La lista de Ana Paula

David (Parte I)

Se hacía tarde y el autobús no pasaba. Quedó en verse con David a las tres, y temía llegar un solo minuto después. Había escuchado que los americanos eran muy puntuales, y lo suficientemente delicados como para molestarse por diez minutos de retraso.

Ana Paula: Llegaré 10 minutos tarde.

Le escribió por Snapchat, ya que solían usar esa aplicación para hablar, ¿pero por qué la había agregado a Snapchat?, ¿acaso no era más fácil sostener una conversación por Facebook Messenger, o Whatsapp? Oh, cierto, los gringos no usaban Whatsapp.

El autobús había llegado. Haría diez minutos hasta la parada y otros diez para llegar al sitio donde se vería con David. Frente a Subway.

David: Ok.

''Ya está molesto y aún ni nos hemos visto'' pensó ella.

Ana Paula se bajó del autobús y empezó a dar pasos apresurados. Cada treinta segundos observaba la hora en su teléfono, temiendo a llegar incluso más tarde. Era pleno verano, en la ciudad de Orlando, Florida y aunque aquel no era el día más caluroso el clima estaba lo suficientemente bochornoso como para sacarle gotas de sudor.

''Ya estoy toda sudada, ¿qué va a pensar de mí? Ni siquiera puedo controlar mi respiración '' Maggie estaba jadeando, entre los nervios y el apuro se veía bastante nerviosa. ¿Debía escribirle o era mejor tomarse unos minutos más para recuperar la compostura? No, si se tomaba otros minutos entonces se retrasaría más, y quedaría como una impuntual. Entró al subway y no vio a nadie. Salió y tampoco. ¡Cielos, su respiración seguía agitada! Iba a dar una mala impresión, seguro que sí.

A David lo había conocido por Tinder. Tenía treinta años, en sus fotos no lucía muy apuesto, pero en su descripción decía que era ''Boricua y español'' por lo que Maggie supuso que hablaba español, pero no, no lo hacía. Eso tornaba la situación más incómoda aún.

¿Y Damian?, ¿qué pensaría Damian si llegaba a enterarse de que se había reunido con otro chico? Damian y Ana Paula llevaban un mes y medio escribiéndose. Él le había mandado una solicitud de amistad en Facebook, supo de ella por su amiga Valentina. Desde el momento en que la agregó empezaron a hablar. Todos los días, a todas horas. Eran charlas muy divertidas y parecía que nunca se acababan los temas de conversación. Sonreía todo el tiempo mientras le escribía, o cuando releía los chats. Ana Paula estaba segura de que eran tal para cual, que apenas llegara a México se verían y luego de un tiempo iniciarían una relación. Damian era una persona madura, responsable y seria. Además de honesto y tierno. Él ya le había dicho las intenciones que tenía con ella: que le gustaba mucho, que le gustaba para una relación; cosa que la hizo sentir bastante emocionada. A sus veinte años nunca había tenido novio, y tampoco había estado cerca de iniciar un noviazgo. Se visualizada ejerciendo un rol de novia atenta, dulce, honesta y madura; sosteniendo una relación duradera, viajando a todas partes del mundo con su pareja, comprometiéndose...

Sacó el teléfono de su bolsillo y escribió un mensaje.

Ana Paula: Ya estoy aquí.

Inmediatamente David respondió.

David: Sí, en seguida llego. Ya te estoy viendo.

Empezó a mirar de un lado a otro muy nerviosa, pero no veía a nadie. ¡Era terrible! No sabía cómo actuar, se sentía observada. Estada sudada, su corazón no dejaba de latir y le era imposible hacer que su respiración pareciera normal.

Entonces llegó y la saludó, con una sonrisa y un apretón de manos. David medía un metro ochenta aproximadamente. Era moreno, de contextura delgada pero esbelta y con un cuerpo levemente tonificado. Ana Paula estaba sorprendida, David era mucho más atractivo en persona y su forma de vestir era elegante. Llevaba consigo un pantalón gris, no supo identificar el tipo de tela pero parecía un pantalón de buena calidad. También vestía una camisa blanca y un saco azul marino, juvenil y moderno. Era la primera vez que salía con un tipo tan apuesto, y el hecho de que fuera diez años mayor a ella lo hacía más sensual y provocativo.