Harry.
Ed y yo veníamos cantando a Stevie Nicks mientras íbamos en camino a la escuela.
Hoy me siento más motivado de lo normal. ¿Por qué? Bueno, se puede decir que tuve un pequeño momento con Louis y lo mejor de todo es que fue con mi verdadero yo, no con el patético de Marcel.
– Harry, antes de que te bajes me tienes que prometer una cosa – dice Ed estacionando el auto cerca de la entrada.
– ¿Ahora qué?
– Deja por favor de acosar a ese pobre chico.
Dios, ya va a comenzar con lo mismo . ¡Yo no lo acoso! Confieso que soy un poco intenso pero hasta ahí.
– Ed, yo no... – me interrumpe.
– Claro que sí lo haces – dice burlón – el sábado podría jurar que ibas a saltar sobre él, hasta temí por su vida.
– Bien, trataré de ser menos acosador como tu lo llamas – me crucé de brazos.
– Ese es mi hijo – dijo burlándose de mí – ya no hagas puchero y baja de mi auto.
– Si si, como digas.
Nos despedimos y fui directamente a mi casillero para tomar mis libros de química.
Odio química porque no sé en qué momento va a explotar algo en mi cara, aparte de que Niall está en mi equipo y tampoco es muy vivo con eso de los experimentos.
Caminando hacia mi casillero pude ver a los chicos hablando y no dudé ni un segundo en irlos a saludar.
– ¡Hola! – dije alegre acomodando mis lentes.
– Hola Marcel – me contestó Liam de la misma manera – ¿qué tal tu fin de semana?
– Aburrido – si supieran – nada fuera de lo normal, ¿el suyo?
Zayn estaba a punto de hablar cuando fue interrumpido por la escandalosa voz del rubio – ¡Pero miren quien viene ahí! – dice mirando a Louis quien viene caminando hacia nosotros – ¡El futuro señor Styles!
Me gusta como suena eso.
Louis lo miró serio y le sacó el dedo de en medio mientras que los otros tres reían.
Yo me tuve que aguantar las ganas de sonreír y en cambio me hice el desentendido poniendo mi mejor cara de confusión.
– ¿Señor Styles? – pregunté curioso.
– No les hagas caso Marcel, están locos – contestó acomodándose la mochila en sus hombros.
– No tienes idea de lo que sucedió el sábado – me dice Zayn abrazando mis hombros – nuestro querido Lou estuvo coqueteando con el mismísimo Harry Styles, ¿puedes creerlo?
– Oh – solté "sorprendido" – ¿cómo fue que pasó eso?
– Pues resulta que Harry Styles y Ed Sheeran aparecieron en la cafetería de mi tío – dice Liam – y bueno, Harry se nos acercó para charlar aunque sus verdaderas intenciones era obtener el número de Louis.
– Los hubieras visto, amigo – dice Niall riendo – estaban para una foto.
– Me lo imagino – murmuré sin dejar de ver a Louis quien solo se mantenía callado observando detalladamente a sus amigos.
– Lo tuyo con Harry nunca podrá ser Marcel – me dice Zayn – vas a tener que quedarte en el papel de fan para siempre porque ya te lo ganaron – señala al castaño.
– Dejen ya de decir tonterías ustedes tres – les dice Louis haciéndolos reír – hablan como si me fuera a casar con él cuando dudo mucho que lo vea de nuevo.
– Bueno, tenemos la fiesta el viernes, a la cual Ed amablemente nos invitó – dice Niall – por cierto Marcel, no hagas planes este viernes que nos iremos a casa de un famoso a pasarla bomba.
Oh.
Eso no va a suceder.
– ¿El viernes? – pregunté un tanto temeroso y me puse aún más nervioso cuando los cuatro se me quedaron viendo – n-no puedo...
– ¡Vamos! Será divertido – me anima Liam.
¿Y ahora qué les digo? ¿No puedo ir porque voy a estar ocupado siendo yo mismo? Van a comenzar a sospechar que ando no anda bien conmigo... aunque no lo hay pero lo menos que quiero ahora es mentir y que me hagan un interrogatorio.
– Voy a visitar a mis abuelos el fin de semana y... no quisiera desvelarme.
– ¡Buu! – me dice Niall – todavía tienes días para cambiar de opinión.
– Pues ya seremos dos que no van a ir, no te preocupes por la presión social que te metan estos tres chiflados – me dice Louis antes de irse caminando hacia el salón.
¿Qué acaba de decir? ¿Dijo que no va? Sobre mi cadáver.
– ¡¿Cómo que no vas a ir?! – le grita Zayn tratando de alcanzarlo.
– No es que no quiera, no puedo – se encoge de hombros - mamá va a salir y estoy a cargo de las chicas.
– Lottie puede cuidarlas – contesta Liam.
– Lottie no se puede cuidar ni a ella misma – ríe – lo siento chicos, diganle a Harry que lo intenté.
Dicho esto se metió al salón como si nada, dejándonos parados en medio del pasillo.
– Ya verá ese enano... – escuché a Niall decir.
– Voy por mis libros – murmuré antes de irme rápido de ahí mientras maquinaba algún plan para hacer que Louis vaya a la fiesta.
Sinceramente no había algún tema en especial por el cual hacer una fiesta, Ed y yo solo queríamos ver a unos amigos y beber un poco, pero nada en especial aunque... iba a ser mi oportunidad para mostrarle a Louis mi verdadero yo.
Desde el sábado no podía dejar de pensar en él y en lo mucho que me gustaría tener un tiempo a solas como Harry y no como Marcel, incluso estaba buscando alguna playlist romántica para ponerla el viernes pero todo se irá al caño sino va.
Ya hasta tenía planeado que jeans iba a usar para hacer notar mi trasero.
Tonto Louis con su hermosa y linda responsabilidad. ¿Por qué tiene que ser tan adorable? ¿Por qué no puede simplemente escaparse un rato de su casa para ir a verme... digo, para divertirse un poco?
Llegando a mi casillero saqué mis cosas de una manera un poco brusca porque me siento algo frustrado. No puede ser que mi plan vaya a fallar, me lleva la...
– ¿Tú que me ves? – le pregunté a un sujeto que está a lado mío, el cual me miraba confundido desde que llegué.
No dijo nada y se fue casi corriendo de ahí. Seguramente lo asusté por andar hablando solo.
Regresé al salón dando grandes zancadas. Se que me estoy comportando como un niño chiquito pero no puedo evitarlo.
– ¿A dónde con tanta prisa cuatro ojos? – escuché decir a alguien detrás de mí.
Voltee a ver de quien se trataba y es ese chico Lucas, el que está obsesionado con Lou, y viene con sus otros dos secuaces. Lo que me faltaba.
– Creo que te ignoró, Lucas – dijo uno de ellos en tono arrogante.
Quise seguir con mi camino, pero estos tres orangutanes me tomaron de la mochila y me jalaron hacia atrás haciéndome tropezar. Sus estúpidas risas se hicieron presentes pero no podría importarme menos.
– ¿Les importa? Tengo clase.
– Wow, el ñoño tiene agallas – dijo el que siempre usa lentes de sol. Creo que su nombre es Gabriel.
– Solo queremos tener una conversación madura contigo, Marciano.
Y ahí están de nuevo las risas.
– Quiero pedirte una única cosa – dice Lucas acercándose a mí de manera amenazante – alejate de Louis, ¿quedó claro?
Ahora es mi turno de reír.
– Cómo digas – dije con ironía tratando de irme de ahí pero me volvieron a tomar de la mochila.
– No estoy jugando, ñoño – dice serio – no voy a permitir que un fenómeno con chalecos horribles me quite a mi Louis.
– Él no es "tú Louis" – hice comillas con los dedos – y aunque me llames fenómeno, sé que me tienes miedo porque piensas que él se puede interesar en mí, a pesar de usar estos chalecos feos como tú los llamas.
Tanto Lucas como los otros dos pazguatos se quedaron callados observándome.
– ¿Algo más que me quieran decir? – les di mi mejor sonrisa mostrando mis hoyuelos.
– Esto no se va a quedar así, Cox – dice antes de chocar su hombro con el mío e irse lejos de allí.
Con un aire de superioridad caminé hacia el salón de química, feliz de haber puesto en su lugar a ese zopenco. "Su Louis", si claro...
(...)
Estúpido ensayo de historia. Estúpida revolución francesa. Estúpido yo por pensar que sería divertido volver a la escuela.
Mi lunes iba muy bien; no me había topado a Lucas por el resto del día ni tampoco molestó a Louis, nada explotó en química y alcancé a comer un muffin de banana en el almuerzo.
Los chicos han estado insistiendo conmigo en ir a la fiesta, pero ya no estoy seguro de estar de ánimo para ir aunque sea sin disfraz, ya saben porque.
Hablé con Ed al respecto de esto durante la clase de ética y me dijo que por nada del mundo cancelaría la fiesta porque ya todos confirmaron, que mejor ahogara mis penas en alcohol porque la fiesta se hace porque se hace.
Louis ya no mencionó nada con respecto de no ir, pero estoy seguro de que no lo está considerando tampoco así que no me quedará de otra más que cantar canciones tristes ese día. Si mi mamá me escuchara diría que soy un dramático.
Ahora voy saliendo de la biblioteca ya que tuve que ir a buscar un libro para hacer un ensayo de cinco mil palabras para el próximo lunes. Iba felizmente pasando por la cancha de fútbol cuando veo a un Louis sudado usando su ajustado uniforme corriendo de un lado a otro.
No me había dado cuenta que me le quedé viendo como idiota hasta que se me cayó el libro.
Vi como el entrenador los reunía a todos y luego todos se dispersaron para poder irse. Rápidamente acomode mi ropa y mis anteojos para verme lo mejor posible. Me hice el interesante abriendo el libro y leyendo una página aleatoriamente.
– Marcel, hola – escuché su voz y alcé la mirada.
Su pelito está pegado a su frente por el sudor y sus ojos están más brillantes de lo usual. Noté como un par de veces pasó su lengua por sus labios. ¿Acaso este chico es real?
– Hola Lou – le sonreí tímido.
– ¿Qué haces todavía aquí? Ya son las cuatro.
– Estuve un rato en la biblioteca buscando el libro para historia y... se me fue el tiempo leyendo – dije señalando el libro.
Louis me miró curioso y luego se echó a reír, ocasionando que las arruguitas en sus ojos se hicieran presentes.
– ¿Qué?
– Tienes el libro al revés.
No puedo ser más estúpido porque no soy más alto.
Sentí mis mejillas arder de la vergüenza y Louis sin dejar de reír no era de mucha ayuda.
El vergonzoso momento se vio interrumpido por un compañero de equipo de Lou quien lo llamó a lo lejos.
– ¡Piensa rápido! – le gritó pero cuando lo hizo el balón ya iba hacia nosotros, más bien, hacia mi cara.
Lo único que sentí fue como mis lentes salieron volando al igual que yo. Escuché la voz de Louis llamándome alarmado y mi cara comenzó a doler como nunca, aunque debo decir que ese balonazo me salvó de un momento incómodo pero estoy casi seguro de que arruinó mi nariz.
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Holaaaa. Espero no me odien.
Sé que me desaparecí como tres meses pero tengo la buena excusa de que la escuela es horrible en línea y apenas voy terminando, me quedan una semana y ya pero ya estoy de salida. Voy a actualizar más seguido para recompensar los meses que estuve ausente.🥺
𝑨𝒍𝒍 𝒕𝒉𝒆 𝒍𝒐𝒗𝒆, 𝒓𝒆𝒏𝒏.