Nuestros antepasados creían que no nacían completos. Había alguien ahí fuera con una parte de su corazón y de su alma. Cuando encontraran a esa persona, entonces ellos eran uno.
(Eden Cole)
* * *
-Estás perdido -había dicho Ragnor a Magnus.
Su alfa había contestado con una mala mirada. -¿A qué te refieres? Vamos a encontrar a su hermano...
-No hablo de eso. Estoy seguro que lo harás. Me refiero al hecho de que tú, el gran alfa Magnus Bane, está siendo dominado.
Los ojos verde dorado se entrecerraron. -No estoy siendo dominado, Ragnor. Es mi Único y decido darme libremente, me va a tomar, lo sé y lo soy a disfrutar enormemente, pero no va a dominarme...
-Estoy listo -la voz de Alec lo hizo interrumpirse.
Al instante sus manos se buscaron y sus dedos se entrelazaron. El contacto ya era completamente necesario.
-Gracias -Alec se acercó su oído para decirlo. Magnus pasó su mano libre por aquella mejilla pálida y caliente.
-No tienes nada que agradecer. Ahora somos uno, ¿recuerdas? Cuentas conmigo siempre.
-Todavía no lo somos -había un claro puchero en la réplica de Alec.
Magnus giró un poco su cuerpo para encontrarse con aquellos ojos azules, sus manos seguían entrelazadas, y la otra seguía en su rostro cuando se acercó y susurró contra sus labios: -Para mí ya lo somos.
Se besaron con calma y pasión contenida. Bastaba un sólo toque para entender la necesidad y la intensidad de la conexión entre Únicos. Cada roce de labios, choque de sus cuerpos, piel contra piel, querían, necesitaban, más.
Se separaron con las respiraciones agitadas. Los ojos oscurecidos. Y pequeñas sonrisas de labios hinchados.
-Creo que podremos lograrlo -dijo Alec.
Magnus frotó sus narices antes de dejarlo ir. -Yo no lo creo...estoy seguro.
Sus miradas se encontraron y Alec de verdad esperaba no tener que renunciar a esto, porque sentía que ya no podría vivir sin él.
-Y tú, Ragnor, vete ya. No sé qué sigues haciendo aquí. Forma escuadrones de búsqueda. Tú, Raphael, Cat, y Simon lideren los grupos.
Ragnor asintió y después de un "Ten cuidado" corrió fuera del terreno de la manada Lightwood. Un momento después se escuchó su aullido y Magnus, aun en su forma humana, respondió con otro que erizó la piel de Alec y fue directamente hacia su entrepierna, el deseo ardiendo, y su lobo pidiendo salir y encontrarse con su compañero.
No tuvo que esperar demasiado. Empezaron a caminar con calma para después desnudarse en aquel terreno donde minutos antes habían corrido sintiéndose libres y felices.
No era el momento pero no podían dejar de admirar el cuerpo de su compañero. Acariciarlo con la mirada y ansiar el momento en que manos y boca ocuparan su lugar.
-Prómeteme que no vas a morir -pidió Alec, con voz lastimosa, antes de empezar la transformación.
Pronto Magnus tenía frente a él al gran lobo pelinegro de feroces ojos azules.
Los ojos verde dorado no se despegaron de ellos mientras, sin palabras pronunciadas, preguntaba "¿Por qué me pides eso?"
Alec espero a que su compañero fuera un lobo también para restregar su hocico contra el costado de Magnus. "Sólo prómetelo. Te necesito vivo".
Magnus dio un suave mordisco cerca de la oreja de Alec. "Vamos a vivir mucho tiempo más...juntos. Yo también te necesito".
El aullido de Alec, fuerte y claro, desgarrador, rompió el silencio de la noche. El primero en responder fue Magnus. Después, uno a uno, los miembros de la manada Lightwood. Y allá a lo lejos, el beta de los Bane.
Se miraron una última vez antes de empezar la búsqueda. Lo suficientemente juntos para que sus pelajes se rozaran.
CONTINUARÁ...
ya dije que amo describirlos de lobos? :3
espero que les esté gustando como va esto, gracias por leer y hasta el siguiente ❤