Parece que fue hace poco cuando arribé en la universidad. Pasó poco tiempo, algunos semestres quiero decir, para darme cuenta que no era lo mío. Sin embargo, hasta el día de hoy me pregunto ¿Por qué y para qué lo escogí en aquel momento?
Al día de hoy, 9 de marzo de 2018, la química parece ir con mi estilo y mi personalidad.
-Joven... ¡JOVEN! -Escuché a pocos centímetros de mí -¿Piensa usted que con esa poca apreciación por la clase logrará aprobar el parcial próximo? -preguntaba amenazante el profesor de física. Simplemente acepté el viejo discurso del maestro-alumno, proseguí con la mirada atenta y la clase continuó su curso. Finalmente, termina un día más en ingeniería, aunque mi sorpresa fue mayúscula cuando a plena salida de la institución un brillo iluminaba con parcialidad mi rostro. No olvidaré la llamarada en aquel depósito de abarrotes, el atardecer parece opaco ante esa rojiza imagen. Bomberos, policía, incluso ajenos al acto, todos con los ojos puestos en perfecta circunferencia, miradas inútiles que buscan saciar el morbo. Por supuesto, yo me incluyo, pero la diferencia es que el camino para mi siempre es el mismo. Avancé despegando a ratos mi asombro por cruzarme con tal escena. Y así me encontraba, ante la pregunta que nadie hace y nadie podría hacerme... ¿Cuál era el motivo de sentir aquella descarga de gozo ante la brisa de las cenizas deambulando?
Llegué a mi casa, aventé la mochila, me serví un vaso de agua y recibí la primera llamada.
La sonrisa que causa tu muerte
By Fickerman
El ex-estudiante de criminalística, Arshell Xplane, es buscado por sus antiguos compañeros de clase, Sarika S... More