Narrador omnisciente:
Esa misma noche:
-Las chicas estaban en su habitación descansando, mientras charlaban sobre todo lo que había pasado en tan solo tres días:
Yoshiko: ¡Qué cansada que estoy!-Exclamó desde su cama.
Maki: Ni que lo digas. El entrenamiento de hoy fue bastante pesado, pero estamos mejorando mucho-Dijo en el mismo estado que su amiga.
Yayoi: Sí, tienen razón. Pero igual vamos a entrenar hoy a las diez, ¿No?-Preguntó a las demás chicas.
Yukari: Claro que sí. Hay que entrenar mucho antes de irnos a Estados Unidos, pero eso sí, no hay que olvidarnos de nuestros deberes como mánagers y de ayudar a los chicos-Contestó.
Sanae: Sí, chicas, hay que organizarnos bien, porque con tantas cosas no vamos a poder-Comentó al resto.
Flor: Sí, lo que vamos a hacer es primero acomodar y dejar todas las cosas en orden y a mano para los muchachos. Después entrenamos de 14:40 a 18:30, luego descansamos un rato hasta las 22:00 y de ahí nos vamos a entrenar de 22:00 a 3:00. Si los chicos nos necesitan, nos van a decir. ¿Están de acuerdo?-Preguntó al resto.
Las demás: Sí-Respondieron todas.
Yayoi: Eso sí, chicas, hay que estar atentas si los chicos nos necesitan-Recordó, pensando en su capitán.
Yukari: Sí, tranquila, y sobre todo tú, por si tu querido capitán te necesita-Dijo con voz pícara.
Yayoi: ¡¡No molestes!!-Exclamó toda sonrojada.
Las demás: Jajajaja-Se reían de la cara de su amiga.
Maki: Pero ya en serio, también hay que pensar cómo decirles a los muchachos que jugamos al fútbol y que este lunes nos vamos a Estados Unidos a competir-Comentó una vez que se calmó de su ataque de risa, al igual que el resto de sus amigas.
Sanae: Sobre eso, se me ocurrió que se lo podemos decir el viernes, una vez que terminen su entrenamiento. Solo espero que se lo tomen bien-Contestó suspirando.
Yoshiko: Yo también lo espero. Igual estoy un poco triste ya que no los vamos a ver en bastante tiempo-Comentócon un tono de voz triste.
Wendy: Tranquila, Yoshi. Yo también estoy triste por ese hecho, pero piensa que vamos a poder hablar con ellos por llamada y mensajes. Además, creo que es nuestro turno de cumplir nuestros sueños, ¿No creen?-Dijo tratando de subirle el ánimo a su amiga.
Maki: Sí, pequeña tiene razón. Es momento de que cumplamos nuestro sueño, así que ánimo-Respondió con una sonrisa.
Yukari: Es cierto, pero ahora vamos a dormir un rato hasta que sean las 22:00 para volver a entrenar-Dijo mientras ponía la alarma para que sonara 20 minutos antes de la hora acordada.
Flor: Sí, es lo mejor-Contestó mientras se acomodaba para dormir un rato y sus amigas hacían lo mismo.
(Salto de tiempo, 23:00 hs):
-Todas en ese momento se encontraban dormidas, hasta que el sonido de la alarma las despertó:
Yukari: Vamos, chicas, hay que ir a entrenar, así que arriba-Avisó mientras apagaba la alarma y posteriormente empezaba a despertar a sus amigas.
Las demás: Ya vamos-Respondieron para empezar a levantarse y arreglarse para ir a entrenar un rato.
-Una vez que estuvieron listas, salieron de su habitación tratando de no hacer ningún ruido y después salieron del hotel rumbo al campo B. Cuando llegaron, se pusieron a entrenar. Primero comenzaron por correr unos 30 minutos, después hicieron pases entre ellas y tiraron a la portería. También practicaron sus tiros especiales y, por último, practicaron estar en diferentes posiciones para así saber jugar en todas las posiciones y estar más preparadas. Así siguieron hasta que sonó la alarma indicando que ya eran las 3:00 de la mañana, así que Flor habló.
Flor: Buen entrenamiento, chicas, pero ya es tarde. Luego seguimos entrenando -avisó a las demás.
Las demás: Sí, vamos -contestaron todas.
-Dicho esto, se dirigieron hacia el hotel y, una vez en su habitación, se bañaron, cambiaron y se acostaron en sus respectivas camas.
Sanae: Buenas noches, chicas. Nos vemos en un rato, ya que hay que ordenar algunas cosas que nos pidió el entrenador. Solo espero que no nos pase factura el entrenamiento y que no se nos note tanto la cara de cansancio-Dijo cansada pero a la vez preocupada.
Yayoi: Tranquila, Sae. Seguro que no, y sobre los chicos, capaz ni se den cuenta-Contestó tranquilamente.
Sanae: Sí, capaz tengas razón, Yayoi. Pero bueno, buenas noches a todas-Deseó mientras se acomodaba para dormir.
Las demás: Buenas noches, Sae-Respondieron todas, imitando su acción.
-Pero lo que no sabían es que los entrenamientos, junto a todos sus deberes como asistentes, les iban a pasar factura y que además los chicos sí se darían cuenta de que algo les estaba pasando.
Continuará...
Voten y comenten.