Dulce o Truco |H•S|

20

2 meses después

(...)

___

El olor a las flores de mi ramo estaban inundado la habitación, me veía al espejo, mi maquillaje estaba impecable, el peinado también. Estaba nerviosa y no podía dejar de pensar en Javadd y en... Harry, todo estaba listo y solo faltaba que yo saliera a la ceremonia, estaba en una habitación de la casa de los Malik, la celebración sería en el kiosco del jardín, estaba todo preparado. ¿Era muy tarde para arrepentirse?.

-Hola...-alcé la mirada y vi a Larisa,estaba parada a mis espaldas, ¿qué hacia ella aquí?, Estaba invitada a la celebración claro está, era una Malik pero, no entendí por qué estaba junto a mi, traía un celoso vestido azul y un peinado recogido con adornos, estaba sonriente.

-¿Tu que haces acá?.

-Sabes ____, por tu cara veo el arrepentimiento, pero solo estoy para recordarte que si haces esto podrías hacer muchas cosas solo con el apellido Malik.

-No estoy interesada en ese poder. -fruncí mis labios evitando decir malas palabras, no quiera discutir.

-¿Y si es para destruir al hombre que destruyó tu vida?. - me giré sobre mi asiento tirándole una mirada confundida y molesta.

-Es tu primo y hablas como si no te importara.

-Era solo un...consejo. -le di una mirada de pies a cabeza, me miraba a los ojos, estaba sonriendo aún, tenía una mirada azul muy penetrante y era inevitable verla, un escalofrío recorrió mi cierto haciéndome estremecer poco a poco.

-_____ te está esperando tu padre.

-No cometas una estupidez. -susurró.

La voz de Damie sonaba atrás de la puerta, deje de ver a Larisa, ella caminaba hacia la puerta, salió y me dejó ahí. Suspiré e inhale ondo, me levanté del asiento y caminé hasta la puerta tomando mi ramo, me giré por última vez a verme al espejo desde la puerta, mis manos sudaban, tome con fuerza el ramo y abrí la puerta, ahí estaba Damie, traía una sonrisa y mi madre una felicidad que a mí me hacía falta. Traté de sonreír y caminamos hacia el final del pasillo, ahí estaba mi padre y Dylan, estaban guapísimos, mi padre se ofreció y me acerque a él enganche nuestros brazos y comenzamos a bajar las escaleras, entramos al corredor que daba hacía el jardín y caminamos, me detuve en seco al ver el camino de flores que adornaban el corredor, estaba apunto de unir mi vida a alguien que no amaba, miré a lo lejos a Javadd parado en el altar.

-¿Que sucede?.

Miré a mi padre, empecé a caminar nuevamente, la brisa cálida y el sol caía sobre nosotros, todos se giraron a vernos, había mucha gente, gente que no conocía, solo...aquellos ojos esmeraldas y ese pequeño cuerpo delgado a su lado, sentía la necesidad de llorar al verlos, algo no estaba bien en mí, él me miraba indiferente, como si le diera absolutamente igual que yo estuviera con Javadd, era verdad, él no me amaba. Comencé a caminar lentamente sobre el camino, llegué al altar y pude ver a Javadd sonriéndome, me tomo de ambas manos y las beso.

-Hola linda. -me susurró, solo pude sonreír.

Nos giramos en el altar y el juez empezó a dar la ceremonia, estaba sudando y sentía que el vestido estaba muy ajustado, no podía respirar y trataba de hacerlo, me giré despacio a ver hacía mis espaldas, y ahí estaba ella, susurrandome algo que a él le causaba gracia, sentí un punzada en el pecho, Damie me vio desde mi costado confundida, era mi única dama de honor.

-Si alguien tiene algo que decir el por cual está boda no deba ser realizada que hable ahora o calle para siempre.

Me giré una vez más, todos estaban en silencio viéndonos, nadie movía un dedo, una mirada de odio y burla me lanzaba Olga, no parecía la mujer dulce del retrato que estaba en la casa Styles. "Puedes besar a la novia", la ceremonia se había pasado demasiado rápido. Javadd se levantó y me ofreció su mano, yo seguía incada, tome su mano y me incorporé a su lado, tomo ambas manos y se acercó a mí, deje de respirar, sentí sus labios sobre los míos, tenía ganas de vomitar, y no por él por qué realmente olía riquísimo y estaba demasiado guapo, pero...sentía como si lo que hacía era algo de lo que me arrepentiría.