Ya se encontraba en casa centroamericana... simplemente observando su taza de café mientras su mente se sumergía en un mar de pensamientos... Pensamientos solo dirigidos a Rusia.
Quería realmente volver a sus brazos y pedir perdón por haber discutido... Pero... Ya estaba harto... Harto de la inmadurez de su pareja... Harto de que siempre el sea quien se disculpe... Harto de no ser el mismo por tener que comportarse con el ruso... Harto de la relación.
Lo amaba y eso... Solo empeoraba todo... Ya que sabía lo mal que estaban... Pero lo amaba... Amaba a sus hijos que también eran suyos sin importar que... Amaba que Rusia fuera el padre de sus departamentos... Amaba todo de el... Pero esta relación se estaba volviendo tóxica al forzarla.
Sin querer soltó lágrimas que lo hacían sentir peor creando dolor de cabeza... Sabía que todos lo odiarían si dejaba al ruso... Sabía que lo insultarian... Sabía que lo criticaría no sin preguntar qué pasó de verdad... El lo sabía de sobra... Rusia lo sofocaba a veces con sus constantes regaños... Y el obedecía... Ya... Era demasiado... El ruso se sentía el dueño absoluto y eso ya no lo quería tolerar... Pero lo que pasaría después lo mataba... Sus hijos lo iban a odiar... Su gente iba a criticar... Todos le odiarían... Solo porque el quería ser feliz.