-¿Estudiaste para el examen?-pregunto Kira acercándose a Luna.
-¿Y eso a quien demonios le importa?-contesto Luna sorprendido a la kitusne.
-¿No te interesa tu nota de biología?-pregunto sorprendida.
-Ya lo tengo resuelto-contesto la pelirroja levantándose del pupitre-Nos vemos... luego-dijo y salio del salón.
-Aburrido-dijo Luna caminando por el pasillo, entro al baño de damas y se aseguro de que no hubiera nadie en los cubículos, le puso seguro a la puerta, se paro frente al espejo y retoco sus labios rojos.
-¿Lo conseguiste?-miro al espejo y el nogitsune estaba allí, volteo pero no había nadie mas a su lado así que solo era su reflejo.
-Aun no reparan las centrales eléctricas, tengo tiempo de sobra-dijo Luna mirando sus labios rojos.
-Tu lo tienes, no yo-dijo él.
Luna rodó los ojos.
-Bien-salio del baño, no había nadie en los pasillos. No había campana pero el entrenador andaba gritando con un megáfono cada vez que una clase iniciaba.
Luna camino hasta la alarma de incendios, le dio un choque de energía para hacerla funcionar y la activo logrando que sonara en todo el instituto. Se alejo a paso seguro y tranquilo, mientras todos corrían en dirección a la salida ella entro a la oficina de Morrel, la emisaria hermana de Deaton que le gustaba jugar al papel de profesora de francés para vigilar a los chicos.
-Que estúpida, si lo dejo-dijo Luna al ver el bolso en el suelo y lo tomo. Salio de la oficina y abandono el instituto por la salida del campo para que nadie la viese.
La pelirroja tanteo su paso al bosque hasta que llego a los más profundo, ella respiro el aire fresco cerrando los ojos y dejo caer el bolso a suelo. Se arrodillo junto a el y comenzó a sacar las hierbas, y tomo el colgante que la emisaria estaba protegiendo.
-Dejar lo que se supone que estas protegiendo, que estúpida-dijo Luna colocándose el colgante con forma de punta de flecha, lo escondido de bajo de su blusa. Tomo las hierbas y formo un circulo con ellas, corto la palma de su mano con la daga que tenia guardada en su espalda y dejo caer una considerable cantidad dentro del circulo.
Dos onis llegaron a ella cargando a un chico inconsciente y lo dejaron caer dentro del circulo.
Luna era tan fuerte que conseguía manifestar a los oni de día pero solo lo había conseguido hacer con dos por que cuando intento hacerlo con más todos se desintegraron.
-¡No me dijiste que traerías aun chico!-reclamo Luna en voz alta molesta viendo a los onis.
<<No estaría aquí si no fuera necesario>>
-¿Quien es él?-pregunto Luna viendo al chico rubio.
<<Jeremy Tarver, lo rechazaste la semana pasada>>
-Ya lo recuerdo-dijo Luna soltando un suspiro-¿Por que él?-pregunto.
<<Esta enamorado de ti y eso lo hace más fácil>>
-Mas fácil. ¿Por que?
<<Ya lo veras, cada detalle es importante. Ahora toma el libro>>
Luna soltó un suspiro y tomo el libro, abrió la pagina marcada y se paro frente al circulo con la mano elevada hacia el chico.
-contritos corde, et tenebras meas conjungit cum amore puer cor. Chao et tenebris, nos in virtute: anathema et corpus hoc, quod scriptum amare.
Leyó en voz alta, el cielo comenzó a nublarse con oscuras nubes cargadas de agua, el circulo se levanto en un remolino de hierbas, tierra y electricidad. Luna volvió a leer las misma palabras una vez mas mientras el remolino se volvía más caótico e impredecible.
-Iubes me-grito Luna en Latín-¡Te lo ordeno!-grito esta vez en su idioma y un rayo pego dentro del remolió haciendo que Luna cayera hacia atrás y se cubriera el rostro.
-Sabia que lo lograrías-Luna abrió los ojos sorprendida y dejo de cubrirse para verlo.
-¿Lo hice?-murmuró sorprendida y él sonrió de lado.
-Lo hicimos-dijo él y extiendo su mano hacia ella-Ahora sácame de aquí, sabes que no puedo hacerlo solo.
Ella se puso de pie y tomo la mano del nogitsune y él salio del circulo.
-Vamos al instituto, Morrel sospecha de ti-dijo él y tomo la mochila de la chica y ella metió el libro allí.
-¿Y que hay de ti?¿Como debo llamarte?-pregunto Luna caminando con él sin soltar su mano y él se coloco la mochila en el hombro.
-Llámame Jeremy, nadie sospechara por que todos saben que este humano se moría por ti-él sonrió-Ahora somos iguales, eres una humana con poderes de nogitsune y yo un nogitsune con cuerpo humano... permanente-se rió amargamente.
-¿Entonces esta es ahora tu nueva forma?-pregunto Luna-Un chico de lacrosse normal.
-Por el momento, tomara tiempo para que este cuerpo se ajuste a la forma que quiero.
-¿Y esa es?
-Stiles-contesto el nogitsune sonriendo de lado.
-¿Por que?-pregunto Luna frustrada.
-Es mi favorito-él sonrió.
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-Se lo llevo. Tiene todo lo necesario para empezar con sus planes-dijo Morrel agarrándose la cabeza apunto de arrancarse los cabellos.
-Cálmate, aun no sabemos si fue él-dijo Deaton sujetando a su hermana.
-¡Esta lloviendo!¡El cielo se puso negro antes del anochecer!-grito Morrel.
-Necesitas calmarte, no arreglas nada gritando-dijo Luna que estaba parada alado de su hermana en la entrada de la veterinaria.
-¡Tu!-la emisaria intento ir hacia ella y Scott y Deaton la sujetaron-¡Fuiste tu!-grito.
-Me voy, no necesito que una loca me grite-dijo Luna con desdén y salio de la veterinaria.
-Luna es una chica normal, no entiende nada de rituales ni espíritus oscuros-dijo Deaton.
-Es verdad, ella esta siempre con nosotros-dijo Scott.
-El enemigo siempre se mantiene cerca... ¿no Stiles?-dijo la emisaria y el humano levanto la mirada.
-No lo se-dijo el humano inseguro.
-Esto es absurdo, mi hermana es malditamente normal. Es la única que no tiene problemas con este maldito mundo sobrenatural-se quejo Lydia.
-Vamos Stiles, no me digas que crees que Luna esta poseída-dijo Scott incrédulo.
-Ese día que la encontré en las gradas estaba llorando-murmuró Stiles.
-¡Sabes que!-exploto Lydia cansada de que acusen a su hermana-¡Que Luna tenga problemas con mis padres no la hace malvada!-medio grito la pelirroja y salio de la veterinaria furiosa.
-Ella tiene razón Stiles, sabes como se siente Luna con el hecho de que no puede cumplir las expectativas de sus padres-dijo Scott soltando un suspiro y soltó a la emisaria que se había calmado.
-Lo se-dijo Stiles y salio de la veterinaria con su mejor amigo.
Scott se subió al jeep y Stiles miro una vez más hacia el otro lado del estacionamiento con curiosidad sin importarle que estuviera lloviendo. Lydia se subió al coche con notables humos de molestia y Luna miro al humano y sonrió de lado traviesa antes de subir al coche e irse con su hermana.
-Hay algo más... estoy muy seguro-dijo Stiles.