Capítulo 4.

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— ¡Jane!.- apenas la ví y la abrace, para luego besarla lentamente.

— ¿Tanto me extrañaste?.- dijo con una sonrisa después de separarnos.

— ¿Acaso tú no?.- pregunte con un puchero.

— Bastante.- contesto y yo sonreí para volverla a besar.

— No puedo creer que estuvimos lejos tanto tiempo.

— Fueron un par de meses, un poco torturosos.- hizo una mueca.- ¿Y tus idiotas compañeros?.

— Jane.- la regañe y ella rio.- comportate, y solo estaré contigo.

— Execelente.- sorpresivamente me tomo posesivamente de la cintura para besarme.- vámonos de aquí.- dijo jalandome lejos de mi casa yo solo la seguí hasta que llegamos a una casa muy bonita.

— ¿Y esta casa?.- pregunte sorprendida cuando ella abría la casa.

— La alquilé, creo que es necesario tener nuestro espacio.- me dió una dulce sonrisa que me sorprendía.- ¿Te gusta?.

— Me encanta.- lo que no esperaba es que Jane me pegará a la pared apenas entre.- alguien parece desesperada.- dije burlona.- ¿Puedo ver la casa al menos?.

— Te puedo mostrar la mejor parte, nuestra habitación.- dijo con una voz muy sensual sus ojos estaban oscurecidos.

— Me encantaría.- dije correspondiendo el beso hambriento que me dió, sus labios fríos me hacían querer mas, abrí mis labios esperando que metiera su lengua la cual no tardó mucho en colarse, haciendo así el beso más intenso. Entre tropezones me deje guiar por Jane a la habitación, tiento la pared para prender la luz del cuarto.

— Me encantas.- dije entre jadeos y la rubia me sonrió arrogante para comenzar a besar mi cuello sacándome leves gemidos.

— No sabes todas las noches que pensé en tenerte así, totalmente a mi disposición.- sus manos ágilmente me quitaban mi camisa, por mi parte yo me deshacía de su capa.

— Ya me tienes aquí, toca que hagas algo.- sonrió de lado para volverme a besar.

Después de quedar solo en ropa interior, nos di la vuelta quedando yo encima de Jane y ella levanto una ceja. La bese con pasión para comenzar a bajar mis besos a su cuello, en el cual no dude en dejar un par de marcas, cuando llegue a sus pechos.

— Muy bonito pero me estorba.- dije para luego quitar su brassier, traía un conjunto muy lindo negro que hacía resaltar su hermosa piel blanca. Al deshacerme de esa prenda me concentre en morder, besar y chupar sus pechos escuchando sus suaves gemidos, los cuales hacían que me exitara cada vez más.

— Aleex.- gimió mi nombre cuando succione su pezón para luego con sus manos empujar mi cabeza para abajo donde al parecer requería más mi atención, con gusto baje para retirarle la única prenda que le quedaba. Al tenerla totalmente expuesta para mí, no podía describir la sensación de tener a Jane debajo de mi.

Con mis manos acaricio sus piernas desnudas agarrando sus muslos, para dejar besos húmedos en la parte interna de su muslo y una que otra mordida. Los jadeos y gemidos de Jane eran música para mis oídos. Con mi lengua saboreaba su dulce interior mientras la rubia agarraba mi cabello tratando de acercarme más a su entrada, la espalda de Jane se arqueaba por lo que mi lengua hacia en su interior no pasó mucho cuando llegó a su orgasmo. Levanté la vista viendo a la diosa que tenía en mi cama, su rubio cabello desordenado tenía los ojos cerrados pero al sentir mi mirada los abrió dejando ver esos preciosos ojos negros de deseó.

— Me encantas.- dijo sorprendentemente la rubia después de recuperar el aliento.- ahora déjame demostrastelo.- cambio de lugares y ella quedó encima mío.





Amor Compartido// A.C, J.H, E.C, R.HWhere stories live. Discover now