Eran las 9:30 am cuando me desperte, era un poco tarde pero hoy no iba a a ir a la empresa. Queria quedarme en casa, ademas las cosas que tenia pendiente en la empresa y los documentos de España ya los había realizado.
Fui al baño a hacer mis necesidades y a darme una ducha, ultimamente en Seattler estaba haciendo demasiado calor para mi gusto. A lo mejor era porque ya se aproximaba el verano.
Salí del baño envuelta en mi toalla y me coloque una ropa comoda ya que hoy no iba a ser nada. Queria relajarme un rato y estar en casa era la solución. El sonido de mi estomago gruñiendo me hizo entender que tenia que bajar a comer mi desayuno.
Al bajar a la cocina pude observar a una Marta terminando de limpar y acomodando algunas cosas de la cocina.
- Buenos días Marta - dije sentandome en las sillas que estaban en la barra de la cocina.
Marta detuvo sus movimientos y su vista se centro en mi y en mis movimientos. Me regalo una sonrisa y saco del horno un plato con alguna comida del desayuno y lo puso enfrente de mi.
- Buenos días mi niña - exclamo terminando de organizar unas cosas - ¿Como dormiste?
Mi atención estaba sobre mi rico desayuno el cual contaba con tres tostadas, fresas y durazno cortado y un rico jugo de naranja. Mi desayuno se veía delicioso y estaba segura que estaba delicioso.
- Bien, ultimamente he estado ocupada pero estoy bien. - exclamé dandole un mordico a la tostada con una fresa.
Definitivamente este desayuno estaba excelente y mi cara fue la expresión de eso. La risa de Marta se hizo presente al observar la expresión en mi rostro.
- Mi niña cuando termines de desayunar tienes que ir a la sala ya que tienes visita - murmuro dirigiendose a la parte de atras de la casa.
¿Visita? ¿Para mi?... Que raro.
Al terminar de desayunar, me pare de la silla de la barra de la cocina y fui a limpiar el plato para poder dejar completamente limpia la cocina.
Cuando termine de fregar los utensilios fui a la sala y la silueta de un hombre de espalda me llamo la atención pero ya esos rasgo lo conocía... Era Liam.
- Hola Liam - dije sentandome en sofa.
Mi saludo hizo que Liam se viera la vuelta dandome la cara.
Liam estaba vestido muy casual, una camisa negra hasta los hombros, así podían ser visibles sus tatuajes y unos pantalones negros y unos deportivos. Se veía muy atractivo.
- Buenos días Danna - Exclamó.
- ¿A que se debe tu visita tan temprano? - pregunte sin quitar mi vista de él - ¿Es algo de la empresa?
- No, no es nada de la empresa. - murmuró sentandose en el sofa que se encontraba detras de el - Queria a ver si me podías acompañar hacer algunas cosas.
¿Esto es enserio?... ¿Por que yo?
- ¿Y que cosas son esas que no puedes hacer sin acompañante?.
- Quiero comprar algo de ropa y queria un acompañante con buen gusto - me dijo con una media sonrisa - Y tu tienes buen gusto para la ropa ¿me vas a acompañar?.
En eso Liam no se equivocaba, yo tenia un buen gusto para la ropa.
- Esta bien, voy a buscar mis cosas en mi habitación y vamos - murmuré dirigiendome a la escalera.
Al estar en mi habitación agarre mi celular y mi monedero con todas mis tarjetas y las meti en un pequeño bolso.
Ya tenia todas mis cosas y volvi a la sala pero Liam no estaba ahí, a lo mejor me estaba esperando afuera de la casa.
Al salir de la casa, pude ver a un Liam recostado en la camioneta. Por algunos minutos lo estaba observando y podía jurar que todavia me seguia gustando como hace cinco años.
- ¿Estas listas? - pregunto al verme afuera de la casa.
Mis pensamientos se esfumaron al escuchar su voz.
- Si - exclamé abriendo la puerta del copiloto y montandome en el auto.
A los pocos minutos Liam se habia montando en el auto y habia empezado a conducir. No tenia ni idea a donde ibamos y tampoco le queria preguntar.
El camino fue silencioso, Liam estaba con la vista fija en la carretera y yo consentrada viendo la ventana.
A los pocos minutos llegamos al centro comercial principal de Seattler. Seattler tenia varios centro comerciales pero el centro comercial principal de Seattler era el más grande y elegante de todos.
- Ya llegamos - exclamó Liam terminando de estacionar el auto y apagandolo.
Me quite el cinturo de seguridad, agarre mi bolso y me baje del auto. Empece a caminar hacia la entrada del centro comercial mientras que Liam seguia mis pasos.
No tenia ni idea a que tienda iria Liam a comprar la ropa, este centro comercial era muy grande y a decir verdad no queria estar mucho tiempo aqui y menos con Liam.
- ¿A que tiendas vas a comprar la ropa? - pregunte sin detenerme mis pasos.
Liam acelero sus pasos quedando a mi lado.
- A Girls Smile - exclamó dirgiendose a las escaleras mecanicas
¿Girls Smile? Esta era una tienda que vendía ropas de chicas solamente. Que raro.
Seguí los pasos de Liam hasta llegar a la tienda. Girls Smile era una excelente tienda, tenia todo lo que una chica necesitaba y sus trabajadores eras excelentes.
- Bienvenidos a Girls Smile - exclamó una trabajadora de la tienda al vernos entrar - ¿En que lo podemos ayudar?
- Buenas, necesito ir a la sección de vestidos - murmuró Liam - Estoy buscando un vestido elegante para una fiesta familiar.
La chica asistio y se colocó delante de Liam para mostrarle el camino hacia la sección de vestidos.
Todo era muy raro. Liam ida a comprar ropa para el y ahora nos encontrabamos en una tienda de ropa de chicas y como si fuera aun más loco habia pedido un vestido elegante.
Algo no me encagaba pero decidí no pensar cosas extrañas y seguí los pasos de Liam y de la trabajadora hacia la sección de vestidos.
La sección de vestidos era mi favorita, habian hermosos vestidos super elegantes o casuales pero eran hermosos. Mientras que Liam hablaba con la trabajadora yo estaba viendo algunos vestidos que se encontraba a simple vista
- ¿Que le parece este?- Pregunto la trabajadora llamando mi atención y me termine de acercar hasta donde esta Liam
El vestido que la trabajadora le estaba mostrando a Liam era hermoso, era un vestido elegante pero también casual. Era de color pastel,un escote un poco a la vista y el vestido llegaba hasta la rodilla. Sencillamente hermoso.
- Es perfecto - murmuró Liam sin quitar la vista del vestido - Es para una fiesta familiar con mi prometida.
¿Una fiesta familiar? ¿Prometida?... Esperen. ¿Liam me habia traido para que yo lo ayudara con un vestido para Eva?.
Ahora todo encagaba. Con razón Liam habia venido a una tienda de ropa de chicas y habia pedido un vestido elegante. Era para Eva.
Estaba muy molesta.
- ¿Y usted es la prometida? - Pregunto la trabajadora sacandome de mis pensamientos.
Lo que me faltaba, que pensaran que yo era la prometida de Liam.
- No - murmuré dirigiendo mi vista hacia Liam, el cual estaba consentrando en el vestido.
- Voy a llevar el vestido a la caja - exclamó la trabajadora - Cuando guste pasa por la caja para cancelar.
Al irse la trabajora me quede mirando a Liam por unos minutos. Era increible que Liam me habia hecho venor aqui para que lo ayudara a escoger un vestido para Eva.
- ¿Me trajiste para que te acompañara a comprarle un vestdio a Eva? - pregunte haciendo que su atención estuviera en mi.
- Si - murmuro - Eres mi amiga y necesitaba tu opinion.
¿Amiga?. Sabia que ya no pertenia a su vida pero tampoco iba a permitir que me trajera aqui para que lo ayudara a escoger algo para Eva.
- Me voy de aqui. - exclamé diriguiendome a la salida de la tienda.
Estaba muy molesta con Liam y no queria estar más en esta tienda y menos si esta el.
- Danna no te vayas - murmuró Liam agarrandome del brazo - Necesito tu opinion para lo del vestido.
¿Es enserio?. Acaba de quedar comprobado que Liam era un completo idiota.
- ¿Quieres mi opinión? - pregunte quedando frente a él.
-Si - solto de repente.
Esta bien, si Liam quiere mi opinón se la daremos.
-Yo no soy tu amiga, no te creas que por que este en Seattler las cosas entre tu y yo se van a solucionar - murmuré molesta - Y ese vestido esta horrible.
Iba camino a la salida de la tienda, no pienso estar más al lado de Liam. Como se le ocurre pensar que yo era su amiga. Esta demente.
- Danna - exclamó Liam pero no le hice caso.
Al salir de la tienda saque mi celular y llamé a un taxi. No quieria que Liam me llevara, en conclusión no queria tener cerca a Liam.
Yo pense que tendría un día tranquilo y sereno pero al parecer no fue así. Mi día se vio arruinado por Liam y sus idioteces.
Cuando sali del centro comercial estaba el taxi esperandome. Me monte en auto y le di al taxita la dirección de mi casa.
En todo el trayecto estuve pensando en lo que paso. Liam me dijo que yo era su amiga, ya me habia quedado claro que hace tiempo el dejo de sentir lo mismo por mi y creo que yo también deberia de dejar de sentir esto por el.