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No habían pasado ni dos horas desde que conteste esa llamada.
Al entrar Liam entra conmigo,algo caballeroso de su parte.
Logro ver a Karen angustiada en una silla, su rostro refleja el dolor diario, acostumbrada a la rutina e intentando ser buena madre.
Liam hizo clic con Karen, lo cual nos distrajo de toda esta situación.
Una voz a lo lejos.
Holly- Volví.
Inmediatamente corro abrazarla.
Karen habla con el doctor, mientras yo y Liam nos quedamos con Holly.
Holly- Debo admitir que estoy impactada.
Voltea a ver a Liam.
Ambos nos reímos a su absurdo comentario.
Holly- Tarados.
Liam- Y bueno, se quedan aquí, apenas es la mitad del día.
- ¡No estás viendo su condición!
Bufo
Holly- Al diablo largue monos de este manicomio.
Impactada, impactada de verla tan libre, Karen nos matará.

Ya en el parqueo, Liam nos venda los ojos y dice que es sorpresa.
Pues esa sorpresa se está tornando en un clima casi helado y con antojos de malvadiscos y chocolates.
Liam- Taraaan.
Nos quita las vendas.
Me quedo maravillada observando, era un mirador con una vista irreal, pinos, rosas, nubes perfectas, olor a ciprés de los inmensos árboles.
Holly- Vaya, esto si que es vida.
Su rostro se ilumina.
Holly- De tanto me e perdido todos estos años por culpa de toda esta mierda.
La enjacho.
Liam- Digamos que les leí la mente.
Se va al coche y saca un termo con chocolate más malvadiscos.
- En que momento¿Como?
Holly- Shhh que las brujas nos escuchan.
- Ya nos estas escuchando.
Holly- ¡Oye!
Liam- Yo no e dicho nada.
Nos fulmina con la mirada.
Nos sentamos en el techo de su auto a contemplar todo nuestro alrededor.

En la tarde noche hicimos una fogata, por suerte andaba mi abrigo, la vieja confiable, ya me imaginaba con hipotermia.
- Creo que es momento de irnos.
Holly-¡No seas aguafiestas!
Liam- Sii.
Unas gotitas de agua empiezan a caer. Liam no encontraba las llaves de su coche, una eternidad después nos marchamos.
Fui la primera en llegar a casa, por suerte, ya que no quiero estar presente en el sermón que le darán a Holly Polly.

*Sonido de carro marchandose*
Esta vez estaba oscuro, no habían señales de vida.
Suspiro y entro.
La luz de la cocina encendida escucho risas, me aproximó.
- Mm mamá.
Alzo la mirada y dos hombres junto a una mujer están presentes. Muy elegantes por cierto.
Cindy- Oh cielo, ellos son unos amigos.
Las miradas se clavan en mi.
Veo que estaban jugando al poker junto a enormes fajas de billetes.
¡Cielo Santo!
Mi disimulo no fue para nada lo esperado y la vibra se tensó.
Cindy - Mejor por que no vas y te tomas una ducha.
Asiento.
Estando en el cuarto me cambio y me tumbo sobre la cama, pensativa.

11:30pm
Ma llega al cuarto.
Cindy- ¿Que tal tu día?
Acaricia mi cabello.
Quería hablarle de sientos de cosas pero no me sale.
- Bien.
Me limito a eso.
Cierra la puerta, mi modo cortante se hizo presente.
Mi sumergo en mi mundo de lectura cuando...
SUENAN PIEDRITAS
Me asomo al balcón y es Liam.
¡Que carajo!
Me cambió de pijama y abrí.
-¿Que quieres?
Susurro.
Liam- Alistate.
- Me perdí o acaso no salimos hace un rato.
Liam- Bueno, entonces resuelvelo con tu amiga el por qué me dijo que si aceptarías.
De repente alguien sale del arbusto, Holly con sus pecas notorias a pesar de la oscuridad.
Me sonríe con cara de perrito inocente.
- Aguarden.
Mi visto lo más cómoda y a la vez de decente.
Bajo cómo espía.
Holly- Esa es mi chica.
Grita.
- Callate.
Hago señas de que no estoy sola.
- Y, cuál es es motivo por el que moriré esta noche.
Liam- Solo confía en mí.
Valla compasión.
Me sentía como en una película de Freddy Krugger.

******

Llegamos a un edificio abandonado, esto ya no me suena bien. Veo luz adentro y en ese momento sale un grupo de chicas chillando a carcajadas.
Liam nos abre paso y prosigue, al entrar varias personas se le acercan, en su gran mayoría hombres. No se con exactitud donde estaremos pero hay un tremenda bulla.
Pasamos unas cortinas y por fin vi un ring y personas elegantes sentadas viendo como dos imbéciles se pelean.
Holly- Valla ambiente pacificador.
Le da unas palmaditas en el hombro.
Liam- ¿Y?
Liam- ¿Qué te parece?
- No lo sé.
Liam- Bue...
En dicho momento los tipos corpulentos se lo llevan, prosiguiente por un micrófono dicen su nombre.
Quedó boquiabierta, no lo podía creer. El tumulto se levanta haciendo porras, al parecer es muy querido.

HollyDonde viven las historias. Descúbrelo ahora