Never Mind

One

-No-.

La sonrisa cuadrada que caracterizaba al pelirrojo se borró de su cara en un milisegundo, bufo por tercera vez, no entendía por qué su amigo se negaba a salir con él cuándo tan solo su objetivo era que ambos pudieran despejarse de las tediosas semanas llenas de estrés que tuvieron.

Era consiente del cansancio que cargaba su amigo y que lo único que mantenía en mente Jimin era descansar, pero solo quería que se divirtiera un rato ya que sabe lo estricto que es su pequeño amigo con respecto al baile, tanto así que tuvo que estar el mismo al pendiente para que comiera todas sus comidas porque se encerraba en su cuarto de baile por horas sin medir tiempo.

Habían pasado dos días encerrados en aquellas cuatro paredes, y sinceramente ya no era necesario más descanso. Por eso mismo no iba aceptar un no por respuesta, dejando en uno de los sillones la camisa a cuadros que sostenía en su mano, caminó lentamente hasta la cama en donde el pelirubio se encontraba acostado boca arriba con ambas manos detrás de su cabeza y sus ojos cerrados.

Tae se fue acercando lentamente tratando de no hacer ruido, cuando estuvo lo suficientemente cerca se lanzó encima de Jimin cubriendo por completo su cuerpo, el peli rubio era de una contextura musculosa pero pequeña asi que era fácil para Tae el sostenerlo y que no tenga escapatoria, al menos hasta que aceptara.

-¡Tae salte!- gritó mientras lo empujaba, Jimin sabía que no lo podría mover ya que le sacaba una cabeza de altura.

-No hasta que me digas que vas a salir esta noche con tu súper mejor amigo al que amas con todo tu corm..mmm- no terminó su parloteo gracias a que el pelirubio pudo sacar una de sus manos y logró taparle la boca impidiendo le hablar.

Forcejearon hasta que Tae logró que Jimin destapara su boca.

-¡Ya Tae! me asfixias, te puedes correr solo un poco para que respire- pidió con dificultad.

Como Tae vio que realmente lo estaba dejando sin respirar, se incorporó sentándose a horcajadas permitiéndole que respire libremente.

-Listo bebé-. Burlesco contestó.

-Vete a la mierda-. Replicó enojado mirándolo con su cara completamente roja en vergüenza.

-Perdón Mochi- se disculpó -Solo quiero que podamos divertirnos un poco ahora que ya no tenemos la presión de mis clases de canto, las tuyas de baile y esa dichosa exposición de ultimo año-. Terminó de hablar con un pequeño puchero en sus labios.

Jimin sabía que las intenciones de Tae no eran malas y que tal vez no le vendría mal salir un poco, el ya había descansado toda la tarde. Le haría bien poder despejarse de todo el desastre que su cabeza era en ese momento.

-Esta bien- aceptó.

Inmediatamente Tae pegó un salto y bajó de la cama para gritar mientras bailaba moviendo sus caderas exageradamente, Jimin no aguantó y se doblo de risa.

La amistad que tenían era muy bonita y el pelirubio agradecía el haber encontrado a su mejor amigo aquella vez cuando juntaron a los alumnos de la academia para las normales exposiciones de fin de año.

Sinceramente el mucho no quería participar en estas sabiendo que el año anterior no había congeniado muy bien con su anterior compañero, y tampoco está de más el decir que no era muy bueno para entablar nuevas amistades. Pero cuando Taehyung se presentó como su nuevo compañero mientras entusiasta alagaba las uñas de Jimin, las cuales ese día estaban pintadas de un rosa pastel brillante. Lo único que pudo hacer Jimin en ese momento fue hacerse a un lado para que su nuevo compañero, y pronto mejor amigo se sentara a su lado.