Calum pone la llave en la cerradura mientras seguimos riendo y sacudiendo el pelo para salpicarnos unos a otros.
Thais es la única que tiene la ropa húmeda y no chorreando ya que al estar entrenando, tenía puesto el bañador y no ha llegado a casa empapada como nosotros, pero no se ha librado del abrazo que le hemos dado entre Calum, Ashton y yo, que ha provocado que se le humedezca la ropa considerablemente.
-Dejame algo para ponerme, Ash -pongo mi mejor cara para dar lástima pero no surge efecto
-No, aquí o vamos todos mojados o ninguno -escurre la camiseta en mis pies, que se empapan aún más de lo que ya estaban y empieza a reír, pero no le dura mucho ya que una cara de sorpresa le cubre el rostro.
-Pero qué...-Thais está detrás suyo con una pequeña pistola de agua, y cuando ya no queda líquido dentro, sopla en la punta como si fuera un arma de verdad.
Ashton se gira bruscamente para atraparla, pero ella, más rápida, se mueve hacia un lado, y segundos más tarde están corriendo alrededor de la mesa.
-¡Te voy a matar! -Thais sigue riendo hasta que Ashton consigue atraparla, y agarrandola por los muslos, se la carga al hombro, lo que la hace chillar.
-¡Sueltame, maldito idiota! -se ríe mientras le da palmadas en la espalda, y momentos después, aparecen Luke y Mike por la puerta de la cocina.
-¿De dónde venís? -pregunta Michael extrañado.
-Hemos ido a ver a Thais entrenar -digo, mirando a ambos fijamente.
-¿Y por qué no nos habéis avisado? -Luke se limita a mirarnos con el ceño fruncido y los labios tan apretados que ahora son una fina línea.
-Llevo más de un mes diciendo que mañana compito, y de hecho esta mañana os he hablado sobre el entrenamiento de hoy; si no sois capaces de escuchar algo que repito casi a diario o simplemente prestar atención a lo que os digo, id a que os lo miren -Thais se alisa las arrugas del pantalón una vez tiene ambos pies en el suelo.
-No me hables así, es culpa vuestra por no tener la decencia de enviarnos ni un puto mensaje -Ahora es Luke quien habla, y lo hace con un tono grave y enfafado.
-Oh, perdona que no estemos pendientes de vosotros a cada minuto del día -alzo las manos y las vuelvo a bajar para apoyarlas a ambos lados de la cadera -fuisteis vosotros quien os negasteis a comer con nosotras porque "habíais quedado con unas chicas". Si tantas ganas teníais de ver a Thais nadar, haber venido y punto, y si alguien aquí tiene la culpa, sois vosotros, porque estabais más que avisados -intento controlar la respiración, pero me es casi imposible.
-¿Ahora no podemos quedar con quien nos de la gana? ¡No estamos obligados a pasar tiempo juntos las veinticuatro horas del día! -grita Michael.
-¡Entonces parad de quejaros! -Ahora es Thais quien grita, y los ojos se le humedecen debido a la ira.
Me acerco a ella y le cojo la mano, y la arrastro hacia la puerta principal, no sin antes girarme hacia Ashton y Calum con una mirada de disculpa.
-Compite mañana. Ya haréis con la información lo que os venga en gana pero si no venís, ni se os ocurra tirarnos en cara que no os avisamos -cierro la puerta detrás de mi y, con Thais a mi lado, nos dirigimos hacia casa.
Un cuarto de hora más tarde, nos encontramos tiradas en el sofá sin hacer nada de provecho, cuando Thais empieza a mover los hombros débilmente.
-No vale la pena Tha, no llores -me acerco a ella y la abrazo como puedo ya que está hecha un ovillo.
-Me da tanta rabia Da...-sorbe por la nariz y mira por la ventana, apretando los puños -odio que me griten así y más cuando tienen la culpa de todo -le da un puñetazo al reposabrazos del sillón y se vuelve a apoyar sobre mi hombro.
-Déjalos, ya se arrepentirán cuando se den cuenta de su error -le paso una mano por la espalda para tranquilizarla.
-Es que tampoco entiendo que me pasa, bueno, que nos pasa -se levanta con brusquedad y me mira, con los ojos rojos e hinchados -sé que estás tan harta como yo sobre el hecho de que nos afecte tanto lo que hacen, porque no debería ser así ¿sabes? -se pone a andar de un lado para otro y no se me ocurre que decir porque lleva razón, pero necesito que esté tranquila, así que antes de pensar en lo que voy a decir, las palabras fluyen solas por mi boca.
-Supongo que les queremos demasiado, a los cuatro, y no queremos que les hagan daño. Ya sabes como acabaron las últimas relaciones...-se queda un momento pensando, supongo que recordando, las caras largas y el pésimo humor que tuvimos que soportar hace dos años, durante tres semanas, cuando Mike y Luke cortaron con sus respectivas parejas. Nadie del grupo se sentía cómodo y la idea de volverlo a vivir me hace tener escalofríos.
-Si, supongo que tienes razón -deja de moverse de un sitio hacia otro -voy a descansar, lo necesito para mañana, ya sabes...tengo que quedar en buena posición.
-Sin presiones -le digo, sonriendo
-Sin presiones
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Después de fregar el último plato con restos de tomate, me siento en un taburete de la isla de la cocina para esperar a Thais, que aparece unos minutos más tarde con una bolsa de deporte cargada al hombro.
-Estoy muerta de miedo -me dice después de dar un sorbo a una bebida energética
-No tienes porqué, vas a hacerlo genial -cojo las llaves de casa y el móvil, que vibra en mi mano
《Ya estamos en las gradas! Te hemos guardado un sitio :-)》
《cinco minutos y llegamos x》
Después de mandarle el mensaje a Ashton, hablo con Thais de temas sin importancia para que, al menos por unos minutos, no tenga que pensar en la competición.
-Bueno, voy a...-me dice, señalando con la cabeza la puerta del vestuario.
-¡Ánimo campeona! -levanto los pulgares y me dedica una sonrisa un tanto nerviosa, y cuando desaparece detrás de la puerta, me encamino hacia las escaleras que dan a las gradas.
No me cuesta mucho encontrar a Calum y Ashton ya que ambos sujetan llamativas pancartas con palabras de apoyo a Thais y se que cuando las vea, se va a morir de vergüenza.
-Da, ¡estamos aquí! -me grita Calum, sacudiendo la mano.
Hace un calor agobiante donde nos encontramos debido a la climatización de la piscina, pero nadie dice nada, aunque empezamos a sudar.
-Mike y Luke no se han dignado a venir, por lo que veo -Ashton mira a Calum mientras se pasa una mano por la nuca. Siempre hace lo mismo cuando no sabe que decir, así que simplemente espera a que su amigo conteste por él
-No nos han dicho nada cuando nos hemos ido y tampoco queríamos forzar la situación...-mira hacia la piscina para no tener que enfrentarse a mi mirada
-Ya -puedo entender que no fueran al entrenamiento, pero esto es algo muy importante para Thais y cuando sepa que faltan dos de sus mayores apoyos, se vendrá abajo y no lo voy a permitir. Este es un momento para que demuestre lo mucho que vale, y dos idiotas no se lo van a arruinar.
-¿Creeis excesivo si me pinto un #1 Thais en la cara? -dice Ashton, sujetando una pintura negra cerca de la frente, lo que nos hace reír a carcajadas a los tres.
Estamos en las primeras filas de asientos, con las pancartas colocadas por fuera de la valla para que sean visibles desde la posición de los nadadores, y cuando Thais se gira para buscarnos entre el gentío, se lleva ambas manos a la cara y hace un gesto con el pulgar, que se pasa a lo largo del cuello para luego reír.
-Te ha sentenciado, tío. Eres hombre muerto -dice Calum
-No te laves las manos, chaval, que esto ha sido idea tuya -cuando acaba la frase, se escucha un pitido procedente del silvato de uno de los jueces.
Todos los nadadores suben al trampolín y esperan al segundo pitido, que llega momentos más tarde y se inclinan, en posición para saltar. Al tercer pitido, un seguido de chapoteos rebota en todo el recinto y los nadadores empiezan a mover enérgicamente los brazos
-¡No veo a Thais! ¿Se habrá retirado en el último momento? -pregunta Calum, moviendose de un lado para otro por si ve a su amiga en el agua
-Compiten por modalidades, Cal. Ahora estan nadando los de estilo mariposa, y Thais compite en crol -asiente y señala a un pequeño punto por debajo de nosotros, y vemos a Thais, mordiéndose el interior de las mejillas con ímpetu.
Ya han competido dos modalidades; solo nos queda ver como nadan los que hacen espalda y a continuación saldrá Thais.
Al dar el tercer silvido para indicarles a los terceros competidores que tienen que empezar a nadar, una figura alta escoltada por un chico de pelo llamativo se acercan a nosotros.
-Hola -dice Michael, levantando una mano
-¿Hola? -agarro el bolso con fuerza y le doy en los brazos y costados tanto a él como a Luke -¿de qué vais? Llevaís dos días comportandoos como dos capullos, creíamos que no ibais a venir y se te ocurre decir hola -me miran con los ojos muy abiertos, sorprendidos -¡Os mato!
-Por lo menos estamos aquí ¿no? -dice Luke, intentando esbozar una sonrisa
-Faltaría más -me abalanzo sobre sus cuellos, en un atropellado abrazo y ambos ríen
-No os riais, aun os odio -les digo después de soltarme, mientras me aliso las arrugas que se me han formado en la camisa
-Seguro que si -Luke me da unas palmaditas en la espalda y le fulmino con la mirada -Oye Dak, lo sentimos muchísi-levanto una mano para hacerle callar
-Disculpate cuando esté ella delante. Le habéis hecho creer que no apareceriais -señalo con un movimiento seco de cabeza hacia donde esta Thais y Luke asiente.
Cuando llega el tercer pitido en la modalidad de nuestra chica y ésta se tira al agua, los cinco entrelazamos los dedos del que tenemos al lado y apretamos con fuerza.
100 metros. Thais va la cuarta.
125, tercera.
-¡Vamos mi niña, machacalos! -Luke grita tanto y tan fuerte que se le hincha la vena del cuello, y parece que sus palabras le han llegado a Thais porque empieza a mover brazos y piernas cada vez con más velocidad.
-Acaba de adelantar ¡va segunda! -salto de alegría y me agarro con fuerza a la barandilla al ver que a quien acaba de adelantar le está alcanzando.
Da una brazada más, y la palma de la mano choca contra la pared de la piscina
-Joder, ¡ha acabado segunda! -todos nos abrazamos y aplaudimos.
Puede que no haya acabado la primera, pero estar en el podium cuando competía contra nadadores pro es un grandísimo mérito.
Recogemos todas nuestras pertenencias y nos dirigimos a los vestuarios para salir a la zona de la piscina, y una vez allí, los cinco nos abalanzamos sobre Thais, alzandola en volandas mientras vitoreamos su nombre una y otra vez.
-¡Luke! ¡Mike! -nos damos la vuelta para encontrarnos de frente con una de las chicas que tantos problemas nos ha causado.
-No me jodas tío -resoplo, agarrando el brazo de Ashton para no agarrarla a ella del cuello
-Esto es una puta broma -me susurra
-¡Habéis venido a verme! Andrea creía que no os acordariais pero ¡mira donde estáis! -da unos pequeños saltitos y camina unos pasos para acercarse a Luke y Michael, que retroceden
-Andrea tenía razón, de hecho, me entero ahora de que eras nadadora -Luke cruza ambas manos y las coloca delante del abdomen, mientras se balancea de alante a atrás
-Hemos venido a ver a nuestra chica, que por cierto es una campeona -Mike sonríe burlón y señala a Thais.
Escondo la cabeza en la espalda de Ashton para contener la risa porque la cara de la chica es un cuadro, y Thais, que esta detrás de nosotros se lleva ambas manos a la boca, con los ojos perlados de lágrimas.
Avanza con paso decidido hacia los dos amigos que se encuentran a unos metros de nosotros y los abraza con tanta fuerza que les hace perder el equilibrio por momentos.
-Ni siquiera hace falta que os disculpéis, esto es más que suficiente -les colma la cara a besos, lo que provoca que la cara de la chica se crispe de rabia y se va.
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Nos dirigimos hacia la casa de los chicos cargados con cartones de pizza y la pequeña copa de plata que le han dado a Thais por su segundo puesto.
-Chicos, he nadado tan bien...deberíais arrodillaros ante mi y mi poder -Ashton alza la copa por encima de la cabeza
-Estate quieto ya, idiota -le digo, quitando el trofeo de sus manos y riendo
-Me has arrebatado la gloria -se toca el pecho, como si le acabara de atravesar con una daga
-Seguro Ashton, y la dignidad también -Mike le da un empujón amistoso y los tres nos reímos.
Luke abre la puerta de la casa, y una vez estamos todos dentro, sonríe y se frota las manos
-¿Os apetece un twister después de las pizzas?