Desde este capítulo se comenzarán a dar saltos más largos de tiempo, ya que se acerca el final.
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"El rapero Agust D, anunció durante una de sus conferencias de prensa sobre la presencia de un omega en su vida, indicando que era su pareja. No solo conocimos ese inesperado dato, sino que golpeó a todos anunciando que su pareja está embarazado, a su vez ambos planeando el adoptar a un cachorro..."
Yoongi frunció el ceño ante la exageración del comentarista de ese absurdo programa de chismes. Había dicho la noticia hace más de una semana y no podía creer que todos mantuvieran en boca la noticia como si fuera reciente.
Habían pasado muchas cosas en cuanto a su nombre y carrera ante los medios. Todas las páginas de noticias querían ser las primeras en anunciar lo que había dicho e incluso comenzar a suponer o investigar sobre quién era el omega del gran Agust D, cuál sería el cachorro que adoptarían y por qué lo harían.
No había revisado sus redes sociales en esa semana y días, ya que se esperaba ver un montón de mensajes negativos, como positivos. Pero no quería concentrarse en eso, no al menos en ese momento, en donde Jimin y él estaban a nada de partir hacia Busan.
―Yoonie, no creo aguantar el viaje en auto―dijo Jimin mientas sostenía su cabeza, parado frente a la puerta de la habitación―Estoy muy mareado.
El alfa apagó el televisor y se levantó de la cama, caminando hacia el embarazado, quien realmente se veía mal.
―Podemos posponerlo e ir hasta mañana, amor. No te preocupes―Jimin negó mientras enroscaba sus brazos por el cuello de Yoongi, no queriendo tomar esa idea.
Ese día irían a Busan para varias cosas, primero tenían que ver cómo estaba Sweet Dreams y hablar con Suran de todo el papeleo. Luego irían al orfanato en donde Sehun se mantenía, para saber qué tenían que hacer para comenzar el proceso de adopción.
No estaban seguros de cuántos días se quedarían, pero Namjoon le había liberado la agenda a Yoongi por dos semanas.
―No, no quiero retrasar esto. Solo debo dormirme en el camino para no marearme―Yoongi asintió con preocupación, pasando sus manos por el rostro de Jimin, quitando los cabellos que se mantenían sobre su frente.
―No será un viaje demasiado largo, así que no te angusties―Acercó sus labios a la frente del menor y dejó un largo beso, haciendo que el omega suspirara por la calma que su alfa le transmitía―Llevaremos bolsas por si te dan nauseas en el camino.
A Jimin le dio asco el tan solo pensar en vomitar frente a su alfa y el chofer que los llevaría a Busan, incluso sintiéndose avergonzado de antemano. Sabía que podría dormirse en el camino, en esos días había dormido más que un oso en temporada de hibernar.
―Bien ¿Namjoon hyung te ha avisado sobre la hora en la que vendrá el chofer? ―Yoongi negó y sacó su celular de su bolsillo, revisando que sí tenía un mensaje nuevo de su amigo, enviado dos minutos atrás.
―Dice que estará aquí a las dos, por lo que tenemos media hora para revisar que tengamos todo listo―Jimin asintió y pegó su nariz al cuello de su alfa, sintiéndose adormilado por las caricias en su espalda baja―No sería bueno que nos acurruquemos mientras tanto, porque podrías dormirte. Es mejor revisar que tengamos todo en las maletas y así el tiempo se va volando.
El rubio asintió y tomó la mano de su alfa para caminar hacia la sala, en donde sus dos maletas esperaban. El menor se sentó en el sofá, manteniendo sus dos piernas abiertas mientras dejaba caricias inconscientes sobre su vientre, sonriendo cuando Yoongi arrugó el ceño al intentar abrir su maleta.
El alfa sonrió al ver algunos conjuntos de ropa con la talla de Sehun en la maleta.
Si tenían la fortuna de realizar de forma rápida la adopción, llevaban algunos conjuntos de ropa para colocarle los primeros días, sabiendo que tendrían que comprar otras cosas en su estadía en Busan.
―Creo que llevamos lo necesario e incluso más―Jimin asintió, mordiéndose el labio al ver los pequeños calcetines de Kumamon en la maleta.
Calcetas que eran iguales a las de Yoongi y las propias.
― ¿Llevas tus vitaminas? ―el omega asintió, señalando la pequeña bolsa de tela que estaba junto a las pantuflas, los frasquitos manteniéndose dentro de ella. ―Bien, si necesitamos algo más lo compramos allá.
Yoongi cerró la maleta con un poco de dificultad, haciendo que Jimin riera por el tono rojizo que había tomado el rostro del mayor ante el esfuerzo.
Ambos estaban muy nerviosos y aunque intentaran ocultarlo para transmitir seguridad a su pareja, podían sentir a partir del lazo lo que en verdad pasaba por el cuerpo de su compañero. Y es que podían pasar muchas cosas durante el proceso de adopción, tanto como ganarse la custodia como no hacerlo.
Sabían que tenían una ligera ventaja ante la situación económica de ambos, Yoongi era alguien muy conocido con un muy buen sueldo, muy bueno para mantener a un niño e incluso muchos más. Pero no estaban seguros si fuera un obstáculo la distancia entre el orfanato y el que era su hogar, ya que los trabajadores sociales no podrían ir a revisar el departamento.
Yoongi había investigado un poco del tema e incluso había tomado algunas fotografías, esperando que eso fuera de ayuda.
La casa de Jimin había sido vendida gracias a la compañía de vienes raíces, por lo que no tenían un lugar en sí donde quedarse. Pero se mantendrían en el hotel que un socio de Namjoon había inaugurado pocos meses atrás. En donde tendrían mucha seguridad, garantizada.
―Hay gente afuera del edificio―dijo Jimin mientras observaba por la ventana, sintiéndose nervioso al ver muchos fotógrafos y otras personas.
―Lo sé, amor. Será así por un tiempo, al menos hasta que se sepa tu identidad como mi pareja―Yoongi se asomó también, chasqueando la lengua con molestia. ―Son así de imbéciles para poder tener primero la noticia, después todos se acostumbran y dejan un poco de lado el tema.
El omega asintió, sobresaltándose ligeramente al escuchar un mensaje en el celular de su pareja.
―Bien, es hora de irnos―Yoongi caminó hacia la mesita de centro y tomó el sombrero de pescador y el cubrebocas negro, colocándoselo todo a Jimin, para poder ocultar su rostro lo mejor posible―No mires a nadie y el camino recto hacia el auto. Los guardias estarán ahí para evitar que cualquiera se acerque a nosotros.
El omega comenzó a ponerse un poco más nervioso que antes, sintiéndose más sobreprotector con el bebé en su vientre. Sentía como si el montón de periodistas y fanáticas que estaban fuera del edificio le harían daño a su bebé.
―Le daré al asistente del chofer las maletas, luego iremos nosotros.
Yoongi vio con una sonrisa empática el rostro nervioso de su pareja, sabiendo que él no estaba acostumbrado a todo ese mundo.
―Tranquilo cariño, no va a pasar nada―le rodeó con ambos brazos por la cintura, dejado que el omega se acercara a su cuello para olerlo y tranquilizarse.
Sintió una vibración en su bolsillo y supo que eran momento para que ambos bajaran.
Cuando ambos estuvieron cerca de la entrada, Jimin hizo caso a lo que su alfa le indicó, apegándose a su brazo y manteniendo la vista sobre el auto.
Las personas comenzaron a fotografiarlos y grabarlos con sus molestos micrófonos y cámaras. Las fanáticas gritaban y los periodistas intentaban acercarse, pero la seguridad estaba siendo efectiva y no lograban pasar de la zona límite.
― ¿Por qué nos ocultas a tu omega, te da vergüenza? ―uno de los periodistas preguntó con malicia, ganándose una seña obscena de parte del alfa.
Cerró rápidamente la puerta de la camioneta y miró con una sonrisa pequeña a Jimin, quien ya se había quitado el sombrero y el cubrebocas.
― ¿Lo ves? No fue tan malo―Jimin asintió y volvió a abrazarse a su brazo, sintiendo aún la incomodidad de todas las personas que estaban afuera, algunas pegadas al auto intentando tener alguna foto.
―Estoy muy cansado, mis pies duelen a horrores―hizo un pequeño puchero, cerrando los ojos cuando el conductor y el de seguridad, que iría en el asiento del copiloto, se subieron―No quiero pensar cómo serán los últimos meses, cuando mi panza sea más grande.
Yoongi apartó el cabello de la frente del menor, comenzando a dejar besos pequeños.
―Te verás magnifico y tendrás que recibir masajes de pies y piernas todos los días―Namjoon le había dicho a Jimin que le enviaría a casa la masajista para embarazados que estaba atendiendo a Jin, siendo de ayuda para que sus piernas no se hinchen demasiado.
Aunque Yoongi le daba unos increíbles masajes, así que no se negaría a un masaje de su alfa.
―Los masajes me gustan―el auto arrancó y el viaje comenzó, Jimin sintiendo el sueño apoderarse lentamente de su cuerpo.
―Acuéstate en el asiento y acomoda tu cabeza en mi regazo, así podrás dormir mejor―definitivamente no iba a quejarse, estaba muy cansado y si dormía de mala forma le dolería todo el cuerpo cuando llegaran a Busan.
Yoongi sonrió y comenzó a acariciar el cabello del rubio, revisando algunos mensajes de su celular mientras vigilaba que Jimin durmiera a gusto y no dañara su pequeño vientre de alguna forma.
El viaje fue realmente rápido, al estar ambos completamente tranquilos y Jimin dormido, ambos disfrutaron del momento relajante.
Cuando llegaron al hotel, ambos vieron con mucha sorpresa el hermoso lugar, definitivamente Namjoon tenía razón y se veía un hotel realmente lujoso. El omega, aún con el miedo, se colocó el sombrero pescador y el cubrebocas.
En la recepción les atendieron muy amablemente, dándoles una de las mejores habitaciones del hotel. Les habían garantizado su seguridad y comodidad, diciéndoles que podían salir por la salida trasera del hotel por si habían personas en la entrada
Jimin sonrió adormilado cuando vio la cama del cuarto de hotel, sabiendo que tendría un increíble descaso en ese esponjoso colchón.
―Voy a contactar con el orfanato y exponerles nuestro caso, mientras tanto, puedes descansar―el omega iba a negarse, porque quería estar presente en cada paso que dieran en la adopción de Sehun, pero se sentía muy cansado y no podría mantenerse despierto.
―Por favor avísame de cualquier cosa―dejaron las maletas cerca del armario de la habitación, solamente tomado el celular para contactar con el orfanato.
El alfa salió de la habitación y caminó hacia la pequeña sala de la habitación, manteniendo su celular en su oreja, escuchando los pitidos de espera.
― ¡Buenas tardes! ―exclamó rápidamente, sorprendiendo a la chica del otro lado.
―Buenas tardes, señor. Ha llamado al orfanato de Busan ¿Qué se le ofrece?
―Bueno, el caso es un poco complicado de decir por teléfono, pero con mi pareja omega queremos adoptar a un bebé en específico que entró recientemente al orfanato. Oh Sehun. ―hubo un silencio al otro lado de la llamada, escuchando solamente las teclas de la computadora.
―Oh sí, el pequeño entró recientemente y el día de ayer se habilitó su adopción―Yoongi sonrió. ― ¿Ustedes son la pareja de la que nos habló la señorita...Shin Suran?
Sabía que Suran había hablado con los trabajadores sociales sobre su interés sobre adoptar a Sehun, por lo que no le extrañó la información.
―Sí, somos un alfa y omega. Verá, yo soy una figura pública y hemos venido a Busan para poder conocer el proceso de adopción. Nos quedaremos el tiempo necesario, pero me gustaría saber qué debemos presentar para poder iniciar el proceso―la chica del otro lado se sorprendió, jamás había atendido a una pareja de famosos, por lo que no sabía si había alguna excepción o proceso más rápido.
―Pueden venir mañana temprano, le diré a mi superior sobre el caso y comenzaremos a ver el proceso para hablarles sobre las variantes―el lobo alfa agitó su cola cuando escuchó aceptación de parte de la mujer― ¿Podrían darme su nombre y el de su pareja? Para registrarles como postulantes a la adopción de Sehun.
―Claro, Min Yoongi y Park Jimin―la mujer comenzó a escribir en la computadora―Por cierto, apreciaría que esta información fuera manejada con mucha precaución, el nombre de mi pareja no es conocido por mi público y prefiero que se quede así.
―No se preocupe, solamente la encargada del caso será la enterada de los nombres.
El alfa se despidió con una sonrisa, prometiendo que llegarían al día siguiente temprano. Emocionado por saber que, al menos, habían comenzado el proceso de adopción y que nadie se llevaría a Sehun.
Quería darle la noticia a su pareja, pero sabía que el pobre estaba muy cansado.
Una vez tuvieran a Sehun con ellos, tendrían que adaptar su vida a las nuevas vidas que dependerían de ellos.
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―Yoonie, voy a vomitar, no puedo―Jimin veía con los ojos bien abiertos la entrada del orfanato, sintiendo sus manos temblar y las náuseas invadir su cuerpo.
Habían llegado a las instalaciones lo más temprano que se podía, ambos demasiado ansiosos como para poder esperar más. Jimin había comenzado a temblar, sintiendo que devolvería todo su desayuno sobre la trabajadora social.
―Es que estoy nervioso, solo debo tranquilizarme―Yoongi asintió, pasando ambas manos sobre los brazos del menor, intentando tranquilizarse.
El pelinegro le dio un beso en los labios, sabiendo que era normal el sentirse nervioso, en especial que él estaba embarazado y sus emociones estaban a flor de piel.
―Bien, ya me siento mejor.
―Está bien. Si sientes muchas náuseas, debes avisarme e iremos a los baños―el alfa sonrió cuando Jimin asintió sonrojado, tomando la mano del mayor para poder caminar al establecimiento.
El chofer y el de seguridad se mantendrían en el estacionamiento del lugar, esperando por la pareja, ya que no estaban seguros de cuánto tiempo se mantendrían en el lugar.
Tocaron el timbre y esperaron a que la puerta de cristal se desbloqueara, el alfa empujando cuando el sonido indicativo se escuchó, ambos entrando con ojos curiosos. La recepción estaba adornada de forma simple, pero acogedora. Ambos sabiendo que donde estaba la verdadera decoración era en el área donde estaban los niños.
―Buenas tardes, por aquí―ambos se fijaron en el mostrador que estaba a unos pasos delante de ellos, ambos sonriendo pequeño ante la simpática mujer―Me presento, mi nombre es Gong MinJi.
―Buenas tardes―la pareja se colocó frente al escritorio, Jimin manteniendo el agarre en la mano de su alfa―El día de ayer realicé una llamada para explicar un poco sobre el caso en específico que queremos llevar, con un cachorro en particular.
La chica asintió, tomando entre sus manos algunos documentos.
―Sí, habló conmigo sobre el caso de...Oh Sehun ¿Cierto? ―ambos asintieron, Jimin sintiéndose un poco acalorado por el sombrero y el cubrebocas que mantenía en su rostro―Bien, les pido que por favor esperen unos minutos en las sillas, iré con la persona encargada de su caso.
La pelinegra hizo una reverencia y caminó hacia uno de los largos pasillos del interior, perdiéndose de vista rápidamente.
― ¿Podemos sentarnos? Aún me duelen un poco los pies―Yoongi asintió rápidamente y fue hacia las sillas del área de espera, acariciando la mano de su omega, mientras este apoyaba su cabeza en su hombro.
―Debiste traer zapatos más cómodos, amor. Incluso las pantuflas hubieran sido buena idea―Jimin rio y apretó el brazo del mayor.
― ¿Cómo iba a venir con pantuflas? Se supone que debo verme como un omega serio, si traigo las pantuflas de gatito haré el ridículo―Yoongi negó mientras apretaba la mejilla del menor.
―No es verdad, te verías precioso. De hecho, ahora que lo recuerdo, quiero que ese enterito de pollito que ha estado escondido por muchas semanas salga, será demasiado para mi corazón el verte con ese enterito y tu vientre más grande―Jimin se mordió el labio por debajo de la tela, restregando su rostro contra el mayor.
―Me lo pondré, pero en casa.
Minutos después, la misma chica caminaba hacia ellos con una sonrisa.
―Síganme, por favor―Jimin movió lo más que pudo los dedos de sus pies en su calzado, lloriqueando cuando tuvo que levantarse.
―Compré las sales que Jin nos recomendó, cuando lleguemos a la habitación, podrás darte un buen baño relajante―las promesas de Yoongi le hacían el embarazado más feliz, por lo que aceptó sin rechistar.
Entraron a una de las oficinas del pasillo, mostrando en una placa de la puerta el que intuían, era el nombre de la trabajadora social.
"Kim Hyuna"
La pelinegra les abrió la puerta de la oficina, permitiéndoles el entrar primero. La trabajadora los veía con una mirada que no sabían explicar, no sabían si era buena o mala. La mujer mantenía ambas manos juntas y una de sus delgadas cejas elevada, como si los juzgara.
―Buenas tardes, por favor pasen y tomen asiento―la pareja se sentó en las cómodas sillas al frente del escritorio de la trabajadora, la chica que les había guiado, sentándose al lado de la pelirroja―Mi nombre es Kim Hyuna y seré quien maneje su caso.
Jimin jugaba con los anillos en los dedos de Yoongi, sintiéndose ligeramente intimidado por la que podía reconocer, como una alfa.
―Tengo entendido que usted, señor Min, es una figura pública―el pelinegro asintió―Y sé que ambos han viajado para poder comenzar con este proceso, pero quiero que entiendan que, aunque las cosas sean ligeramente más rápidas, no dejaré ninguno de los requisitos sin verificar o algún paso sin cumplir.
Jimin suspiró y se quitó el cubrebocas y el sombrero, sintiendo que se asaría si mantenía eso puesto.
―Estamos totalmente de acuerdo con ello.
Hyuna comenzó a revisar los documentos que los mayores habían llevado, sabiendo de antemano lo que debían llevar.
―Leí que usted es un rapero de RM Industry, con el nombre artístico "Agust D" ―Yoongi asintió. Sabía que en los papeles a entregar tenían que indicar cosas como su profesión y sueldo mensual, por lo que no le sorprendió―El sueldo de ambos padres es algo importante para el proceso de adopción. Una vez su contrato finalice ¿Qué trabajo planea mantener?
―Soy socio y compositor de la empresa, por lo que una vez mi carrera de rapero acabe, me mantendré como compositor―Hyuna asintió.
―Ser una figura pública requiere de mucho tiempo, por lo que el tener un hijo podría dificultarle las actividades ¿Cómo llevaría ese proceso?
―Con mi jefe ya hemos tratado el tema, tendré días intermedios en la semana para trabajar desde casa. En los días que no pueda y mi pareja esté ocupado, adecuaremos mi espacio para que sea seguro para él, para poder cuidarle en las oficinas.
Hyuna asintió, sin mostrar demasiado en sus expresiones faciales.
―Bien, entiendo que usted, Park Jimin, está embarazado―Jimin asintió con una pequeña sonrisa, remarcando con su mano su vientre, el cual no se notaba tanto por el gran suéter de su alfa.
Hyuna sonrió con ternura, siendo la primera expresión facial comprensible que les había brindado en lo que iba de la reunión.
― ¿Puedo saber por qué desean adoptar? Tomando en cuenta que se encuentra en cinta ―Yoongi sabía que Jimin tenía un sentimiento mucho más profundo por Sehun, ya que lo había conocido desde mucho antes, por lo que dejó que su omega se expresara.
―Sehun fue mi alumno cuando era uno de los profesores en el jardín Sweet Dreams, desde ese momento tuve una gran conexión con el cachorro. Cuando me enteré lo de su madre, mi lobo y el de mi alfa fueron los primeros en reaccionar, tomando la decisión de hacerlo parte de nuestra familia―Hyuna anotó en una de las hojas que mantenía sobre su escritorio.
―Me imagino que el cachorro reconoce a sus lobos y olores―la pareja asintió con una sonrisa, recordando lo feliz que se ponía el pequeño bebé cuando detectaba sus aromas desde lejos― ¿Tenían contacto con algún otro familiar del cachorro?
―Al principio con su padre, pero a inicios del año él falleció. De ahí en más, su madre era la única que respondía por él e incluso nos decía que no había nadie para cuidarlo, más que ella―la pelirroja asintió.
Suspiró y cerró las carpetas con la información, viendo a la pareja con una sonrisa.
―Normalmente le pedimos a los padres postulantes que mantengan una distancia con el cachorro que desean adoptar, sin embargo, en este caso me interesa el ver la reacción y comportamiento de Sehun cuando esté con ustedes. Tendrán treinta minutos y luego tendremos que llevarle al centro de cuidados―Jimin se mordió el labio cuando su lobo se removió en su interior, sintiendo por medio del lazo que su alfa estaba igual de ansioso―Los tramites serán un poco más rápidos, ya que poseo toda la información personal, económica y penal. El representante de su empresa también llamó y brindó más información que nos sirve para completar las fichas.
―Uh, no quiero sonar impaciente, pero ¿Cuánto tiempo sería necesario para completar el proceso? ―Hyuna miró a Jimin con una sonrisa, entendiendo por completo el sentimiento que su lobo le estaba transmitiendo, ya que ella también había adoptado a uno de sus cachorros mientras su omega estaba embarazo de su hijo menor.
―Intentaremos que el proceso sea efectivo, alrededor de dos semanas y media. Normalmente son meses los que se toman para verificar que un bebé se encontrará en un buen entorno, pero intentaré que el proceso se realice de la mejor manera.
Ambos asintieron con satisfacción y se levantaron cuando vieron que la trabajadora social lo hizo primero, todos caminado fuera de la oficina.
―El bebé ha estado algo triste desde su llegada, es difícil que duerma sin que alguien se mantenga a su lado―dijo la pelirroja, sintiendo su corazón doler ante los recuerdos del bebé llorando de forma desgarradora por las noches, inclusive ella intentando arrullarle.
―Sehun siempre ha sido receptivo con los lobos, seguramente le hace mal la falta de uno a su lado―dijo Yoongi, sabiendo que el bebé era realmente tranquilo. Aunque al estar en un ambiente incómodo para él, era normal que eso sucediera.
―Por eso me interesa el ver cómo se comporta con ustedes, en especial porque no los ha visto en un buen tiempo―Jimin apretó la mano de su alfa cuando entraron a la zona de los niños, viendo el gran patio de juegos, varios niños grandecitos jugando. ―Notamos que él aún no es capaz de transformarse en lobo, por lo que no suele jugar con los demás.
Jimin puchereó, recordando que siempre se mantenía con él cuando los demás jugaban en forma de lobos, ya que él no podía cambiar.
La pareja sintió su pecho calentarse cuando lograron ver a Sehun, estaba sentado en una alfombra de espuma, metiendo algunos bloques con diferentes formas en un cubo de plástico. Su dedo pulgar manteniéndose en su boca.
Jimin comenzó a dejar sus feromonas salir, intentando llamar la atención del cachorro sin tener que hablarle.
El pequeño suspiró y desvió la mirada de los bloques, manteniéndola sobre las tres personas que estaban frente a él. Rápidamente los reconoció, tanto de vista como de olfato, por lo que soltó de golpe el bloque de plástico y comenzó a gatear hacia ellos, comenzando a sollozar.
Yoongi se agachó, ya que no era recomendable que Jimin lo hiciera, recibiendo al menor en sus brazos.
―Hola, cachorro hermoso―habló un poco más agudo el alfa, sonriendo cuando el cachorro pasó sus pequeños brazos por sus hombros, abrazándose a él mientras sollozaba bajito.
―Cariño, no te vemos hace muchos días―Jimin sonrió mientras apoyaba su cabeza en el hombro de su alfa, quedando muy cerca de Sehun, quien estiraba su mano hacia su rostro.
―Mi compañera se quedará aquí mientras transcurre la media hora―hablo Hyuna con una sonrisa, ganándose un asentimiento de parte de ambos―Con permiso.
Jimin debía admitir que se pondría a llorar una vez la media hora finalizara, se sentía demasiado emocional y el hecho de ver a Sehun tan feliz, después de saber que la había estado pasando muy mal, le ponía sentimental.
―Esas mejillitas de azúcar―Jimin sonrió cuando Sehun chilló emocionado, ya que los besos que le dejaban en sus mejillas regordetas le encantaban.
―Te sientes muy solito ¿Uh? ―preguntó el alfa con voz aguda, acariciando la barriga del menor, quien atrapó el dedo del pálido en una de sus manos―Pronto saldrás de aquí y te irás con nosotros.
Jimin sonrió con esperanza, sintiendo un pequeño punzón ante la idea de que algo podría salir mal y que los trámites no fueran posibles. No quería ser negativo, pero no podía evitarlo.
La media hora consistió en Sehun demostrándoles su gran capacidad para introducir bloques en el cubo de plástico, siendo aplaudido y halagado por eso.
―La media hora ha terminado―la chica pelinegra los veía con una mueca apenada, ya que no quería interrumpir el lindo momento, pero era su trabajo―Sé que es probable que el cachorro no quiera separase, pero una de las cuidadoras vendrá y los ayudará.
En ese momento Hyuna entró acompañada de otra mujer, la cual llevaba un traje colorido.
Sehun sintió cuando comenzó a ser separado del cuerpo del alfa, apretando las manos sobre la camiseta del pelinegro, rehusándose a soltarle.
―Vamos Sehunie, es hora de dormir―la cuidadora tomó del torso al menor, intentando separarlo.
El llanto comenzó a inundar la habitación, el cachorro intentando mantener el agarre sobre la ropa del mayor, no queriendo separarse del olor que le daba confort y seguridad.
Jimin se mordió el labio con los ojos húmedos cuando Sehun fue separado con cuidado, el cachorro comenzando a estirar los brazos hacia su dirección mientras lloraba.
―Sé que no es una imagen linda de ver, pero era necesario para mí el ver la interacción con el cachorro―la pareja suspiró con el corazón encogido, intentando comprender―No se preocupen por él, intentaremos calmarle y tomará una buena siesta.
Jimin dejó caer las lágrimas y se apegó a su alfa, sintiéndose mal de haber visto al cachorro llorar de esa forma, en especial porque era un niño muy sonriente.
―Cuando se sientan cómodos, por favor pasen a mi oficina nuevamente―Hyuna sonrió con algo de pena, saliendo de la habitación.
La pareja sentía a sus lobos aullar con dolor ante la ida del cachorro, pero debían comprender que era parte del proceso y que, si todo salía bien, el cachorro se iría con ellos de ese lugar.
―Calma, amor. Pronto podremos llevarlo a casa―Jimin asintió mientras frotaba su nariz en el cuello de su alfa, suspirando con tranquilidad al sentir su olor.
―Es que me dio mucho sentimiento el verlo llorar así y que se aferrara a ti de esa forma―se limpió las lágrimas, sonriendo cuando su alfa comenzó a limpiarle las mejillas. ―Es mejor que terminemos con el proceso de hoy, vamos.
Ambos caminaron hacia la oficina de Hyuna, quien ahora, les recibió con una sonrisa.
Llenaron algunos papeles y respondieron algunas preguntas más, dando por finalizado el proceso de ese día. Las fotos del departamento y muchos papeles más fueron revisadas.
―Les llamaremos cuando tengamos alguna noticia, ya sea de un avance o un retraso en el proceso―ambos asintieron con una sonrisa, levantándose nuevamente de las sillas.
―Uh, disculpen. Me informan en la recepción que hay varios periodistas fuera del orfanato―dice la asistente a Hyuna, quien vio a la pareja con ojos bien abiertos.
Yoongi gruñó molesto, no podía creer que en verdad les siguieran hasta ahí. Sacó su celular y le marcó a Namjoon, siendo la llamada tomada en poco tiempo.
―Nam, estamos en el orfanato y los periodistas que estaban fuera del hotel nos han seguido. No podemos ir al estacionamiento―el alfa escuchaba la respuesta, manteniendo a Jimin abrazado. ―Bien, esperaremos.
El alfa colgó.
―Uh ¿Podríamos quedarnos un poco en la sala de espera? Van a venir algunos guardaespaldas para que podamos salir sin problemas―Hyuna asintió rápidamente.
―Claro que sí, no hay problema.
Cuando los de seguridad llegaron, fueron capaces de entrar al auto sin problemas, aunque varios periodistas confianzudos fueron empujados por la seguridad hasta caer al suelo.
Jimin no cabía en la emoción que sentía, sonriendo en grande mientras dejaba besos en la mejilla del alfa.
―Gracias por todo, Yoonie―el alfa negó, dejado un casto beso en sus labios.
―Gracias a ti, mi amor.
No podían esperar a tener las buenas nuevas sobre la adopción, sus lobos estando más ansiosos que nunca al haber visto al cachorro una vez más.