Parte 6

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Nuestras conversaciones se hacían dulces cuentos utópicos como escritos por Julio Verne, otras parecían alguna novela realista y mágica como las de García Márquez, cada vez, se hacían más y más profundas las palabras, aun en ese momento no era consciente de lo feliz que era. Supuse que estaba haciendo lo correcto, bajo mi obligación, un interés puramente influenciado por la necesidad de satisfacer mi arrogancia o eso pensaba y estaba errado. La capacidad de adaptación esta dictada bajo la necesidad de supervivencia, de ser cierto esto, provocar al destino por una lección es más fácil que aprenderla.

Una vez, pasados unos meses, me acerquepresuntuosamente a ella, pulsando con mi presencia su mente, acribillando esasustancia extraña en su imaginación, desfigurando la noción de bondad que podíarecorrer por parte alguna de mí, le hice ver cómo puede actuar alguien que sabeenamorar y nunca se enamora, le hice ver cuán malo podía ser, y no sé porque lohice, supongo que sabía que así, probablemente no quisiera acercarse más a mí,y yo, de esta manera me liberaría de esa incómoda presión que me estaba persiguiendo.Quizás fue la sensación de seguridad que ella me brindaba o la diferenciainconsistente que ella tenía a mis otros ligues, de alguna forma logro llegar adonde nadie más me había acariciado antes, sus ojos esta vez, latían en otroidioma, corrigieron mis estupidez, pues no pude ver más allá que mi propioerror. Tuve un destello del futuro, miedo, y tome una decisión que aún meacongoja y mortifica, pensé que solo estaba confundido, basta con enamorarsedel mundo y odiarlo, para así, olvidar sensación alguna de amor.    

LA NATURALEZA DE LOS SUEÑOSTahanan ng mga kuwento. Tumuklas ngayon