Desde que te vi, Kirito y Asuna. Parte 1

Capítulo 142

Kirito

Mientras buscaba en mi ordenador ideas para pedirle a mi novia que se casara conmigo, recordé una conversación que mantuve con Keiji.

Flashback

Desde que empecé a ir a rehabilitación, decidí pedirle un poco de ayuda extra a Keiji, aproveché un día que vino de visita durante la primera semana que estaba con el tratamiento, él accedió. Quería que me ayudara con mi rehabilitación por lo que los días que Asuna tenía guardia, venía él por la tarde y me hacía ejercicios extra y, cuando mi novia no tenía guardia, venía a mi hogar después de mi rehabilitación en el hospital y continuaba con ello.

- ¿Puedo preguntarte por qué te esfuerzas tanto? - me cuestionó durante una de las sesiones de ejercicios clandestinas - y, además, a las espaldas de Asuna.

- Quiero poder bailar un rato con ella el día de tu boda - respondí - y también quiero pedirle que se case conmigo pronto. Me gustaría, si se puede, que pusieras su canción favorita en tu boda para bailarla con ella. Pero que no digan nada de que nos llamen para bailar o algo por el estilo, es una sorpresa.

- ¿Se lo pedirás en mi boda? - preguntó emocionado.

- No - negué con la cabeza - lo haré más adelante, cuando mis piernas puedan aguantar por sí mismas horas y no segundos.

- Entonces la mejor rehabilitación es andar cada día un poco más - sonrió - probemos hoy a que andes del sofá grande al de lectura, mañana del grande a la estantería y así continuamente. Llegará un momento en que puedas llegar a la puerta del baño o de la habitación por ti mismo.

Desde que comenzamos la rehabilitación hasta el día de la boda de Keiji, lo máximo que aguantaba de pie y caminando eran dos minutos y medio, suficiente para bailar un poco con el amor de mi vida, aunque no podía evitar que me molestara pues había sido casi un mes y medio de rehabilitación extra para conseguir dos minutos y medio. Después, cuando volvió de la luna de miel, seguimos con la rehabilitación, aunque él no se había incorporado al trabajo, siguió ayudándome pues quería pedirle pronto a Asuna que se casara conmigo. Muchas veces nos hacía compañía Nojiko y servía de límite al que tenía que ir.

Debido a que había llegado al objetivo que me había propuesto, decidí comenzar a buscar ideas para pedirle matrimonio a Asuna.

- Si haces las cosas igual - me dijo Keiji - puedes aguantar fácilmente un doce horas y un poquito caminando por ti mismo pero, claro, no todo el día, sino que puedes caminar un rato, paras y así - asentí - espero que no cometas ninguna locura.

- Tranquilo - sonreí - ¿podríamos hacer rehabilitación de ponerme de rodillas? - el hombre asintió y lo hicimos, aunque me levantaba un poco torpemente, lo podía hacer.

- Bueno, pues más o menos ya lo tienes - me animó - mucha suerte.

- Gracias Keiji - lo abracé - nos vemos en el hospital cuando vuelvas.

Fin del flashback.

La boda de Keiji me sirvió para darme cuenta que no quería esperar más para pedirle a Asuna matrimonio y, también, para buscar ideas de cómo proponérselo. A pesar de que yo lo hubiera hecho el mismo día que desperté, mi madre me aconsejó esperar pues estaba todo reciente para ella y podía afectar a nuestra relación ya que Asuna podría decir que no por lo que, por primera vez en mucho tiempo, hice caso de los consejos de mi madre. Sin embargo, todo cambió al ver la cara que tenía mi novia durante la boda de su compañero me hizo ver que había llegado el momento de dar el paso, lo terminó por confirmar la cara que puso cuando el día de nuestro aniversario hice la reserva a nombre de los "señores Kirigaya" pues quería ver la reacción de mi novia para saber si estaba preparada para convertirse en la señora Kirigaya,algo que su sonrisa me confirmó.