Tenía que darme prisa y arreglarme rápido. Eran las 6 de la tarde y la “fiesta de negocios” comenzaba a las 8.
Entré en mi cuarto, cerrando la puerta con seguro detrás de mí. Saqué el vestido de la bolsa y lo extendí sobre la cama. Me desvestí y entre en el baño para tomar una ducha rápida, al terminar tome una toalla, me sequé lo más que pude y la enrolle alrededor de mi cuerpo. Salí del baño y me dirigí a mi cama, donde reposaba el vestido, lo tome y me lo puse con dificultad, sobre todo por el cierre. Tomé unos tacones de plataforma negros gamuzados de mi armario y unos pendientes plateados con diamantes. Eché un vistazo a mi reloj: 7: 10. Aún tenía tiempo.
Mi cabello era lacio, por lo que no podía hacerme muchos peinados que digamos, así que lo deje suelto mientras caía por mi espalda con unas delicadas ondas. No me solía creer una chica muy bonita, era completamente normal y corriente a todas las mujeres de Corea; tenía el cabello lacio negro y me llegaba aproximadamente a la cintura, mis ojos eran grandes y cafés, y mi piel no era tan blanca pero no llegaba a ser morena. Y mi estatura, bueno, apenas llegaba a 1.60.
Estaba parcialmente lista, pero me faltaba maquillarme. Un verdadero reto para mi. Hice lo que pude, me apliqué un poco de polvo, labial marrón y brillo, delineador negro, sombra negra y café, y por último, un poco de rímel. Sencillo. Perfecto.
Alguien dio tres toques a la puerta, camine hacia esta para abrirla y revelar que quien tocaba era mi padre. Estaba vestido con un elegante esmoquin negro y su cabello estaba peinado hacia atrás.
-Eres igual a tu madre - Dijo mi papá con un tono melancólico - Estas muy hermosa ___.
-Gracias papi - Me acerqué a el para darle un abrazo, el inmediatamente me envolvió en sus brazos.
-Estoy muy orgulloso de ti, ahora eres una mujer - Dijo soltándome - Contraté un chofer, nos está esperando abajo, vine a avisarte.
-Bien - Dije saliendo de la habitación cerrando la puerta detrás de mí.
Papá y yo bajamos las escaleras que nos conducía al primer piso. Intenté bajar lo más cuidadoso posible, ya que con estos tacones se me dificultaba caminar. Al llegar a la sala me topé con la desgracia de encontrarme con Min Ha en su corto vestido rojo y sus enormes tacones a juego. Esta le dedico una hipócrita sonrisa a mi padre y una mueca de desprecio para mí.
-¿Qué hace ella aquí? - Pregunte molesta a mi padre.
-Irá con nosotros - Contestó con un tono regañón - Espero que se comporten esta noche - Nos dijo mirándonos a las dos - No quiero que dejen mal a esta familia ¿Bien?.
-Bien - Respondimos las dos al unísono.
-Excelente, vámonos - Dijo mi padre abriendo la puerta de la casa mientras salía por esta.
Caminé detrás de él hacia el auto, Min Ha caminaba a mi izquierda, se acercó a mí y me susurro al oído "Te ves horrible". Simplemente la ignoré, no perdería el tiempo con una persona como ella.
El chofer nos saludó con una reverencia y luego abrió la puerta de la parte de atrás del lujoso auto negro. Nos subimos a el auto, el chofer cerró la puerta y subió a su respectivo asiento, encendió el motor y nos condujo hacia la casa de los Byun, la cual era la casa más grane y lujosa de la zona.
Bajamos del auto y seguimos a mi padre hasta la entrada de la casa. Hicimos una reverencia de saludo a los vigilantes que se encontraban en ella y luego entramos. Había mucha gente, más de lo que imaginaba. Bailando, comiendo, charlando, sentados. Un mesero nos llevó hacia una mesa redonda donde había tres sillas. Cada uno tomo una.
Min Ha se notaba desesperada, viendo a todos lados como si estuviera buscando a alguien. Luego se resignó con el ceño fruncido, cruzando sus brazos sobre la mesa. Yo hablaba con mi padre acerca de la situación.
-Pensé que era una pequeña fiesta de negocios y bienvenida. Aquí está toda la empresa y acompañada de sus familias – Reproché a mi padre.
-Lo es ____, esto es una pequeña fiesta para lo que esta familia está acostumbrada a hacer – Dijo seriamente sin mirarme a la cara – Voy a saludar a Bon Hwa y a los socios – Se levantó de su asiento y camino hacia donde se encontraba el señor Byun, hablando animadamente con tres hombres más y una mujer que parecía esposa de uno de ellos. Mi padre se acercó y estos se saludaron con un apretón de manos y un abrazo, se veían muy felices. Así se siente reencontrarse con un viejo amigo.
Min Ha y yo quedamos solas en la mesa. Ella estaba perdida en sus pensamientos y yo en los míos. Observaba la casa y a las personas determinadamente. Ya yo había estado aquí obviamente, aunque eso fue hace muchos años, la casa seguía exactamente igual, solo que algunas cosas estaban cambiadas de lugar. Esta casa era mucho más grande que la yo habito junto con mi padre, ya que aparte del enorme salón, comedor y la increíble cantidad de habitaciones que tenía, también poseía un jardín delantero y trasero, el cual tenía un invernadero.
Me llamó mucho la atención de que aparte de las personas mayores, también se encontraban jóvenes cercanos a mi edad, a lo que deduje que eran los hijos de los socios de mi padre. Mi padre y el señor Byun eran los dueños de una famosa empresa de artefactos electrónicos llamada Olimpic. Originalmente la empresa tenía su única sede en Corea del Sur, pero hace seis años pudieron extenderse hasta Europa, estableciendo otra sede en Inglaterra. Esa fue la causa por la que nos mudamos, mientras mi padre manejaba la empresa en Inglaterra, el señor Byun la manejaba aquí en Seúl.
- No veo a Baekhyun por ninguna parte – Dijo Min Ha haciendo un puchero, sacándome de mis pensamientos.
- ¿Y qué quieres que haga? ¿Qué le ponga un GPS? – Objeté enfadada, me molestaba su presencia, tanto como le molestaba yo a ella. Además no soportaba que hablara de Baekhyun.
- ¡Ayúdame a buscarlo! – Expresó casi gritando, se levantó de su haciendo y me haló del brazo, haciendo que me levantara también – Debe estar del otro lado, vamos – Dijo mientras me llevaba del ante brazo.
- Espera Min Ha, detente – Dije quejándome de su agarre en mi antebrazo. Lo que menos quería ahora es ver una “romántica sesión de besos” entre Baekhyun y ella. Atravesamos el salón de baile hasta llegar a la parte de atrás de la casa, donde efectivamente se encontraba Baekhyun, hablando por telefono.
- ¡Bakie! – Gritó Min Ha al verlo, me soltó bruscamente y salto hacia a él, abrazándolo por el cuello.
- Min Ha, te he dicho varias veces que no me saltes encima, suéltame – Agarro sus brazos y los alejo de él, luego trancó la llamada después de despedirse con un “hablamos luego” – Toma, estas demasiado descubierta, ponte esto – Baekhyun se quitó la chaqueta de su esmoquin y se la arrojó a Min Ha, esta se sonrojó ante su gesto.
- Gracias…- Susurro Min Ha, ya entendí el motivo de por qué se puso un vestido tan descubierto. Me sentía incómoda al mirarlos, quizás Baekhyun realmente desarrollo sentimientos hacia Min Ha durante todos estos años, quizás olvidó todo lo que sentía por mí. Quizás simplemente olvidó la promesa que me hizo seis años atrás…
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Hola! niñas perdonenme por no subir capitulo x.x mi inspiración estaba muerta, pero ya todo se soluciono >.<
Ojalá que les guste, en el proximo capitulo habrá un acercamiento entre ___ y Baek <3
Comenten y Voten. Saranghe a todas :D