Manejo por varios minutos hasta la carretera 81 y no tardamos en divisar el auto rosado... admito que da risa tener un coche de ese color y con una placa que diga "Piedra Fría", pero tengo que evitarla y mantener mi postura de oficial seria de la policía.
Apago el motor y tomo el sujetapapeles que metí en la guantera. Caminé hacia el lado del conductor y para mi sorpresa, el conductor es John Henry uno de los amigos de las Hermanas Earp.
—Hey...— saluda desde el interior del automóvil.
—Ibas 90 kilómetros arriba del límite— le indico al agacharme para quedar al nivel de la ventanilla del conductor-, necesito tu licencia de conducir y registro del coche.
—Oficial Haught, usted me conoce y... no tengo ninguna de las dos.
—Ok
Comienzo a rellenar la hoja de la multa cuando escucho como Waverly abandona la patrulla y viene hacia nosotros pidiéndole una explicación a John.
—¿Serias tan amable de arrestarme de inmediato? —Henry replica al ver a la molesta castaña viéndolo.
—Lo siento, Piedra Fría, no te librarás de la multa— digo al darle la hoja con los detalles de su infracción.
Después de darle su multa regreso a la patrulla, pero la que se queda platicando con John Henry es Waverly, él ya es como de la familia tomando en cuenta que está con Wynonna, así que deben tener una relación muy cercana. Al entrar a la patrulla y viendo que su plática va para largo, me tomo tiempo para terminar las barras energéticas y el café que llevaba conmigo como un pequeño desayuno.
Voy por la segunda barrita cuando Waverly regresa a la patrulla con un semblante pensativo, no sé lo qe sea que haya hablado con el dueño del mostacho, pero la dejó bastante descolocada.
—Hey, ¿todo bien? —interrumpo lo que sea que haga líos en su cabeza.
—Si, es solo que... —se queda mirando hacia un punto invisible en el vidrio delanteros del auto—, olvídalo, cosas mías.
—Sabes que todo lo tuyo me interesa— pongo mi mano derecha sobre su mano izquierda, pero al tener guantes no es posible sentir plenamente la sensación del toque—, ok, quiero que confíes en mí.
—Lo hago, solo que... es sobre Wynonna y Doc, pero creo que no debería entrometerme.
—Ok, es lo más sensato, tú tranquila— le digo para después depositar un ligero beso en sus labios.
Arranco el coche para regresar a Purgatory, primero paso a dejar a Waverly a las tierras de las Earp no sin antes volverle a dar un beso, ella dice no regresará a la estación porque no tiene nada que hacer ahí. Pero yo si tengo que regresar, hay papeleos que hacer.
Al ir doblando en la esquina antes de llegar a mi lugar de trabajo, noto como Wynonna y Dolls justo van entrando mientras son seguidos por al menos 6 mujeres con abrigos blancos. Eso es extraño.
Pasan al menos 3 horas en lo que Dolls y Wynonna me dan informes sobre lo sucedido con esas chicas, lo que al final resulta que las rescataron de una red de trata de mujeres, les dije que podríamos hacer la búsqueda de los captores, pero ellos nos dijeron al Sheriff y a los elementos policiacos que ya lo habían hecho y tuvo resultados infructuosos. Así que no me no nos quedó más que buscar en los registros de personas perdidas si es que las chicas pertenecían a algún perfil, y si, todas eran de Purgatory y pueblos cercanos, a excepción de una de ellas, pero Wynonna dijo se haría cargo de eso.
Estuvimos hasta altas horas de la noche haciendo los papeleos y comunicándonos con los familiares de las chicas, durante todo el día veía como llegaban personas llorando por haber tenido noticias de sus hijas, verles reunirse finalmente y salir para volver a rehacer su vida.
Rehacer mi vida. Sí, eso tengo que hacer. Creo que en Purgatory al fin encontré mi lugar en el mundo.