EPÍLOGO

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Mis manos sudaban a mares mientras los nombres seguían pasando, mi corazón comenzó a latir con fuerza y por un leve segundo se detuvo cuando escuché mi nombre

-Clifford Jeannette- me puse de pie mientras los aplausos se hacían presentes, sonreí sin poder evitarlo mientras caminaba por el anfiteatro hacia donde me esperaba finalmente mi título. Al llegar estreché las manos de los maestros y el rector fue quién me lo entregó- felicidades señorita Annette, confío en que será una persona con un excelente futuro

-Se lo agradezco- tomé mi título y sentí cómo un gran peso se quitó de mi espalda.

Comencé a caminar de vuelta a mi lugar, no sin antes girar mi mirada hacia donde estaba mi familia. Michael, Crystal, Mamá y papá, Hanna y Derek. Todos aplaudiendo y tomando videos y fotos

-La ayudo a bajar señorita- me giré hacia la persona que me lo dijo y no pude evitar chillar de emoción. Él me miraba con ese peculiar brillo en sus ojos y cuando tomé su mano él me atrajo hacia él y me sostuvo en el aire en un abrazo haciéndome soltar una risa- felicidades Annie- susurró contra mi cuello

-Llegas tarde- dije mientras me ponía de nuevo en el suelo, él se encogió de hombros y me apuntó con la cabeza hacia donde se supone debía regresar

-Te contaré por qué sucedió después de que arrojes ese grillete- alcé una ceja antes de asentir y comenzar a caminar nuevamente hacia mi lugar

La ceremonia siguió, el rector siguió dando un gran discurso en el que varios derramaron lágrimas por los compañeros que ya no verían mientras que otros lloraban porque finalmente tanto esfuerzo había valido la pena.

-Jovenes, recuerden que nadie debe hacerlos quitar el dedo del renglón. Qué nadie les diga que no pueden lograr sus objetivos, el límite es el que ustedes mismos se pongan y solo ustedes son dueños de sus vidas así como de su destino- el rector nos sonrió- ahora, a la cuenta de tres todos arrojaremos nuestros grilletes diciendo adiós a la vida estudiantil y diciendo hola a una nueva etapa en nuestras vidas- tomé del grillete en mi cabeza como todos y sonreí con emoción- uno... Dos... ¡Tres!

Solté un grito mientras lo arrojaba hacia arriba sintiendo la emoción llenar mi cuerpo. Todos los invitados comenzaron a aplaudir y fue así como todos comenzaron a abrazarse y a ir con sus familiares. Yo corrí hacia la mía sosteniendo en alto mi título

-¡Lo hice!- Mi mamá y mi papá fueron los primeros en recibirme con emoción y fue entonces cuando ya no pude evitar que las lágrimas salieran de mis ojos

-Estamos orgullosos de ti preciosa- dijo mi papá con lágrimas en sus ojos, pasó su pulgar para limpiar el rastro de estas y mi mamá me atrajo para depositar un beso en mi mejilla

-Hermana- Michael se abrió paso junto con Crystal y los niños para abrazarme

-Felicidades Jeanny- dijo Crystal, Hanna se abrazó a mi pierna y yo me agaché para poder cargarla. Derek me estiró también sus brazos y lo cargué con un poco de esfuerzo- basta niños, no puede cargarlos a los dos a la vez

-Sigo yo- Calum llegó y tomó de mi cintura justo cuando dejaba a los niños en el piso. Me giré hacia él y me atrajo nuevamente en un abrazo

-Dijiste que me dirías la razón de que llegaras tarde- asintió, rebuscó en su pantalón y me miró con una media sonrisa antes de tomar mi mano y dejarlo en la palma de esta- ¿Un labial?- arrugue mi nariz

-Miralo bien- dijo suavemente. Miré el labial y no pude evitar sonreír cuando pude reconocerlo- me dijiste que con eso te recordaría, no lo he perdido en dos años... Bueno, uno porque el primero no cuenta- soltó una risa nerviosa y yo pasé las yemas de mis dedos por el labial que me acompañó durante gran parte de mi historia con él

-Demonios, creí que ibas a pedirle matrimonio

Sentí que mis mejillas ardieron ante el comentario de Michael, Crystal lo reprendió y Calum pasó su mano por la mía justo donde descansaba mi anillo de promesa. Los policías lo habían encontrado en la ropa de Daiana cuando hicieron las investigaciones, me lo regresaron cuando comprobaron que era de mi propiedad.

-No hagas presiones- dijo mi mamá hacia él- ellos lo harán cuando estén listos- me aferré al labial y miré la unión de su mano con la mía

-Si- dije, volteé a mirarlo y él me regresó la mirada- cuando estemos listos, ojos de ángel

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Labios rojos (CTH)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora