Busca en mi alma endemoniada un halo de luz, si lo encuentras te regalaré mi infierno: Umbra.
PATRICK.
WhatsApp:
Madre: Necesito que vengas a casa, luego del instituto, tenemos muchas cosas importantes de las cuales hablar, no llegues tarde.
Patrick: ¡Buenos días para ti también, querida madre!
Madre: Patrick, hablo en serio, es muy importante que vengas, tenemos una cena, y sería bueno que no nos falles, al menos en esto.
Trago saliva con algo de molestia y tristeza, cierro el chat y guardo mi móvil.
Me pongo de pie cuando veo al autobús, pero un coche se atraviesa y se detiene justo a un costado de mi. Abro los ojos impactado cuando el autobús sigue de largo dejándome atrás, con fastidio me aproximo por completo al coche y golpeó la ventanilla, cuando esta baja no espero para empezar a reclamar.
-Me has hecho perder el bus, no puedes estación...¿Tú?
-Que pena, sube.
-Oh, sí claro, me voy a subir contigo, desconocido -digo, irónico.
-Sabes quien soy.
-Marius, vocalista de The Umbra, claro que sabiendo solo esto ya te conozco y se quien eres.
-Solo sube, o llegaremos tarde -Elevo una ceja inquisidor, pero sin más me subo a su coche negro.
Pasan algunos segundos en los que me mantengo mirando el frente, quiero preguntar algunas cosas, pero no sé cómo hacerlo, no conozco muy bien a este tipo, sé que es un engreído, pero no sé cuáles son sus intenciones conmigo.
-¿Qué quieres de mí? -Okay, eso no ha sonado muy bien, joder soy un torpe-. Me refiero, qué necesitas, porque no creo que estés llevándome a mi institución porque eres un humano caritativo.
-Necesito un favor -expone sin vueltas.
-Uh, y eso que tiene que ver conmigo.
-Seré más directo, quiero que vengas conmigo a una cena, y les digas a mis padres que eres mi novio.
-Está bien.
Aunque qué cliché.
Frena el coche en el estacionamiento y me mira con los ojos entrecerrados, le regalo una sonrisa inocente y parpadeo lentamente acercándome hasta quedar a centímetros de su rostro. Tengo que hacer esto o no sabré jamás lo que se siente.
-¿Qué haces? -inquiere, mirándome con duda.
-Voy a besarte.
Y lo hago, presiono mis labios sobre los suyos y atrapo sus mejillas para que no se le ocurra escapar y dejarme con la duda.
Muevo mis labios con suavidad, al principio él se resiste, pero sorpresivamente responde mis besos. Muevo mis labios con más ganas, y cuando el intenta hacer lo mismo me separo con una sonrisa divertida.
-Que tengas lindo día, cariño -Dejo un beso casto sobre sus labios, bajo del coche y cierro la puerta-. Oh ¿para cuándo la cena?
-Eh, yo...el sábado -dice moviendo la cabeza-. Oye, qué quieres a cambio de este favor.
-Quiero tener sexo contigo.
-¡¿Qué!? -Suelto una carcajada ante su expresión pasmada.
-Es broma, quiero que salgamos por ahí con mi primo, un fan tuyo, así que vas a ser el regalo para mi hermoso primito.
El toma aire y algo indeciso asiente, le doy una sonrisa dispuesto a irme, pero me detiene con otra pregunta.
-¿Por qué me besaste?
Me lo pienso unos segundos y me encojo de hombros para por consiguiente entrar nuevamente al coche.
-Te bese porque...no lo sé, sentí curiosidad, supongo, a veces hago cosa...
Parpadeo seguido cuando sus labios someten los míos y gimo cuando muerde mi labio inferior, se separa unos centímetros y susurra.
-Si vas a besar tienes que hacerlo correctamente.
-Pero tú...
-Me tomaste por sorpresa, por eso no reaccione a tiempo, ahora cállate y besame.
Observo sus labios de un color rosado pálido, están húmedos y rogando por los míos, así que no lo dudo, y lo beso. Sus labios hacen locuras con mi cordura, él besa bien no tengo como negarlo, es levemente brusco con sus movimientos, y eso me gusta. Me quejo un poquito cuando sus manos se inmiscuyen entre las ebras de mi cabello apegandonos más.
Siendo más descarado de lo normal me muevo de mi lugar y me subo sobre sus piernas quedando a horcajadas sobre él, quien aprovecha para meter sus manos debajo de mí camisa escolar. He besado a muchas chicas, pero esta es la primera vez que beso a un chico, y es jodidamente increíble. Muerdo su labio inferior y lo chupo con deseo de más, sonrío sobre su boca cuando siento algo duro rozando mi trasero, sin ganas de hacerlo me separo de su boca.
No puedo creer que este haciendo esto, pero bueno, en esta vida se tiene que probar de todo, y me da gusto haber probado a este chico.
-Estas duro -pronuncio mordiendo mi labio inferior-. Dime, eres homosexual o solo disfrutas de...
-Soy homosexual, pero hay personas que no lo entienden o no lo pueden creer aún, por eso necesito de tu ayuda -Baja la mirada, tomo su rostro y hago que me mire a los ojos.
-No te desanimes, voy a ayudarte, y podré decir que mi novio besa muy rico -bromeo haciendo que sonría levemente-. Marius, en serio besas muy rico, me gustaría saber si puedo seguir probando tus deliciosos...
-Puedes besarme todo lo que quieras, pero no significa...
-Lo sé, lo sé, solo besos sin compromisos, aunque sería muy afortunado de tenerme como tu novio, guapo -Le guiño un ojo divertido, sonríe acaricia mi espalda dejando una sensación estremecedora.
-¿Solo besos? -Su pregunta me hace sonreír.
-Me lo pensaré, pero no prometo nada, porque viéndote puedo decir que eres muy activo -Muevo mi trasero sobre su entrepierna provocando que se muerda los labios con fuerza-. Y yo no soy de los que van debajo, ¿entiendes?
-Los heterosexuales y sus pensamientos errados -murmura apretandome más a su miembro erecto-. Somos hombres, ambos tenemos un pene, así que ambos tenemos derecho a follar.
-Uh, ¿y tú quieres follar me? -inquiero dejando una caricia sobre su cuello, él sonríe de costado sus manos van a mi trasero apretandolo con fuerza.
-Desde que subiste a ese jodido escenario, Patrick.
Okay, eso es muy caliente, él es muy caliente.
-Mierda, repite mi nombre, me gusta como lo dices -susurro dejando un beso sobre sus labios-. Dilo, Marius.
-Patrick -Malditamente lo susurra en mi oído.
Sonríe y deja un beso en mi cuello que me hace temblar, maldición nunca reaccione así con nadie.
Con desgana me separo de él y me siento de copiloto, miro por la ventanilla y maldigo cuando veo que todos están entrando casi corriendo al lugar, voy a llegar tarde a mi primera clase, pero al menos podré decir que valió la pena.
-Tengo clases -Hago un puchero a lo cual él ríe-. Toma mi número.
Él me da su móvil y le agendo mi número, le doy de regreso su celular y me dispongo a bajar del coche, pero me detiene y con rapidez me besa, le respondo el beso y maldigo cuando el aire escasea en mis pulmones.
-Nos vemos...
-Pasaré por ti, tienes tiempo para pensar en mi propuesta.
-Pero, dije que sí, seré tu novio falso.
Suelta una risita y deja una caricia sobre mi mejilla.
-Quiero tener sexo, también lo quieres, si lo deseas me gustaría ser el primero en explorar tu cuerpo, será solo placer.
Hago una mueca frustrada cuando recuerdo que tengo una cena familiar.
-Jodidamente quiero follar contigo, pero tengo que hablar con mis padres sobre una cena en casa de...
-No tienes que dar escusas, ni mentir, solo di que no.
-No, no, no son excusas, te digo la ver...
-Te escribiré para quedar, la cena con mis padres si es real -Entorno los ojos y me bajo de su coche cerrando la puerta de un portazo.
Quiero girarme y dejarle en claro que no soy ningún mentiroso ni un cobarde, porque realmente quiero probar el sexo con un chico, pero no lo hago porque solo puedo escucha el sonido de su coche alejándose.
Simplemente genial. Esta situación es completamente indefinible.
¿Qué opinan del capítulo y de sus personajes?
Umbrablack.