" NOTA:
No puedo dejar de pensar en ti.
Me gustas tanto, maldición.
Explícame, ¿cómo puedo superarte?"
Sonriendo Lauren aprecio la linda letra de su admirador o admiradora secreta, quería saber quién era. Tenia unas cuantas semanas recibiendo estas misteriosas cartas. Su niña interior se habia emocionado y su adolescente hormonal habia hecho que Lauren quedara flechada por unas cuantas palabras.
-¿Laur?- la mencionada rápidamente guardoa en su bolsillo trasero la nota con aquella perfecta escritura, solo había una persona que escribía así de lindo y esa persona era Camila, ¿será posible qué...?- ¿Lauren?, ¿no me escuchaste?- pregunta Camila, la morena de piel porcelana sacude la cabeza antes de mirar a su mejor amiga.
-Sí, Camz. Es solo que estaba pensando en algo estúpido.- ¿algo estúpido? se pregunto Camila mentalmente.- ¿Qué pasa, Camz?
Camila sintió como sus mejillas se sonrojaban al sentir la penetrante mirada verde en ella, los ojos de Lauren eran los más lindo, según Camila.
-Yo... Mmm, ¿me preguntaba si qu-uerías ir conmigo por un helado después?- Lauren sonrío con ternura ante el tartamudeo de Camila, a pesar de que la morena era más grande y un poco más alta, le parecía tierno que la latina se pusiera así de nerviosa cuando hablaba con ella.
- ¿Por qué abría de negarme?- las manos de Lauren caen sobre las de Camila y la pequeña ojiverde la empuja consigo.-Te tengo que contar tantas cosas, ¡estoy emocionada!- pero Camila ya no prestaba atención, su mente seguía preguntándose si Lauren se había dado cuenta de que... ella era la persona que mandaba las notas.
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n/a: a partir de aquí estaré cambiando un poco los diálogos, aunque el rumbo de la historia NO cambiará en nada. Me di cuenta de que está historia tiene muchos errores y tuvo unos diálogos muy rápidos. Trataré de hacerlo un poco más lento pero sin agregar otro capítulo más.