Naruto: las dos perspectivas

Capítulo 164: Mundo de fantasía

Katsumi y Neji caminaban por un camino de tierra rodeado por una zona boscosa, en el País del Fuego. Ambos acababan de comer en un restaurante de un pequeño pueblo y ahora, estaban regresando a la mansión de Intai. Ambos charlaban de manera muy amena de temas intrascendentes, simplemente reían. Luego de caminar por un largo rato, ambos ya estaban solo a unos 100 metros de la mansión de Intai. En ese momento, Katsumi dejó de caminar, y Neji algo extrañado hizo lo mismo.

-¿Qué ocurre?- preguntó Neji.

-Creo...creo que debemos hablar sobre lo que pasó hace 2 días, ya sabes...- dijo Katsumi, ya sin sonrojos al mencionar el tema; estaba lista para hablar de eso. Neji en cambio, se puso algo rojo, aquello lo tomó totalmente por sorpresa. Neji empezó a intentar hablar, pero no le salía ninguna palabra ni mucho menos una frase razonable.

-Los dos sabemos lo que iba a pasar, ambos, no deberíamos avergonzarnos- dijo Katsumi. Neji seguía algo sonrojado, aún sin poder hablar; aquello le daba bastante vergüenza. Katsumi notó la vergüenza del Hyūga y tomó totalmente la iniciativa, tomando las manos de Neji. Esto no hizo sino enrojecer más a Neji. Neji y Katsumi se miraron a los ojos unos segundos, sin hablar, en esos segundos, el sonrojo de Neji disminuyó. Ambos cerraron sus ojos y cómo hace dos días, volvieron a acercar sus cabezas, aunque nuevamente, aquel momento volvió a cortarse bruscamente. Un kunai voló entre las cabezas de ambos, tomando totalmente por sorpresa a los dos; ninguno estaba atento al entorno. Aquel kunai pasó de largo y cayó en un arbusto. Neji y Katsumi se separaron y voltearon a ese arbusto, viendo a un perro salir fuera del arbusto, sin daños. El perro no era un perro común, a simplemente se veía por su ropa azul y su Hitai Ate de Konoha que era uno de los perros ninja de Kakashi. El perro empezó a saltar a toda velocidad, alejándose de aquel lugar.

-Mierda, fallé- escucharon Neji y Katsumi. Ambos voltearon hacia el lugar de dónde vino esa voz, el mismo lugar de donde vino el kunai. Katsumi abrió sus ojos sorprendida al ver a aquella persona, mientras Neji lo miró con seriedad, no sabía quién era pero estaba listo para cualquier batalla, aquella persona no era nadie más ni nadie menos que Naruto Uzumaki.

-Na...Naruto...- tartamudeó Katsumi.

-¿Quién es él?- preguntó Neji, notando que Katsumi sabía quien era la persona frente a ellos.

-Él es mi hermano- contestó Katsumi, sin quitar su vista del Uzumaki. Neji miró con sorpresa a Naruto tras saber aquello; Katsumi le había contado su historia, pero no esperaba cruzárselo, al menos no ahí. Naruto continuó caminando por el camino, Neji se puso alerta, pero Naruto no tomó ninguna pose de batalla, parecía que o no quería luchar, o no tomaba en serio a Neji. El Uzumaki frenó delante de Neji y Katsumi, a solo centímetros de ellos. Naruto luego de unos dos segundos parados volvió a caminar, pasando entre ambos, aunque, antes de que avanzara, Katsumi tomó su brazo impidiéndole el paso.

-No creas que volveré a dejarte escapar- dijo Katsumi, ahora muy seria. Naruto suspiró y giró su cabeza, para mirar a Katsumi.

-¿Cuándo vas a dejarme en paz?- preguntó Naruto, con un tono de voz que denotaba pereza.

-Cuando regreses a casa y olvides tu estúpida venganza- respondió Katsumi.

-En otras palabras; nunca me dejarás en paz- dijo Naruto.

-¿Qué haces aquí?- preguntó Neji dirigiéndose a Naruto, interviniendo en aquella conversación.

-Vengo por mis 40.000.000 de ryōs- contestó Naruto de manera ambigua, aunque ambos ninjas de Konoha lo entendieron a la perfección; venía por Intai.

-No sé porqué...pero tenía la sensación de que tú tenías algo que ver con esto, solo alguien cómo tú puede asesinar a tantos ninjas fuertes sin dejar rastro- dijo Katsumi.