Muchos creen que el conocer a la persona que deseas es suficiente para ser feliz, que de alguna manera no habrá nada más difícil que poder hablarle o decir lo que sientes, pero la realidad para Derek era conocer a la familia de aquel chico.
Pues en ese justo momento se encontraban en la entrada de la casa con dos policías observándolos como si fueran un espécimen extraño.
- Hola papá - señalo el más joven con una serenidad.
- Creí que pasarías tiempo con Scott hoy - dijo tratando de esconder las frituras que tenía en sus manos.
- Pues no, pasare la tarde con Derek trabajando en su proyecto, y no creas que no vi esas frituras que tratas de esconder, tu y yo hablaremos después de todo esto.
El moreno no sabía si reír o simplemente permanecer a la expectativa completamente, pues el ver como se llevaba con su padre era algo increíble de presenciar.
- Así que Derek he - escucho de los labios del mayor Stilinski aproximarse.
- Am, si señor - respondió.
- Y vienes a hacer tarea ¿cierto? - levantando una ceja y cruzándose de brazos.
- Si - dijo simplemente.
- ¿Estás seguro de eso Derek? - cuestiono.
- ¡Papá! - exclamo Stiles - Haremos un proyecto y agradecería dejaran de hacer preguntas como si fuera interrogatorio.
- Solo quería estar seguro - sin más se dio la vuelta mientras los ojos de Jordan no se apartaban del menor, no era que lo estuviera espiando, simplemente era el hecho de que lo noto solamente al entrar.
- ¡Stiles! - escucho a su acompañante y el nombrado se giró para verlo - ¿Tendrás planes para esta noche?
Su sorpresa fue escuchar aquello enfrente de su persona, pero su mayor sorpresa fue su respuesta.
- En realidad estaré con Derek todo el día, lo siento Jordan.
- Oh, de acuerdo, si quieres otro día - el rostro del policía se sonrojo, pero no era un sonrojo normal, era uno de pena y decepción, lo sabía porque él había sentido algo parecido por el chico, justo cuando lo beso en su habitación, y justo por eso lo compadeció.
Subieron las escaleras y ambos entraron a la habitación del chico, un lugar un poco desordenado por la ropa en la silla y rastros de comida chatarra encima del ordenador.
- No eres muy adicto a la limpieza, ¿Cierto? - enarco una ceja dando a comprender que más que esperar una respuesta era una afirmación.
- No todos tenemos un alto ego y lista de chicas que visiten tu habitación por la que tengas que tener aseada.
- No necesariamente por la lista y el ego, sino por la compasión de los ojos ajenos en ver esto - señalo las envolturas de chocolate.
- Pues lamento que te incomode Hale, pero esto es lo que soy.
Y la verdad no le importaba que fuera de esa manera por extraño que pareciera.
- Pero si una lista de chicos - susurro el de ojos verdes, más que para el chico era una afirmación a sí mismo.
- ¿Como? - quiso saber.
- Que si vamos a empezar ya que se hace tarde - cambio de tema, aunque quisiera reprochar lo del oficial que se veía notablemente interesado en el chico, no iba a ser el quien trajera el tema.
- De acuerdo, tenemos ya casi todo el proyecto terminado, solo nos faltan las entrevistas, ¿Las preguntas las formulo yo o tú? - pregunto el de ojos avellana.
- Que tal tu unas y yo otras y al final las unimos.
- Me parece bien.
- De acuerdo - respondió, saco una libreta de su mochila y una pluma y se acercó al ventanal, mientras el chico hacia lo mismo acercándose al escritorio.
Las horas habían comenzado a avanzar y la radio que había prendido minutos antes el castaño sonaba ahora una canción en especial.
Algo siempre me trae de vuelta a ti
Nunca lleva mucho tiempo
No importa lo que diga o haga
Aún te sentiré cerca hasta el momento en que me vaya
La memoria del de ojos verdes voló, y la imagen de él besándolo en su habitación se hizo presente, la verdad es que estaba enamorado por primera vez, por más tonto que se portase, por más que tratara de apartarse ese sentimiento seguía dentro suyo como un imán.
Me abrazas sin tocarme
Me mantienes sin cadenas
Nunca quise tanto algo
como ahogarme en tu amor y no sentir tu lluvia
Incluso sus salidas habían terminado tras conocerlo.
- Cuando entraste al instituto - menciono Derek sin apartar la mirada de su cuaderno - Te conocí en un pasillo, había tirado tu proyecto de sistema solar.
El chico levanto la mirada para enfocarlo.
Ponme en libertad, déjame ser
No quiero caer otro momento en tu gravedad
Aquí estoy...y estoy tan alto
tal como se supone que debe ser
Pero estás sobre mí...y todo sobre mí
- Y fuiste un cretino - respondió.
Este asintió sonriendo.
- Siempre fuiste un parlanchín - su mirada no se atrevía a levantarse, no mientras dijera lo que tenía planeado - Yo ... de verdad me lamente el haberte tratado de esa manera - meneo entre sus dedos la pluma - No quería portarme así contigo, solo ....
Vivo aquí arrodillado
tratando de hacerte ver que...
eres todo lo que creo que necesito aquí en el suelo
Pero no eres ni amigo ni enemigo
sin embargo parece que no puedo dejarte ir
La única cosa que todavía sé es que me mantienes
me mantienes hacia abajo...
Pero estás sobre mí...y todo sobre mí
- Solo no sabía cómo comportarme con la persona que estás enamorado - levanto su mirada esta vez y lo miro directamente a los ojos.
El castaño contuvo su respiración por unos segundos, no sabía cómo contestar a aquello.
- No pretendo que cambie tu decisión, solo quiero que me escuches - el chico no contesto y dio por entendido que podía seguir - Te vi una vez por los pasillos del Instituto, ibas con tu padre, solo unas semanas antes de que entraras, yo caminaba por el pasillo de casilleros y tu observabas a tu alrededor, el sol entraba con intensidad por la entrada principal y tu piel aquel día era tan brillante, tus lunares solo resaltaron tu tez, solo me quede parado, frente a un casillero que siquiera era mío, solo quería seguir observándote, tu ni siquiera me prestabas atención, no hasta que pasaste a mi lado y me sonreíste, ese día, justo ese día supe que tenía que cambiar, tenía que conocerte, tenía que ser mejor para merecerte, pero después paso lo de mis padres unos días luego de eso.
El castaño permanecía atento a cada palabra.
- No le di sentido a nada, solo podía ver a través del ventanal en clase lo que provoco que reprobara la clase, fui yo quien le sugirió mi tutor al profesor, te elegí a ti, jamás me acosté con nadie, solo lo decía para crearme una reputación que ahora no me importa, a las chicas solo les ofrecí mi amistad, solo Erika buscaba algo más junto a Kate pero jamás me interesaron, te deje esperando varias veces en la entrada principal no por una chica si no porque caminaba por el campo para mentalizarme que tenía que estar cerca una vez más y poder controlarme, pero cada vez me era más difícil hasta que paso lo que paso.
Encogió sus hombros con suma delicadeza.
- Esa es la verdad Stiles, es la verdad que he estado ocultando en este tiempo, me gusto ir al zoológico contigo, ese día si te quise besar - rasco su nuca en desesperación - ¡Dios no sabes cuánto te quería besar!
El castaño se había sonrojado, pero no mencionaba una sola palabra, siquiera se movía de su lugar.
- No tienes que decir nada o cambiar de parecer, solo ... sentí la necesidad de decírtelo, esta es la última vez que nos juntemos para el proyecto y después vendrá la graduación, me marchare del pueblo a una universidad y no volveremos a vernos, pero antes de que todo eso suceda quería decírtelo, necesitaba hacerlo.
- Yo ... - hablo por primera vez el chico - Lo siento - agacho su mirada apenado.
Este sonrió sin importarle.
- No te disculpes, no puedo obligarte a nada - se puso de pie y guardo sus cosas - Bueno entonces, nos vemos Stiles.
Lo miro unos segundos más y se marchó, abrió y cerró la puerta tras de sí, escucho despedirse de su padre y probablemente Jordán que seguía abajo, para después el auto marcharse, después de eso solo silencio se escuchó en su habitación y en su interior, todo había terminado.