Me da igual lo que hagas, yo solo iré a sentarme y esperar a que mi novio me busque — digo mientras me alejo de Elliot
— No, no le darás la satisfacción a ese imbécil, ven, esta noche será una de las mejores — me dice tomándome de la mano y llevándome a la barra
— Déjame Elliot en serio — le digo molesta mientras trato de zafarme de su agarre pero se me es imposible
— ¡¡quiero todo el tequila que se pueda comprar con esto!! — le grita al barman mientras le pone en el mesón 100 dólares y por supuesto el hombre lo complació de inmediato
40 vasitos de tequila habían frente nosotros, yo estaba anonadada eso no lo podríamos tomar sin quedar con un coma etílico
— Estás loco si crees que yo tomaré tanto
— Tal vez me pase un poco pero no importa, después que saque cualquier persona que quiera tomar un poco — me sonríe despreocupado
— eres un derrochador — le digo
— deja de reclamar por todo y toma un vaso — me dice mientras me pasa uno y yo solo lo recibo y luego el toma otro y me hace un gesto de que hagamos un salud y yo lo acepté
Nos tomamos 19 vasos de tequila entre los dos, yo tome nueve y Elliot diez, yo no me sentía mal pero sentí que ya no debíamos seguir ya que dicen que el tequila es el trago más engañador de todos ya que después de un rato puede llegar a sentir su efecto
Empezaron a dar una canción el electrónica la verdad es que no la conocía pero se notaba que Elliot si
— ¡¡Ven vamos a bailar!! — me tomo del brazo y yo solo lo seguía
Nos pusimos a bailar y la verdad es que nos coordinábamos muy bien o eso es lo que sentía yo porque ya me estaba sintiendo un poco mareada pero era verdad me estaba divirtiendo mucho, Elliot es muy buen bailarín
— ¡¡¿Te confieso algo?!! — me grita el castaño
— ¡¡Dime lo que quieras!! — le respondo risueña, en verdad estábamos muy borrachos
— ¡¡desde que te apareciste en el estacionamiento con ese vestido no he podido dejar de pensar en ti!! — me dice cerca del oído y yo solo me reí
— ¿Que nunca habías visto a una chica tratar de parecer una zorra? — le digo riéndome aún más
— no creo que parezcas una zorra — me dice de nuevo al oído y acariciándome con su mano mi mejilla
— ¿en serio crees que este vestido tan ajustado no es de una zorra? — le pregunto coqueta mientras le tomo su mano izquierda con la que me acariciaba mi mejilla para que me tocara la piel que dejaba ver el escote, siento como sus dedos tan suaves bajan por mi cuerpo hasta el final del escote luego me mira a los ojos y yo los miro también
— Eres preciosa — me susurra y aunque la música este demasiado fuerte yo igual lo puedo escuchar, me siento tan atraída hacia él... pero solo le sonreí
Elliot me tomo de la mano y me dirigió fuera de la pista de baile yo no entendía adónde íbamos pero la verdad es que no me interesaba preguntar luego que salimos de entre la gente me agarro de los hombros y me acorraló contra la pared y junto nuestras frentes y yo solo me empecé a reír de lo cerca que estábamos pero él solo me miraba a los ojos sin ningún gesto.
—¿Que haces? — le pregunto risueña
— Quiero besarte — me responde pero no me dejo contestar y unió nuestros labios primero fue lento pero ya después subió el ritmo de nuestro beso
Empezó a bajar sus manos por mi cuerpo hasta llegar a mi trasero el cual apretó con ambas manos, luego bajó un poco más y me tomo de los muslos para levantarme y que mis piernas hicieran un candado entre sus caderas, yo le pase mis brazos por su cuello para poder afirmarme mejor pero sin deshacer nuestro beso, me estaba volviendo adicta a ellos, no quería que se alejara pero lo hizo, empezó a bajar sus besos por mi cuello y yo solo eche la cabeza hacia atrás para darle más espacio para los besos
Me sentía tan bien, hace mucho tiempo que no sentía tanta pasión. Me encantaba el camino de besos que estaba haciendo en mi cuello pero lo necesitaba en mis labios así que lo tome con mi mano del mentón y lo obligue a que me besara de nuevo y él aceptó gustosamente
— Eres como una droga, te necesito — me dice entre besos
— Aquí me tienes — le susurro mientras lo sigo besando y siento cómo camina conmigo en brazos y siento que abre una puerta y cuando hecho un vistazo veo que estábamos dentro del baño de hombres, Elliot nos metió dentro de un cubículo, una vez que lo cerró me siguió besando tan intensamente como antes pero esta vez con más fervor, me salían gemidos de la boca que eran inevitables.
Elliot pasó una de sus manos por mi espalda hasta llegar al cierre de mi vestido el cual lo empezó a bajar lentamente mientras seguía besando mis labios y yo solo me dejaba llevar por el momento
Una vez que me bajo el vestido me quedo mirando hambriento, yo no llevaba sujetador así que estaba completamente desnuda de la cintura para arriba frente a Elliot quien me empezó a besar aún más frenético, esta vez besando mis pechos y yo no me podía sentir más en el cielo
Hasta que luego recordé a Alan mi amado novio y ahí fue donde todo se fue a la mierda sentí como volví a caer en la tierra aleje rápidamente a Elliot de mi y este me quedo mirando extrañado ante aquel acto
— no puedo creer lo que he hecho — le digo muriéndome por dentro y tratando de ponerme mi vestido lo más rápido posible
— ¿Que rayos pasa? — me pregunta Elliot acercándose a mi pero yo lo vuelvo a alejar
— No me toques, yo tengo novio — le digo mientras abro a la velocidad de la luz el pestillo del cubículo en el que estábamos
— Alto Charlotte — siento como me toma del brazo y yo me volteo para mirarlo y esto me hace sentirme tan asqueada ya que Elliot tenía todo mi labial rojo en su boca y lo que más me hace sentir culpable es que se ve tan sexy con mi labial todo corrido — ¿realmente quiere irte con ese imbécil? A quien te dejó sola y que en estos momentos lo está pasando increíble con su amante.
Buena pregunta, ¿realmente quiero seguir siendo una tonta?