>capítulo cuatro.

164K 4.3K 540
                                    

- Entonces... ¿estamos listos ya? – preguntó Zayn.

- Yo sí – respondió Perrie.

- Y yo, también – contestó Waliyha.

- Perfecto – sonrió Zayn a sus dos chicas favoritas.

A veces, se sentía culpable por pasar demasiado tiempo con ella y en pocas palabras dejar a un lado a sus otras hermanas. Pero Saafa era pequeña, como para compartir tantos gustos como lo hacía con Waliyha, y Doniya siempre estaba ocupada, con sus amigas o con su novio. Y pensando en eso, se puso a pensar en que todavía no conocía al desgraciado.

- ¿Quieres que te vaya a dejar a casa? – preguntó, mirando a Perrie.

- Sí – le contestó ella.

- Pensé que pasarías a cenar con nosotros... - dijo Waliyha desde la parte de atrás.

- Pero ya pasé la comida con ustedes – contestó Perrie mirando al frente – no quiero incomodar más.

- Por dios Perrie – exclamó – no incomodas en nada.

- Aparte – la interrumpió – Jade me pidió que llegara temprano.

- O sea, prefieres pasar tiempo con tu amiga, que con tu novio – intervino Zayn, tratando de sonar dolido.

- Ay – exclamó Perrie – dejen el drama. Simplemente no puedo.

- Está bien – susurró Waliyha - ¿nos vemos mañana?

- ¿Quieres que pase por ti? – preguntó Perrie.

- ¡Si!

- Está bien.

Una vez terminado su pequeño debate, tomaron camino hacia casa de Perrie, hablando de trivialidades, cosas raras, y un sinfín de cosas sin sentido. Cuando llegaron a casa de ella, las luces estaban encendidas lo cual significaba que Jade estaba dentro. Perrie y Zayn se despidieron cariñosamente, como a diario lo hacían, o cuando ambos podían verse.

Después, Zayn entró al auto.

- ¿A casa?

- No – sonrió Waliyha de oreja a oreja.

- ¿Ahora a dónde quieres ir?

- ¿Qué dices si... vamos por un helado?

- Está bien, me parce perfecto. Pero de ahí, nos regresamos a casa. Te tengo una sorpresa.

- ¿Cuál? – preguntó emocionada.

- Si pudiera decírtelo así porque sí, no sería sorpresa.

- Tienes razón – bufó – bueno, vamos a la heladería y de ahí nos vamos a casa.

- Ya estas.

Llegaron a la heladería, y Waliyha tuvo que bajarse sola. ¿Cómo haría para comprar los dos conos de helados y salir con vida de ahí?

Bajó y sintió una mirada, era una niña que tenía en frente de ella, en la fila. La niña la miraba tímidamente.

- ¿E-e-res Waliyha?

La cara de Waliyha brilló, si que le emocionaba que la reconocieran.

- Sí – le sonrió.

- Hola –fue lo único que la niña pudo articular.

- Hola – le regresó el saludo – lindos zapatos – Waliyha miró al suelo y los señaló.

Has llegado al final de las partes publicadas.

⏰ Última actualización: Dec 23, 2020 ⏰

¡Añade esta historia a tu biblioteca para recibir notificaciones sobre nuevas partes!

La chica que rompió Zerrie.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora