Después de años huyendo de los recuerdos, Alma vuelve a reencontrarse con Fer, el mejor amigo de su hermano. Alma ya no es la niña alegre y divertida que era antes de lo de Sergio. Fer decidió dejarla ir, para poder seguir adelante. A veces los caminos se cruzan, aunque nos empeñemos en correr en direcciones opuestas y otras veces, necesitamos volver al mismo punto que nos hizo salir huyendo.