Entraron en la residencia siendo recibidos por todo el personal disponible.
SiCheng no se permitió sentirse incómodo. De hecho, se estaba comportando como si fuera algo rutinario para él, negando y agradeciendo amablemente la atención.
Aún así, se permitió mirar cuidadosamente la casa. Su recorrido desde la estancia al comedor y toda su decoración, siempre de la mano de su fiel pareja.
Al entrar en la habitación, un par de mayores, hombre y mujer, esperaban en la silla principal y la contigua respectivamente y, frente a ella, un apuesto joven esperaba en silencio.
- Dios santo – exclamó la mujer – chicos, pensamos que no llegarían –
- Había mucho tráfico – se excusó Yuta, acomodando la silla para su pareja junto a la de su hermano.
- Y que lo digas, la principal estaba hecha caos – concordó su padre.
- Hola – susurró el menor, sonriendo al invitado.
- Hola – respondió el chino de igual manera.
- Lo supusimos. Llegar tarde no es propio de ti, hijo – dijo su madre con una sonrisa amable, antes de girarse a su pareja – tú debes ser SiCheng –
- Un gusto, señora – hizo una leve reverencia.
- Eres un chico muy apuesto – elogió sorprendida.
- Lo es ¿no? – sonrió Yuta.
Jaemin miró divertido a su hermano. Nunca lo había visto de esa forma y le hacía feliz ver que por fin estuviera cayendo por alguien.
- Gracias – murmuró con timidez – permítame decirles que su casa es muy bonita –
La mujer sonrió emocionada
- ¿Te gusta? –
- Es muy hermosa – asintió – no pude evitar notar que la decoración está fuertemente influenciada en el siglo XVII –
- Gracias – lo señaló con la mano – ¿puedes explicárselo a mi esposo? Intentó colgar un cuadro de Diego Velásquez en la pared –
- No entiendo cuál es el problema – admitió el hombre.
- Es un siglo de diferencia entre ambas corrientes artísticas, señor – aseguró el chino – el estilo que su esposa eligió para la decoración se caracteriza por la opulencia y los colores vibrantes; su pintura, por otro lado y siendo que se trata de Velásquez, seguramente se componía de colores oscuros, algo dramático. Apagaría el ambiente que la señora intentó crear, al menos en la recepción –
Yuta y Jaemin se miraron entre sí, extrañados.
- ¿Qué es lo que estudias, hijo? – interrogó el mayor, impresionado.
- Solía estudiar artes en la Universidad Nacional de Artes –
- ¿No más? –
- Tuve que abandonar mis estudios para poder trabajar tiempo completo –
- ¿Dónde trabajas? – preguntó esta vez la mujer.
- En un servicio de banquetes – respondió Yuta en su lugar.
- Soy parte del staff – complementó el menor.
No dejaría que su novio tergiversara su realidad
- ¿Te dedicas a...? – frunció el ceño – ¿ser mesero? –
- Mayormente – asintió – pero me desempeño también como lavaloza. Algunas veces también como chofer –
Ambos mayores lo miraron boquiabiertos, dejando que el silencio se apoderara de la mesa por algunos segundos.
- Eso suena a mucha acción – bromeó Jaemin, llamando la atención.
- Más de la que puedes imaginar – siguió el chino.
- ¿La comida cobra vida y te ataca? –
- Además de eso – entornó los ojos – es peligroso lavar la loza –
- Oh ¿en serio? – rió estruendosamente – debe ser toda una aventura –
- El otro día preferí salvar la vajilla en lugar de mi vida, y resbalé por todo el suelo hasta caer sobre las ollas apiladas que terminaron encima de mí – recordó – te lo digo, es como ser bombero –
- Esto es ridículo – interrumpió el padre de familia, atrayendo las miradas sorprendidas de todos.
Yuta estaba listo para atacar.
- Todo el mundo sabe que para lavar la loza tienes que usar botas antiderrapantes – negó decepcionado – al menos un tapate de goma con hoyos –
- ¿Sabe lo complicado que es limpiar bajo ese tapete? no extendería mi turno por algo que puedo evitar –
- Y preferiste caer – dijo la mujer en medio de la risa – no fue algo muy inteligente de tu parte, hijo –
- Yo salvé el día, creo que todos están olvidando esa parte – continuó el chino, dispuesto a defender su decisión.
Yuta se permitió relajarse, mirando embelesado como su novio mantenía con sus padres una absurda conversación sobre su empleo, sobre la escuela, y otros temas que el japonés honestamente no pensaba que su novio conociera.
Jaemin, por su lado, resolvió que sus padres tenían algo en su contra, pero decidió no entrar en el tema por esa noche. Esa noche era de su hermano.
Después de la exitosa cena, la madre de Yuta los invitó a todos a pasar a la sala de estar para beber café y tomar su postre, a lo que todos accedieron gustosos.
SiCheng a estas alturas estaba siendo tan participativo como se podía, por lo que decidió incluir más al menor en la conversación.
- Jaemin – llamó - ¿tú no tienes pareja? –
Yuta apretó su mano para indicarle que se trataba de un tema delicado. El chino apretó los ojos en respuesta.
- Yo... -
- Solía tener un novio encantador – interrumpió su madre – un chico muy apuesto. Estudiaban en la misma escuela y él era miembro del comité académico. Tenía buenas calificaciones y pertenecía a una buena familia – recordó.
- Era un idiota – murmuró el menor, más para sí mismo.
- ¿A qué te refieres? – interrogó SiCheng.
- Él me dejaba plantado, no respondía mis llamadas o me llamaba ebrio en medio de la madrugada – rió – me dejó esperándolo un montón de veces, y después me di cuenta de que no aparecía porque estaba muy ocupado engañándome. Un idiota –
Sus padres lo miraron estupefactos. De pronto, el salón se tornó silencioso.
- Jaemin – habló el hombre – hijo, ¿por qué no nos lo dijiste? –
- Porque terminé con él. No había caso hacer un drama – se encogió de hombros – además no lo amaba lo suficiente para dejarme deprimir por ello –
- Entonces no era amor – sentenció SiCheng – el amor no es sufrir, eso es mentira. El amor se trata de ser feliz y hacer feliz a alguien más. El amor no debe de doler, debe de sentirse correcto – apretó la mano de su pareja – no importa las circunstancias, si sientes que es tu lugar, entonces no hay nada malo con ello –
El menor parpadeó rápidamente en cuanto sintió sus ojos cristalizarse y le sonrió sinceramente su cuñado.
- Eres un romántico – se burló el padre del par – debe ser la escuela – bromeó, intentando cambiar el tema y lográndolo.
Ni si quiera me acordaba que tenía que actualizar esto 🙃
Gracias por esperar ❤️
PDT: NO LO PUBLIQUÉ TAMPOCO EL DÍA QUE ESCRIBÍ EL MENSAJE DE ARRIBA 😭