En uno de tus días libres fuiste al centro comercial con tu amigo Can Yang, iban riendo cuando unos llaveros llamaron tu atención, así que entraste y los compraste.
Can Yang te hizo una escena ya que dijo que porque con ellos no tienes algo así y recordarte a Hendery cuando le contaste de tu tatuaje con ellos. No podías tener amigos más dramáticos.
Al llegar al Departamento para tu suerte los siete estaban reunidos en la mesa.
—¿Como te fue?—te pregunto WinWin en cuanto te sentaste.
—Bien, les compre algo.
Tomaste tu bolsa y sacaste de ahí a ocho gatitos de plástico.
A cada uno le diste el que mejor quedaba con ellos.
—Me siento mal de que por mi culpa no se pudieran quedar con el gato anterior y ví estos y pensé que tal vez, solo tal vez lo compensaría.
—Ying, primero es tu salud, me gusto mucho el mío, gracias. —Kun te abrazo pero recibió una manotazo de parte de Lucas para él después abrazarte.
Ahora estabas más que segura que agradecidas tener amigos como ellos.