-Eres demasiado buena para mí, debes alejarte o todo este infierno en el que vivo también te consumirá
-No puedo, no puedes pedirme eso, yo sé que tú puedes cambiar y yo pienso ayudarte a salir de este mundo
-Diablos, que ya no hay nada que se pueda hacer - no puedo traerte conmigo a este mundo, espero que me perdones algún día por esto que voy hacer pero ya no hay marcha atrás, eres lo mejor que me ha pasado en la vida y porque te amo tengo que alejarte - ¡LARGATEEE!!!! ¿No entiendes acaso? Simplemente fuiste un juego, una aventura como cualquier otra ya, me diste lo que necesitaba y ya no me sirves para nada, así que por favor vete – las palabras que salían de mi boca no concordaban con lo que sentía por dentro pero tenía que protegerla de toda esta mierda
-Una aventura, una más – susurro ella en voz baja
-Si eso fuiste para mí - su mirada me mataba, venía esa muestra de dolor en ellos y me sentía terrible porque yo era el causante de ese dolor pero es lo mejor – ¿Qué esperas? Vete
-No te creo nada, pero está bien - dijo entre lágrimas - si quieres que me vaya de tu vida así será, solo espero que cuando te des cuenta del error que estás cometiendo no sea demasiado tarde, porque cuando vayas a buscarme yo ya no estaré para ti – dio media vuelta y se fue, se fue lo que más amaba, lo que más quería, lo que tanto adoraba, pero las cosas tenían que ser así, tenía que olvidarla, tenía que dejar de pensar en ella, así que saqué mi celular y me dispuse a llamar a Josep, mi mejor amigo. Al instante contesto y no lo dejé ni que hablara – prepara todo estaré allí en 20 minutos – y corté. ¿Qué mejor que una carrera para olvidarla? Decía en mi mente.