Ardiente,
fugaz,
morí y viví en tus brazos.
Tus ojos quemaron mi piel,
y tu sonrisa capturó mi alma.
Si te lo preguntas,
sí,
se trata de tí,
sí,
te deseo.
Ardiente,
fugaz,
morí y viví en tus brazos.
Tus ojos quemaron mi piel,
y tu sonrisa capturó mi alma.
Si te lo preguntas,
sí,
se trata de tí,
sí,
te deseo.
Una noche es suficiente.
Cuando tres hombres vestidos de negro irrumpen en la única vivienda al final de la colina en una noche helada, Steph sabe que no es nada bueno. Los secretos mejor guardados...