—Espera, ¿Esa no es la chica que trabajaba con los antiguos directores?— pregunto Miki susurrando.
—Si mal no recuerdo se llamaba Blue, pensé que después de derrotar a Cassidy y Kubral no volveríamos a tener problemas— no entendía que hacía ella aquí.
—Yo solo espero que Cassidy y Kubral no hayan vuelto— Dulce sonaba preocupada.
—Lo mejor será que nos acerquemos más para enterarnos— Miki intentó acercase sin que la escucharan ni la vieran.
—Ten cuidado Miki— le pidió Dulce— Urie, ¿Tú crees que tenemos que avisar al profesor Arkan?
—Primero nos informaremos de lo que ocurre, luego ya veremos qué hacer— mi mirada estaba fija en Blue.
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—Blue ya hemos hablado de esto— le respondí un poco fastidiado.
—Tú y el tonto de tu amigo sois los que os habéis metido en esto, así que ya sabes lo que debes hacer— me amenazó— Si no, cierto angelito perderá sus alas— me beso en la mejilla y se fue.
Desde que Gas y yo descubrimos a Blue, esta no había dejado de darnos problemas, por suerte no le dijo nada a Reina. Una parte de mi seguía pensando que en realidad ella no quería hacer daño, pero sus alianzas no ayudaban en nada .
— ¡AY! — se quejo una voz.
—Pero que...— al darme la vuelta vi a Gas— Gas ¿Qué haces aquí? Te dije que te quedaras en la habitación, si los dos faltamos sospecharan.
—Lo sé, pero me desperté porque tenía hambre— se quejo— Y como tardabas tanto fui a buscarte.
—Bueno, pues como ves ya lo he solucionado todo, así que volvamos a la escuela— comenzamos a volar— Ya que estamos, pasemos por la cafetería— propuse, y desde sus gafas de sol fui capaz de ver cómo le brillaban los ojos.
— ¡SI!— gritó emocionado.
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—Un poco más y me pilla— se quejo Miki quien volvía con nosotras.
— ¿Estás bien? — le preguntó Dulce.
—Sí, solo me he golpeado en la rodilla con una piedra— informo Miki.
— ¿Te has podido enterar de algo?— esperaba tener información para ver si debíamos informar a los directores.
—Solo de que ha aparecido Gas diciendo que tenía hambre y de que Sulfus se ha negado a hacer algo— recordó, seguramente intentara que no la descubrieran y por ello no pudo enterarse de mucho.
—Bueno, ¿Y ahora qué hacemos?
—No lo sé Dulce, pero no tenemos suficiente información como para avisar al profesor Arkan y pienso que no debemos contarle nada de esto a Raf, es mejor no preocuparla— emprendimos el vuelo y volvimos a la escuela. Las tres entramos a mi habitación para ver a Raf.
—Esta dormida— afirmo Miki.
—Dejémosla descansar, ya le contaremos lo de Sulfus cuando llegue el momento— me acerque a mi cama dispuesta a dormir— Será mejor descansar.
—Tienes razón Uri— Dulce bostezó— Necesito dormir bien para estar perfecta mañana.
—Nosotras ya nos vamos— Miki y Dulce se aproximaron a la puerta— Hasta mañana.
—Hasta mañana— respondí yo.
No pude dormir bien. No dejaba de pensar el Blue. Sulfus ya nos había demostrado de lo que era capaz con tal de proteger a la escuela, y a Raf. De igual manera, no entendía porque esta vez volvía a no confiar en los demás, Arkan y Tempel estaban siempre de nuestro lado, y aunque el año pasado no estuvieran, este año nos pidieron que fuéramos sinceros ocurriera lo que ocurriera. Solo esperaba que los sucesos del año pasado no se repitieran.