*Capitulo Narrado por Elizabeth*
Después de escuchar la historia de Meliodas me sentí muy confundida, pero no con mis sentimientos hacia el, sino conmigo misma
Era la primera vez que tenía una relación así de importante.
Tenía mucho miedo.
Habían cosas que recién comenzaba a experimentar y sentir.
Así que cuando el me dijo que no teníamos pendiente alguno simplemente me retire del lugar.
Camine hasta la estación y llegué a mi casa.
Entre a mi hogar, saludé a mi madre y subí a mi habitación.
Me acosté en la cama y me quedé así varios minutos.
Meditando.
Sabía que Melascula había dicho eso con mala intención, quizá ella si este enamorada de Meliodas y al no tenerlo para ella sienta mucha envidia y celos hacia mi.
Así que decidí que sería mejor relajarme un poco de ese mal rato.
Llame a Diana y ella me sugirió salir a la disco un rato
Bueno ya tenía bastante que no salía a tomar y bailar con ellas.
Así que acepte
Quedamos de vernos a las 8 para ir primero a cenar y platicar en lo que abrían alguna disco del centro.
Salí puntual.
Diana llegó con Elaine en el auto de ella.
Subí rápido y nos fuimos de mi casa.
Llegamos a nuestro restaurante favorito de sushi.
Platicamos tranquilamente y ellas me aconsejaron con respecto a mi relación con Meliodas.
-No seas tonta Eli, es obvio que Melascula Faith está de lo más celosa y ardida. Tu eres mucho mejor que ella en todo aspecto posible, eres linda, amable, inteligente, ella no es pero para nada como tu. Si dejas a Meliodas por esa tontería en serio te daré un buen golpe.-
Diana solía ser bastante ruda a veces con sus palabras.
Pero tenía razón.
Además Meliodas siempre me había demostrado que me quería.
-Diana tiene razón, Eli tu mereces ser feliz con Meliodas, además si el no te menciono esa cláusula del testamento de su abuelo ¿Hubieras andado aún así con el? El obviamente no quería que supieras nada de eso porque te quiere bien.-
Elaine se había puesto de parte de Diana y sinceramente lo sabía así que no dije nada y solo asentí a sus palabras.
Continuamos platicando y me sentía realmente más tranquila y en paz.
Mientras esperábamos que abrieran alguna discoteca Diana le hablo a Harry para decirle dónde iríamos.
Elaine nos contaba cómo estaba iniciando su relación con Ban.
Aunque él es mucho mayor que ella, se notaba que le respetaba mucho.
Me alegre por ambos.
Era curioso que mis dos mejores amigas salieran con los dos mejores amigos de mi novio.
Por fin la discoteca abrió y entramos para obtener una mesa, ese lugar suele ser muy popular.
A la hora estaba ya completamente lleno.
Sin embargo nosotras bailabamos entre las tres y reíamos.
Estaban por dar la 1 cuando unos tipos comenzaron a insultarse. Ese ambiente ya no me gustaba.
Así que decidimos retirarnos mejor.
Salíamos del lugar cuando aquellos tipos nos siguieron y junto a ellos salieron varias personas alentandolos a pelear y yo me asusté.
De cierta manera quedamos en medio de ese círculo de pleito.
Diana llamo de inmediato a Harry y yo solo rogaba porque no nos pasará nada malo.
No sé cómo acabamos en ese círculo pero no había manera de salir.
Intentamos empujarlos para hacernos espacio entre tanta gente pero ellos simplemente no se movían, incluso querían que pelearamos también.
Quise gritar de nervios, susto, miedo.
No me gustaba ese tipo de pleitos, Diana en un intento de salir empujó a dos y grito.
Elaine hizo lo mismo y las imite.
Elaine logro salir, pero al salir cayó al suelo.
Grite asustada su nombre pero alcance a ver qué alguien la ayudó a levantarse.
Entonces escuché mi nombre con la voz de el.
Alcé mi rostro y ahí estaba.
No pude evitar dejar caer algunas lágrimas de la emoción y alivio que sentí al verlo.
-¡Meliodas!-
El comenzó a golpear a varios para hacerse paso y así poder llegar a mi.
Empuje a dos más
Pero en cuanto termine de empujarlos me devolvieron el golpe y caí en medio del círculo.
-¡Elizabeth!-
Grito mi amiga castaña
-¡Elizabeth!-
Gritaba ahora mi rubio de ojos esmeralda.
Me puse de pie rápido y él llegó por fin conmigo.
Me abrazó y yo correspondi aliviada
Los dos hombres que peleaban intentaron retar a Meliodas.
El me puso detrás de él y le soltó dos buenos golpes a cada uno.
Yo llevé ambas manos a mi boca del susto.
Meliodas se veía enojado.
Les dió la espalda y me abrazó, todos a nuestro alrededor se asustaron e hicieron espacio para que salieramos de ahí.
Caminábamos lejos de ellos y yo no podía dejar de abrazarlo
Nos detuvimos frente a frente y nuestros labios se unieron sedientos de un gran beso.
-¡Gracias Meliodas! Por favor perdóname, no quería estar así sin ti, tuve miedo, pero tengo más miedo de estar lejos de ti.-
Le decía suplicante entre sus brazos mientras mis lágrimas caían sin cesar.
El no comentó nada, se dedicó a abrazarme y busco nuevamente mis labios para besarlos.
-Te Amo Elizabeth, Te amo. Por favor no vuelvas a hacerme esto. Entiende que tú eres mi vida entera.-
Ahora por fin estaba todo claro, no había ya duda en mi, lo amaba tanto como el a mi.
Seguimos abrazados unos minutos más hasta que recordé que Elaine había caído.
Solté a Meliodas para buscarla con la mirada y la encontré junto a Ban, quien la traía en brazos.
Al llegar hasta nosotros comento que solo había Sido una pequeña raspada.
Los tres se pusieron serios y al unisono dijeron
-¡No vuelvan a venir a este tipo de lugares solas!-
Nosotras con cierta culpa asentimos la cabeza.
De la mano caminamos las 3 de nuestras respectivas parejas alejandonos del lugar.