La vida de Olivia estaba destrozada. Su madre murió cuando ella era pequeña, nunca llegó a superar su muerte mientras se resguarda en el cariño de una familia por un padre, un hermano, y una tía que ella adoptó como figura materna, unas amigas que la hacen sonreír de vez en cuando. Pero a una madre no se la olvida nunca, y Olivia no lo ha hecho. Cuando llega una chica que afirma ser su hermana Olivia ve una posibilidad de cambiar, de superar todo aquello que pasó hace mucho tiempo con la ayuda de su alma gemela.