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— Piensa en algo difícil, ¿eh? —dijo Bangchan sonriendo.
Entonces Sun hee le miró y recordó de nuevo las palabras de su amiga.
Bésalo. Bésalo tú... Bésale. Te gusta. Estás enamorada. Se nota cuando hablas de él...
Sun hee de repente observó a Bangchan con los ojos cerrados y sonriendo esperando a que dijera algo.
— ¿Ya? —preguntó Bangchan impaciente dando saltitos sentado.
— Sí... Atento... —dijo Sun hee.
Entonces Bangchan dejó de dar saltitos y asintió aún con los ojos cerrados, preparado para escucharla.
Pero no se disponía a decirle nada. La chica fue acercándose a él y finalmente sus labios se juntaron. Acarició su cara con la mano mientras le besaba suavemente.
Los labios de Bangchan siguieron el beso, que fue cálido y agradable.
Al cabo de unos segundos se separaron y Bangchan abrió los ojos mirándola. Se mordió el labio inferior.
Sun hee miró hacia abajo nerviosa, no era capaz de volver a mirarle a los ojos.
Bangchan agachó su cabeza hacia ella, mirándola desde abajo y sus ojos se encontraron.
Sun hee le miró esta vez y quedaron en silencio ambos.
Bangchan mostró una pequeña sonrisa y Sun hee evitó de nuevo su mirada mientras nerviosa sujetaba la falda de su vestido con ambas manos.
Entonces la chica se levantó. - Lo siento...-dijo mientras la voz le temblaba y se fue corriendo, ¿qué acababa de hacer?
Bangchan desde el banco la observó extrañado, pensó que sería mejor no molestarla ahora, seguidamente levantó la cabeza hacia el cielo y recordando el beso miró de nuevo hacia la chica irse y sonrió tímidamente.
(...)
Al día siguiente en clase Bangchan no vio a Sun hee por la calle como siempre ni en su taquilla cogiendo libros, entonces entró en clase y la vió allí sentada. Sun hee estaba leyendo el libro de texto de inglés y no le saludó cuando el moreno se sentó
— Buenos días... —dijo Bangchan con un tono extraño, estaba un poco nervioso.
Sun hee dijo buenos días pero casi no se le oyó, la chica estaba completamente ruborizada.
Al acabar la clase fue a buscar a Hyunjin, tenía que hablar con él.
— Hyunjin... He estado pensándolo... Y sí, saldré contigo... —dijo Sun hee, realmente no había pensado mucho, pero no quería hacerle daño. Lo que hizo el día anterior con Bangchan no tenía explicación, se había dejado llevar por la situación, pero pensó que en verdad no sentía nada por él.
Hyunjin sonrió y la besó.
Ambos se dieron la mano y siguieron hasta su casa.
De camino a casa no hubo rastro de Bangchan, tal vez cogiera por otro camino para no incomodar a Sun hee.
— ¡¿Que has hecho qué?! —gritó su amiga mientras cogía una galleta del paquete.
— Lo que te digo, Ha-neul... No... No me gusta Bangchan... Solo... No sé lo que hice... Fue tu culpa por decirme que le besara... —decía Sun hee confusa.
— Sí te gusta, pero no te das cuenta. Crees que saliendo con Hyunjin lo olvidarás y no será así. Le harás daño a él... Y a tí —dijo Ha-neul poniendo una mano sobre el hombro de Sun hee.
Sun hee negó con la cabeza.
— Me alejaré de Bangchan y me centraré en Hyunjin. Y no pasará nada —dijo la chica.
Ha-neul negó con la cabeza.
— Haz lo que creas... Pero créeme, no será tan fácil. Bangchan te pedirá explicaciones y no podrás evitarle toda tu vida —dijo alzando el tono de voz.
— No le evitaré... —dijo Sun hee bebiendo un poco de su taza.
Ha-neul se encogió de hombros.
— Tu allá... Ya veremos lo que pasa —dijo y bebió también de la suya..