Narra Escorpio:
Después de ver esa ... escena, preferí irme y dejar a los "tortolitos".
No sabia si estaba enfadado o decepcionado. En verdad nunca me había senido así, y era raro.
Era rara esa opresión en mi pecho, ver esa misma imagen repetirse una y otra vez en mi cabeza, sentir tanta rabia que no podía mostrar de ninguna forma ya que la impotencia me jugaba una mala pasada.
Sentía como si la necesitara a mi lado pero sin embargo la quisiera lo más lejos posible, asi tal vez esta mierda acabaría.
Aun que si seguiamos este camino, debería irme acostumbrando a estas escenas y muchas más...
Intenté disuadirme de todo a mi al rededor durante las demás horas de clase, pero no podía.
Hoy era un día horrible, y ni siquiera Leo se escapaba de eso. El también estuvo raro, pero sinceramente no me apetecía pregunarle.
Asi que simplemente pasamos el día juntos, vagando como almas en pena...hasta que llegó Cancer al salir del instituto.
-¡Hey chicos!
Mientras se acercaba a nosotros, su sonrisa amplia de siempre iba desapareciendo.
-¿Y a vosotros que os pasa? Pareceis muertos vivientes.
-Pf, que exagerada. Aun que esté así mi exquisito y bello rostro y cuerpo serrano siguen genial -dijo Leo ofendido.
-No te sale estar deprimido -dije mirandole negando con la cabeza.
Él solo se encogió de hombros y miró hacia otro lado, pensativo.
-Vale...-dijo extrañada alargando la A.- Escor, ¿vienes? Piscis y yo vamos a comer y después vamos al centro comercial.
Cuando la mencionó,por un momento se me hizo un nudo en la garganta haciendo que mi mal humor volviera.
-Ahora mismo Pi está ocupada -dije conteniendome apretando algo la mandíbula.
No se si fue mi reaccion o la curiosidad lo que causó que esta me mirara extrañada y curvando la ceja.
-¿Ocupada?
-¿Con qué? -completó Leo con la misma curiosidad y sospecha.
-Eh, dejar de mirarme así e ir a buscarla si quereis, yo esperaré aquí -esta vez irritado
-Vale, pero no pienses mucho en mi mientras no estoy. Nos vemos mañana Escorpioncito, adiós Cancer de pulmón -habló con burla pero sin demasiada alegria en su rostro mientras se iba andando con las manos metidas en los bolsillos.
-Wow si que esta raro...
Soló me encogí de hombros enfadado de nuevo, al recordar la "escenita".
-Voy a buscar a Pi, quedate aqui.
La seguí con la mirada hasta verla empujar la puerta para volver a entrar de nuevo al instituto.
Ya todo el mundo se habia ido a casa, asi que estaba yo solo.
Los rayos de sol ya empezaban a hacerse mas calidos, sin ser calurosos, y ayudaron a tranquilizarme antes de que viniera Pi y Cancer.
Lentamente me senté en el borde de la gran fuente que habia a mi lado mientras soltaba un largo y pesado suspiro.
Mi vida ultimamente habia cambiado drasticamente a como era antes.
Ya no sentia la necesidad de beber alchol a la minima que algo me agoviara, ahora estaba centrado en mis estudios, dentro de poco terminaria el instituto e iria a la universidad para estudiar zoologia. Al principio todo eso me animó micho y me sentí orgulloso incluso, sin embargo ahora todo eso me agoviaba, por primera vez tenia una meta, y me preocupaba en parte cumplirla, por que así tendría menos tiempo para po ejemplo Pi, y por el otro lado me preocupaba no poder cumplirla, decepcionar a mis amigos y sobretodo a ella.
Cada vez veía mi futuro más claro y a la vez más difumimado. Cada vez sentía que la madurez se acercaba peligrosamente, y me daba algo de miedo tener tantas responsabilidades, miedo de distanciarme de otras cosas por las responsabilidades de otras.
No me podía imaginar ya sin el idiota egocentrico de Leo, o sin las tontas peleas de Leo y Gem, sin las idioteces que hacian y decian juntos, sin las ocurrencias de Cancer, sin sus ojos azules que me miraban mal cada vez que estaba apunto de hacer algo mal y me corregían. Y sobre todo sin ella. Sin mi pequeña pez.
Antes era perfecto pasar tiempo con ella, pero ahora sentía como si cada minuto que pasara con ella fuera el ultimo, como si hubiera un reloj contando los segundos, minutos y horas que quedaban para distanciarme de ella.
Estaba totalmente perdido.
Me quede unos minutos más pensando rendido, en todo esto, hasta que pude ver a unos metros a las dos chicas hablando animadamente mientras se acercaban.
-Hola Escor -dijo con su dulce voz dandome un ,demasiado, corto abrazo. O al menos lo fue para mi.
-Vamonos ya o me comeré uno de vuestros carnosos brazos. Y hacerme caso, no me arrepentiré.-dijo Can mientras se diriguia rapido al coche.
La seguí hasta su coche, sientiendo la mirada de Pi sobre mi, y me reprimí de devolverla la mirada.
Narra Piscis:
Ultimamente sentía que algo no andaba bien en Escor, pero intenté por todos los medios no exagerar las cosas. Tal vez solo estaba agoviado por los estudios, al fin y alcabo, el ultimo curso del instituto es el más dificil.
Mientras ibamos en el coche la cosa no cambió mucho.
Cancer intentó animar el ambiente cantando las canciones que ponian en la radio, y yo también la seguia el rollo, tal vez así conseguiriamos que se riera de nosotras, como él solia hacer.
Pero solo se limitó a mirar por la ventana sin si quiera mirarme ni una vez.
Al rato llegamos al centro comercial y fuimos directos al bar que soliamos ir. Era un pequeño y acogedor lugar, que tenía más ambiente de cafeteria.
Todo era muy colorido y moderno. Las paredes y sillas blancas hacian juego con los modernos muebles marrones, que daban un toque rustico, mientras que los manteles hacían juego con los pequeños detalles verdes clarito que habia dispersados por el local.
Sin duda aquí habiamos pasado momentos muy divertidos con los demás, y siempre pasabamos el rato riendo sn parar. Sí, seguramente eso le animaria.
Pero para mi sorpresa no funcionó. Cancer y yo hablabamos animadamente, y yo intenaba mter a Escorpio en la conversacion pero solo contestaba con palabras cortas, asi que poco a poco Cancer y yo también acabamos calladas como él, haciendo el ambiente incomodo.
Era raro, contestaba con pocas palabras, como si estuviera molesto, pero su tono de voz era suave y tranquilo...
Finalmente cuando terminamos de comer, Cancer dijo que se iria a una tienda de ropa, mientras Escor y yo ibamos a una tienda de libros.
-¿Quieres que vayamos a otro sitio? ¡Ah ya se! Dijistes que querias ver una peli...¿como se llamaba? Ag...no me acuerdo...¡O podemos dar una vuelta por el jardin de afuera! Todavia no habran salido muchas flores pero...
-Pi, no me importa a donde vayamos -dijo otra vez con el mismo tono suave de antes.
Ya no sabia que hacer para animarle. No sabia como debia tratar a este Escorpio de ahora. ¿Que mosca le habia picado? ¿Y sus burlas? ¿Y su sonrisa picara, y su voz algo grave? Me empezaba a desesperar.
Al fianal acabamos en un banco del jardín de detras del centro comercial. Como pensé, las flores aún no habian salido, y por lo tanto no había nadie más.
De nuevo apareció ese silencio. A él no parecía incomodarle, estaba demasiado perdido en sus pensamientos como para darse cuenta. Ya había echo mil tonterias en lo que llevabamos de día para que al menos se riera, pero su rostro seguía igual, neutro.
El Escorpio de siempre me hubiera tirado del banco para hacerme enfadar, o me hubiera echo cosquillas, o tal vez se hubiera tumbado apoyando su cabeza en mi...
Pero ahora parecia como si el no estuviera alli. ¿Y si ya no queria ser mi mejor amigo? ¿Le habia echo algo? ¿Que le pasaba a este tremendo idiota?
Al comprovar que la situacion no cambiaba empece a sentir que mis ojos se humedecian. Puede parecer una tonteria, pero la impotencia de no poder anmarlo, como siempre hacia, me daba a pensar que tal vez ya no le importaba como antes, tal vez ahora se aburria conmigo...tal vez...se abria cansado de mi...
Y pensando en eso la primera lagrima se escapó.
La intenté secar rapidamente, pero como si hubiera sonado una alarma, de pronto Escorpio se giró hacia mi, sorprendido.
-Pi...-dijo sin salir de su asombro.
-Ah...no es nada, solo...es que me pica...-decia atropelladamente mientras me secaba los ojos, pero de repente empezaron a salir mas lagrimas junto con un sollozo incontrolable.- sólo..,
-Hey...-dijo hacercandose a mi y secandome las lagrimas- ven.
Me cogió cuidadosamente y me sentó en sus piernas sujetandome por la espalda y mis piernas para que no me callera.
Después de unos cuantos sollozos más y algunas lagrimas, las suaves caricias de Escorpio en la espalda me calmaron, pero así logró confundirme más.
-¿Que a pasado? -dijo aún con el mismo tono.
Antes no me había gustado ese tono, pero ahora que estaba entre sus brazos, ese tono me tranquilizaba más.
-E-s que, llevas to-todo el día raro. Primero... creía que estabas enfadado, por que no me mirabas, luego me preocupé por que no hablabas, y estabas distante, y...y luego...- intentaba hablar con voz entrecortada gracias a algunos sollozoz que salían sin querer.
-Y luego...pensé...pensé que...no sé, que tal vez ya no...ya no querías estar más conmigo...-decia cada vez en tono más bajo mientras me ruborizaba por la verguenza ocultandome entre su cuello.
Oí una suave risa mientras me abrazaba.
No sabria decir cuanto tiempo estuvimos así, pero después de ese tiempo, recorrió todo mi cuello, en apenas un suave roce con su nariz hasta llegar a mi oreja, la cual mordió juguetón para después susurrarme:
- Lo siento, solo estoy algo cansado. Necesitaba pensar. Pero quería venir contigo. Siento haberte echo pensar eso.
Sentí como si una corriente electrica hubiera pasado por todo mi cuello, provocandome...algo muy extraño.
Me volví a aferrar fuerte de él haciendo que volvieramos a estar abrazos, totalmente pegados.
Y supe que mi Escorpio de siempre había vuelto cuando cortó el emotivo momento con un mordisco suave en la oreja, de nuevo, esta vez haciendome reir.
-¿Vamos a mi casa? -Dijo ya más animado.
En cuanto vi su sonrisa de lado, la mia se ensanchó más. Además, siempre que ibamos a su casa, significaba una cosa: mimos.
Hace tan solo tres semanas,antes de que empezara a estar raro, soliamos ir al menos dos veces a la semana a su casa, donde terminabamos dormidos después de unas agradables caricias. Y sí, las había echado de menos.
-Vamos- dije levantandonos llendo a por Cancer.
°°°°°°°°°°°°°°°°°°°°°°°°°°°
-Al fin....-dijo Escor abriendo la puerta- Cans es muy agresiva conduciendo.
-Y que lo digas, ya creía que el chico del coche de delante saldría a pegarla una patada...no me hubiera extrañado...le pitó como seis veces...y la que salió a darle la patada fue ella...
Mientras subiamos las escaleras riendo recordando el momento.
Segun estuvimos delante de la cama, nos tiramos exageradamente a ella.
-Recuerdame que no vaya nunca con ella a un centro comercial...¡me duelen los pies de recorrer tantas tiendas!-dije con tono infantil.
Por un momento, la habitación quedó en silencio. Y me sentí nerviosa cuando noté sus dedos recorrer mi cadera en algo parecido a una caricia, para después posar sus manos en esta, atrayendome hacia él.
No recordaba que esto fuera tan..raro...no recordaba que mi corazon se hacelerara tanto cuando él hacía esto antes.
Me atrajo hacia él quedandonos cara a cara. Me quedé mirando por un rato sus ojos oscuros, y disfrutando de las "cosquillas" que sentía por dentro por cada caricia que brindaba a mi pelo. Estuvimos así un rato, sin decir ninguna palabra, no nos hacian falta en realidad. Me encantaba su rostro ,ahora, tranquilo. No solia ser muy comun en el. Y segun pasaba mas el tiempo, me iba dando cuenta de pequeños detalles de los que no me habia percatado en otras ocasiones.
Algo habia cambiado en el, en nosotros. No tengo muy claro si era bueno o malo, pero ahora solo queria sentir sus suaves caricias, ver sus oscuros ojos recorrer todo mi rostro, con una mueca seria, que suavizaba su mirada dulce.
Toda la tranquilidad que habia adquirido gracias a sus caricias, desapareció de golpe cuando sus ojos por fin conectaron con los mios. Me cogió y me levantó poniendome encima de el, volviendo a quedar cara a cara, pero esta vez aún mas cerca.
Su nariz fue hacia la mia, dandome un "beso de esquimal" que me hizo reir. A veces Escorpio podia ser muy infantil.
Narra Escorpio:
Había echado demasiado de menos sentirla así de cerca, sentir de nuevo sus delicadas manos recorrer mi piel...
Antes lo hacíamos como si fuera algo normal, natural. Pero algo cambió, no se cuando exactamente, pero empecé a sentir como si el roce de su piel con la mía fuera algo muy íntimo, como si yo no tuviera permiso para hacer eso.
Y ahora que lo volvía a sentir...era muy diferente...pero tenía en mi el mismo, o incluso más fuerte, efecto que la droga. Tal vez me arrepentiria de esto, de haberme dejado darme la satisfacción por un rato, para que después el reloj que me aprisionaba me ahogara cada vez más hondo.
Durante este corto rato, ella aun no había echo nada, solo acurrucarse en mi pecho. Sin embargo, empecé a sentir unas pequeñas cosquillas en este. Primero hizo que me tensara y pusiera todos mis sentidos a flor de piel, pero después me relajé y la apreté mas contra mi pecho, casi inconscientemente.
Y así, entre cortas risas, suaves caricias, susurros y pequeñas muestras de cariño, esta pequeña pez consiguió tranquilizarme y olvidarme de todo, como solo ella podia hacer, aun que tal vez ni si quiera lo supiera.
Okay, lo se, lo se.
Mil años han pasado ya desde que actualicé.
Lo siento, pero sinceramente ya no me gusta tanto escribir esta historia y de echo, hace poco leí los primeros caps de la "historia" y me dio hasta verguenza...Pero bueno supongo que era mi primera vez escribiendo :"3
Tengo una historia Piscorpio entre manos...ya la hubiera subido si no fuera porq no tengo portada :"v
Y se nota que esta muchisimo mejor narrado q esta :"D
Pero bueno...intentare actualizar...
UN APACHO FOR YOUU
:3 con cariño, una friki :3