Después del accidente aéreo, las integrantes de Twice fueron trasladadas a un hotel cercano mientras las autoridades investigaban las causas del choque. Afortunadamente, el hotel tenía la capacidad de proporcionarles una habitación individual a cada una de las chicas, lo que les permitió tener su propio espacio para procesar lo sucedido y recuperarse del trauma.

Aunque normalmente los hoteles no suelen tener habitaciones con tantas camas, la situación excepcional y la urgencia de la situación llevaron al personal del hotel a encontrar una solución rápida para alojar a las integrantes de Twice de la manera más cómoda posible. Aunque no había una habitación con nueve camas disponibles, el personal se esforzó por asignar habitaciones contiguas y garantizar la seguridad y comodidad de las chicas.

A pesar de estar separadas físicamente en sus habitaciones individuales, las integrantes de Twice encontraron consuelo en el hecho de que estaban juntas en el mismo lugar y se apoyaron mutuamente a través de llamadas telefónicas, mensajes de texto y visitas frecuentes entre habitaciones. Esta experiencia fortaleció aún más su vínculo como grupo y las hizo valorar aún más la importancia de estar juntas en momentos difíciles.


Momo se estremeció levemente mientras se acomodaba en su cama, sintiendo una extraña sensación que no podía sacudirse de encima. Aunque intentó ignorarla, la sensación persistió en su mente inquieta.

Mientras tanto, en las habitaciones contiguas, Sana y Chaeyoung estaban inmersas en sus propias actividades. Sana, con su teléfono en mano, buscaba meticulosamente videos de repostería mientras planeaba el pastel perfecto para el próximo cumpleaños de Chaeyoung. Sabía que a su amiga le encantaban los pasteles de fresa, así que estaba decidida a hacer uno espectacular para celebrar su día especial.

Chaeyoung, por su parte, disfrutaba de un tentempié nocturno de fresas frescas, deleitándose con su sabor jugoso y refrescante. No podía evitar sonreír al imaginar el delicioso pastel que Sana estaba planeando para su cumpleaños.

Sin embargo, mientras tanto, Momo no podía sacudirse la sensación de inquietud que la acosaba. Decidió levantarse de la cama y dar un paseo por el pasillo del hotel, esperando encontrar algo que pudiera calmar sus nervios.

EL SILBIDO DE LA MUERTE (Parte 1 TWICE)Where stories live. Discover now