⚫Una vida contigo⚫|Mario Bautista| (Corrigiendo)

¿Esto es el adiós?

Narra ____:

Después de quince minutos de viaje, llegamos al aeropuerto, Mario bajo rápidamente para abrir mi puerta, bajamos algunas maletas que estaban en mi auto. Buscamos a sus padres, lo que no nos costó mucho tiempo, cada segundo que pasaba era uno más cerca a nuestra despedida.

-¿Esto es el final de nuestra amistad?.- Mario preguntó en un susurro tomándome desprevenida mientras caminábamos, esas palabras dolieron, esto no debía acabar aquí

- ¿Que estas diciendo? Mario eso es absurdo, la distancia jamás podrá separarnos, nada ni nadie, hemos pasado muchas cosas buenas y malas y siempre seguimos juntos, se que esto es lo mas difícil que hemos pasado pero vamos a seguir juntos.- Le asegure para tranquilizarlo y en cierta parte también quería que mis palabras me dieran seguridad a mi

- A pesar de todo siempre vamos a estar juntos.- me dijo recordando nuestra promesa

Asentí con la cabeza y también respondí.- Siempre juntos.

Sentí mil emociones combinarse en mi cuerpo al mismo tiempo, no tardó mucho para que mis lagrimas empezaran a aparecer y en un abrir y cerrar de ojos ya estaba en los brazos de Mario, me sentía devastada pero tenia que evitar que Mario notara lo mal que me sentía, no quería hacerlo sentir mas mal de lo que ya se sentía, tenía que estar fuerte para el, así que me separe y le regale una sonrisa, el me la respondió, nos volvimos a abrazar por ultima vez, ambos queríamos disfrutar nuestros últimos momentos juntos, nuestro ultimo abrazo dentro de mucho tiempo. Esto dolía más de lo que creía

Narra Mario:

Estaba mal, totalmente destrozado, no quería separarme de ella, quiera a mi mejor amiga toda la vida, la queria junto a mi, no la volvería a ver dentro de mucho y aunque se que tendríamos contacto por otros medios como habíamos quedado, en cierta forma era reconfortante pero no era lo mismo que tenerla a centímetros, no poder sentir su calor, no poder presenciar su aroma que tanto me gustaba, no escuchar las mil tonterías que salían de su boca, no estar con ella.

Me encontraba en sus brazos, el abrazo mas cálido y al mismo tiempo el mas triste que nos habíamos dado, unos minutos después de estar abrazados sentí una mano tocando mi hombro acompañado con una voz. Era mi mamá.

- Lamento interrumpir, pero Mario el avión esta a punto de despegar, tenemos que abordarlo ya.- Dijo mamá con una voz amable tratando de calmar la situación

Me separe de ella lentamente y nos despedimos una vez más, mire sus ojos, estaba devastada, fue ahí cuando me di cuenta lo mucho que le dolía perderme y lo mucho que la iba a extrañar, bese su frente mientras lágrimas corrían por mis mejillas, soltamos nuestras manos que minutos antes estaban entrelazadas, lentamente me aleje de ella

- Adiós. - susurro, no pude contestar, no tenía el valor de decir lo mismo

Narra ____:

¿Enserio lo iba a dejar ir? Quería ir tras el, abrazarlo de nuevo y jamás soltarlo, pero ya era demasiado tarde, el ya se había ido, mi mejor amigo, mi hermano, ya no estaba. Lentamente me aléje de ese lugar, subí a mi auto y di una vuelta por la ciudad, quería despejar mi mente de aquel momento en el que lo deje ir.

Unos momentos más tarde llegue a un pequeño bosque cerca de la ciudad, era bastante lindo y nostálgico, tanto que apenas llegue y me derrumbe al instante, toda la situación había sido tan rápida. Hace unos minutos estaba con él y ahora simplemente ya no y no volvería

Unas horas mas tarde oí mi celular sonar, me había quedado dormida en aquel lugar, apenas y logre reaccionar para contestar

-¿Bueno? ¿Quien habla?.- dije bostezando y estirándome en el pequeño espacio que había en mi auto

- Hola bonita. -Aquella voz me hizo estremecer, me sentí muy bien al oírla a pesar de que solo habían sido unas horas que lo vi

- ¿Mario? ¿Ya llegaste? ¿Como estas? ¿Que tal el viaje?.- Lo ataque con preguntas y tratando de hacer una voz mas calmada y normal, no quería que supiera que estuve todo el día lamentándome

-Tranquila todo esta bien, fue un vuelo tranquilo, llegamos al departamento que papá compró y realmente es muy lindo, solo que no es lo mismo que México, no quiero estar aquí.- admitió y sabía que seguía triste

-Yo no quiero que estés allá, te acabas de ir y ya te extraño.

- ____ casi no te oigo, se oye tu voz muy cortada, ¿En donde estas?.- Preguntó un poco confundido y yo traté de pensar en algo normal para decirle

- Bueno es que estoy en un lugar con muy poca señal, ¿Que te parece si te llamo un poco mas tarde?. - Le respondí con la voz mas clara posible para que pudiera oírme claramente.

- Esta bien espero tu llamada, te quiero muchísimo.

- Yo a ti.- Le colgué.

Encendí mi auto y me dirigí a casa, que a fin de cuentas ya no podía llamarle así, no sin los Bautista a un lado 

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