Dentro de la tan interesante mitología egipcia, existe una gran variedad de dioses en el panteón. Hoy, vamos a abordar uno de los que más ha aportado a esta cultura, gracias a su trascendencia durante su vida, e incluso después de ella.
Artículo de RonaldoMedinaB
Osiris era el dios egipcio de los muertos, la resurrección, la vegetación y la agricultura; se le conoce también como símbolo de fertilidad y de regeneración del Río Nilo. Su verdadero nombre es Usur, Unneferth o Usir, etimológicamente significa "perfecto antes y después de nacer", pero, en nuestro mundo occidental, es más común encontrarlo como Osiris.
Dentro de sus funciones se le atribuye la presidencia del Tribunal del juicio de los muertos, era quien juzgaba si pasarían a la vida eterna o si sus almas serían devoradas, de acuerdo a la forma en que se comportaban en vida. En su corte lo acompañaban 42 jueces más.
El Juicio de Osiris en el Papiro de Hunefer.
Además, se encargó de orientar al pueblo en diferentes labores, como el trabajo de la tierra, la correcta adoración a otros dioses y el respeto a las leyes; razones por las que se ganó la aprobación de los antiguos egipcios.
Representación gráfica:
Su apariencia iconográfica lo caracteriza como un hombre momificado de piel verde, en representación de la vegetación, que sostiene dos cetros cruzados, símbolos de dominación y autoridad. El Cetro Nejej, con forma de un mayal o flagelo, lo acompaña el Cetro Heka, característico por una curva en la punta, en relación al cayado con el que un pastor dirige a su ganado, se le atribuye a Osiris como dirigente del pueblo.
En la cabeza porta una corona atef del Alto Egipto, que solían usar los faraones, y en la cintura lo adorna un cinturón rojo.
Origen:
Hijo de los dioses Geb y Nut, Osiris es el primogénito de cinco hermanos, todos fruto de la aventura amorosa de su madre. Nut era esposa del dios Ra, y él, al enterarse de esto, decreta que su mujer no podrá dar a luz a sus hijos en ningún mes del año.
Sin embargo, el dios Thot, otro amante de Nut, desafió a Ra con un truco: jugando una partida con la Luna, consiguió ganar una 72ª parte de cada día del año, así le añadió cinco días más al calendario; a esto más tarde se le conoció como días epagómenos, es decir, los cinco días añadidos al ciclo de 360 jornadas para completar el año solar de 365 días.
De esta manera, la maldición de Ra fue exenta de ellos. En cada día nació un niño:
Primero, Osiris. Fue considerado un día desafortunado.
Luego, Horus "El Viejo", un día afortunado y desafortunado a la vez. Forma parte del culto solar, es el encargado de destruir a los enemigos de Ra
En tercer lugar, Seth, símbolo del caos y el desierto. Fue un día desafortunado, al nacer rasgó el costado de su madre.
Después, en un día afortunado, Isis, quien más tarde sería la reina de los dioses.
Finalmente, Neftis, en otro día desafortunado. Fue representación de la noche y la muerte.
Mito:
De acuerdo a las costumbres de la época, Osiris, al ser hermano mayor, tomó como esposa a su hermana Isis y, juntos, reinaron sobre Egipto como reyes míticos; Seth, por su parte, obtuvo como esposa a su hermana Neftis y fue obligado a vivir a la sombra de su hermano el rey.
Esto provocó que en Seth brotara maldad y un rencor insano. Le tendió una trampa artera a Osiris en la que, además de asesinarlo, lo cortó en catorce pedazos y los esparció por todo Egipto. Isis recuperó amorosamente todos los miembros, excepto el viril, que se había comido el pez oxirrinco. Con la ayuda de su hijo adoptivo Anubis, los restos fueron embalsamados. Después, con la poderosa magia de Isis, la vida volvió a fluir del momificado cuerpo de Osiris; a través de esa unión nació Horus el Joven, su único hijo, y juntos formaron la Triada Osiriaca
Horus vengó la muerte de su padre, desterró a Seth al desierto y recuperó el trono de Egipto, mientras que Osiris permanecería como rey de los muertos, en los fértiles campos de Aaru.
Triada Osiriaca.
Creencias:
La resurrección de Osiris significó para los egipcios la esperanza de la inmortalidad humana y una promesa inmutable de vida eterna. Y siendo él, en su pasada vida, un faraón, forjó la creencia de que los faraones alcanzaban la inmortalidad. Por eso, los rituales de embalsamiento a los difuntos se siguieron realizando a los faraones, para que, al igual que Osiris, consiguieran los mismos resultados de resurrección a la vida eterna.
Adoración a Osiris:
Templo de Osiris en Abydos.
En los lugares donde Seth esparció las partes del cuerpo de Osiris, los egipcios edificaron templos sagrados. Algunos de ellos fueron:
· Abydos: allí se encontraba su cabeza, se le realizó un santuario de peregrinación para los egipcios.
· Busiris: estaba su columna vertebral que se le asocia al pilar Dyed, y fue el dios principal de esta ciudad y de allí provenía su divinidad.
· Letópolis: Lugar donde se encontraba el hombro izquierdo o el cuello, y su hijo Horus era su guardián.
· Atribis: Se encontró su corazón.
· Menfis: Lugar donde se encontraba su cabeza.
Estos fueron los lugares donde más fue venerado. También se expandió el culto hacia las islas de Biga y de File debido a la existencia de una tumba.
En las épocas del Imperio Medio se culturizó una festividad conocida como Los Misterios de Osiris. En ella, se conmemoraba la muerte, entierro y resurrección del dios. La fiesta se componía de cinco pasos:
1. Procesión: dirigida por Upuaut y finalizaba con un combate en contra de los enemigos de Osiris.
2. Procesión funeraria: por Jentiamentiu a través de la necrópolis de Abidos.
3. Viaje en barca: del dios Osiris hasta Luxor donde se encontraba su mitológica tumba.
4. Noche de vigilia: de Osiris para su posterior regeneración, transfiguración en espíritu y coronación.
5. Regreso del dios: el retorno de la imagen del dios a su templo de Abidos.
🏛 Por razones como estas, es que Osiris es considerado uno de los dioses más importantes de la mitología egipcia. ¿Cuál es tu dios egipcio favorito? Háznoslo saber en los comentarios y danos tu impresión sobre este artículo.