Narra Fernan:
Me encontraba en mi silla pensando en que haría para proteger a _____ de Santiago.
Ella no debía ir a esa cita, simplemente no tenía que hacerlo.
Narra _____:
Tomé mi celular entre mis manos......!¡Santo Dios!! ERA TARDÍSIMO.
Eran a rededor de las 07:20 p.m
En menos de una hora Santiago estaría aquí y yo aún no estaba lista, tenía que apurarme.
Fui hacia mi armario, aún no sabía ni siquiera lo que llevaría.
Saque lo primero que encontré; un vestido color negro, entallado, era muy elegante, era perfecto para la ocasión.
Deje el vestido de lado y fui por los zapatos, de igual manera tomé los primeros que tenía a la vista, unos tacones negros de tacón pequeño, no quería llevar algo muy pronunciado.
Deje las zapatillas en la cama junto al vestido.
Fui hacia mi tocador y empecé a cepillarme el cabello y solo pase un par de veces la plancha por mi cabello.
Me maquille un poco y fui hacia dónde se encontraba el vestido, lo tome en mis manos y me senté en un borde de mi cama a tomar un respiro.
¿Realmente saldré con el? ¿Realmente quiero hacerlo? A pasado tanto tiempo desde la última vez que el y yo salimos juntos a una cita. Suspiré.
Deje de hacerme preguntas tontas y comencé a vestirme, el vestido quedaba perfecto aunque ya algo ajustado.
Pasé a rededor de 35 minutos arrglandome.
¡En 5 minutos Santiago estaría aquí y aún no estaba lista del todo!
Escuche como un auto se estacionó fuera de mi casa en seguida tocaron el timbre.
¿¡Qué!? ¿¡Tan rápido llego!? Vaya este chico si que es puntual.
Corría de un lado a otro sobre un pie mientras que en el otro me ponía el tacón.
Tomé mi bolso y me mire por última vez en el espejo, arregle mi cabello y di un suspiro.
Bajé y abrí la puerta, Santiago se encontraba del otro lado y un auto estaba justo detrás de él.
—Hola. -Dijo Santiago con una sonrisa enorme-
—Hola. -Respondi el saludo-
—Te vez hermosa. -Sus ojos brillaron-
—Gracias. -Sonrei- Tu no te vez tan mal. -Dije al ver lo bien que se veía.
El río conmigo.
Realmente se veía muy bien, llevaba puesto un traje negro, muy elegante por cierto.
Narra Fernan:
Me levanté de la silla, estaba decidido; impediría que _____ saliera con el.
Finalmente le confesaria a _____ que me gusta, que me encanta, que simplemente no puedo estar sin ella.
Salí de casa, el maldito auto de los cojones no tenía gasolina, que más da, iré caminando.
Estaba solo a unos pasos de la casa de _____, estaba justo en una de las esquinas de su casa, escondido como un cobarde.
Tenía que agarrar valor para hacerlo.
Narra _____:
Santiago se inclinó hacia mí con un brazo en su espalda baja y me dio la mano, diciendo:
—¿Me permite, señorita?
Me parecía tan cursi que hiciera eso pero también me parecía tan lindo.
Yo solo tome su mano.
Cuando estábamos sobre la banqueta, Santiago dio una vuelta e hizo poses raras mientras decía:
—¿Cómo me veo? -Dijo modelando para mí-
En verdad que parecía un modelo, se veía bastante bien.
—Te vez muy bien. -Rei-
—Anda modela para mí. -Dijo jalando de mis brazos-
—No lo haré. -Rei-
—Vamos, solo una vuelta ¿SI?
—Claro que no. -Sonrei-
—Si, lo harás. -Me tomo de la mano e hizo que diera vueltas tomando aún de su mano-
Reía a carcajadas junto con el.
Narra Fernan:
______ había salido ya de su casa, ahora estaba junto a Santiago, ella reía y parecía que se la estaba pasando muy bien.
Se veía hermosa.
Nunca la había visto reír de esa forma.
Narra ______:
Cuando Santiago decidió dejarme me tomo de la cintura y me acerco a el.
Bajé la mirada apenada.
Cuando volví la mirada hacia el, tenía un gran y hermosa sonrisa en su rostro, podía sentir tu mirada con mucha ternura.
Yo le devolví la sonrisa.
Narra Fernan:
Un nudo en la garganta se formó en mi garganta.
Se le veía tan feliz a _____.
Parecía que ella no tenía lugar en su corazón para otra persona que no fuera el, Santiago.
Narra _____:
Aún no sabía cómo se llama del restaurante al que iríamos y tenía curiosidad por saber.
—Si no te importa me gustaría saber a qué restaurante iremos.
—Iremos al restaurante cristal.
—¿Es en serio?
—Claro. -Sonrio-
Había escuchado hablar de ese lugar, las personas decían que era uno de los
restaurantes más lujosos y caros de aquí, El Salvador.
Narra Fernan:
No es que yo sea un metiche pero desde el lugar en donde estaba se escuchaba a la perfección todo lo que hablaban.
Cree que llevándola a un lugar caro ella lo verá con otros ojos, idiota.
Bueno, al menos ya tengo el nombre del restaurante que era lo único que me faltaba.
Narra ______:
Estar así con Santiago estaba empezando a incomodar.
—¿Nos vamos? -Dije rompiendo el hielo-
—Claro. -Respondio-
Abrió la puerta del auto y me ayudó a subir.
Fue hacia la otra puerta y subio también.
Narra Fernan:
_____ y Santiago hablaron unos segundos y después subieron al auto.
Estaba hecho ya no podía impedir nada, _____ había caído de nuevo con el.
Me recargue sobre la pared y miré hacia el cielo.
Carajo, tengo que hacer algo. ¡Ya!
Mi celular comenzó a sonar sacándome de mis pensamientos.
Era Karla, mmmm en buen momento aparece. -Sarcastico-
*Llamada*
—Hola Luis. -Se escucho del otro lado de la línea-
—Hola Karla.
—¿Cómo estás? Llevo días sin saber de ti ¿Dónde te metiste? -Dijo dramática-
—Solo fueron un par de días. -Rode los ojos-
—Lo sé pero.......quería saber de ti.
Una gran idea vino a mi mente pero era muy arriesgado.
—¿Karla? -Dije de nuevo al teléfono-
—¿Si?
—Mmmm....... -Dude un poco en decírselo- ¿Estás libre ahora mismo?
—Para ti estoy libre todos los días, Luis.
—Paso por ti en 10 minutos.
—Si pero a donde iré......
*Fin de la llamada*
Ni siquiera deje que terminara la frase cuando colgué la llamada.
Narra _____:
Habíamos llegado al restaurante, realmente era elegante, fuimos a nuestra mesa.
Las luces estaban apagadas solo unas pequeñas lámparas iluminaban el lugar.
Santiago separó la silla de la mesa y ayudó a sentarme.
Yo agradecida sonreí.
Narra Fernan:
Deprisa fui hacia la casa de Karla.
*10 minutos después*
Había llegado a casa de Karla, toque la puerta y espere a que saliera.
Ella muy emocionada abrió la puerta de su casa.
Llevaba puesto un vestido color negro y unas zapatillas del mismo color, su cabello recogido, y unos aretes pequeños terminaban con su outfit.
Se veía linda.
¿Qué carajos dije?
—¿A dónde iremos? -Pregunto ella-
—En el camino te lo digo, ven vamos. -La tomé de la muñeca y comencé a caminar.
Tenía que llegar lo antes posible.
∆∆∆∆∆∆∆∆∆∆∆∆∆∆∆∆∆∆∆∆∆∆∆∆∆∆∆∆∆∆∆∆∆∆∆∆∆∆∆∆∆∆∆∆∆∆∆∆∆∆∆∆∆∆∆∆∆∆∆∆∆∆∆∆∆∆∆∆∆∆∆∆∆∆∆
Holaaaa ^^ ¿Cómo están? Espero te estén de lo mejor :3
Espero les haya gustado el capítulo y espero que votes si fue así :')
Gracias por leer y votar!!!
Cuídense muchísimo :3 lxs amooo!! <3