Ryan...
Sigo sin saber nada de ti, ni siquiera cómo estás. Siento que me estoy volviendo loco. No recuerdo la última vez que nos vimos. Cuando duermo vienen recuerdos sobre esa última vez, no cobran sentido y solo terminan siendo una pesadilla.
En verdad te necesito.
Hoy vi unos lirios afuera, es la primera vez que me dejan ir al jardín desde que estoy aquí, ellos son muy estrictos; esos lirios me recordaron a ti.
Cada tarde que regresaba a casa siempre te llevaba unos lirios, tu decías que estaba loco y siempre preguntabas de donde los sacaba, perdón por nunca decirte la verdad sobre los lirios, la verdad es que los compraba en el puesto del centro, junto a la estación de servicio.
Bueno... lo hacía, por que no si aún recuerdes cuando te dije que ya no podía llevarte más lirios. Nunca te dije el por que.
El señor López, el que me los vendía, llamó a la policía e hizo una orden de restricción hacia mi, le dijo a la policía que yo era violento con el y que lo había herido con navaja varías veces, incluso dijo que yo le había dicho que si no me daba lirios iría a su casa a matarlo lentamente, ¿puedes creerlo?
Solo lo hizo por que ya no quería venderme lirios.
Lo peor es que meses después, cuando tu no estabas en casa llego la policía a interrogarme por su muerte, bueno asesinato, pero yo nunca lo hice.
Perdón por decírtelo ahora.
Enserio necesito que vuelvas. Te amo mucho y te extraño mas Ryan. Ya no se que hacer.
Brendon.
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