Había pasado ya tanto tiempo y mi desesperación por estar junto a el crecía. Tomé una decisión y comienzo a arrepentirme, pero, también creo que fue lo mejor. Bueno la verdad es que siempre tomo decisiones alocadas y luego comienzo a desconfiar de esa decisión. Claro que en esta oportunidad no era como la compra del libro equivocado era algo mucho más grande. Cristal: ¿qué piensas? maldita imbécil - cristal era mi amiga desde secundaria, a veces era algo bruta, pero, siempre estaba para apoyarme - ¿estás pensando bobadas otras vez? Ya te dije que dejes de pensar en ese idiota. Mery: debes comenzar a ser más delicada amiga - cristal me miro en plan me conoces lo suficiente amiga. - No puedo dejar de pensar en el cristal, es tan difícil... - suspire, la verdad es que yo lloraba por casi todo, para cristal era tan normal verme llorar, me había visto llorar 3000 veces con Spirit y el rey león que ya no es nada para ella. Cristal: no llores por favor, amiga, no debes dejar que Eloísa te vea así ¿está bien? - se acercó a mí y me abrazo. - ¿Cuándo fue la última vez que supiste algo de él? - la verdad es que siempre estaba pendiente a sus redes sociales y aun llamaba a su madre, quien siempre estaba dispuesta a contarme como estaba, después de todo aquella mujer me tenía mucho cariño, pues, me conocía desde los 5 años. Mery: ayer, él está aquí cris!...
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