2. Conociendo tus labios

2.2K 335 217
                                    

Como ambos habían prometido, a las siete de la mañana en punto se encontraron en la glorieta del Ángel de la Independencia.

Yibo cogió la mano de Xiao Zhan y le guió por las frías calles matutinas hasta el metro Insurgentes, donde abordaron un vagón semivacío y le explicaba que tenían que bajarse en otra estación para finalmente dirigirse a la universidad.

—¿No es muy complicado? —preguntó Xiao Zhan, mirando las estaciones en la parte alta del vagón.

—No cuando ya te acostumbras. Ahora, lo que te voy a decir es algo... un tanto incomodo. Cuando cambiemos de tren, pasaremos a uno que estará completamente repleto. No quiero que te separes de mí en ningún momento o los mismos hombres y mujeres podrían sacarte del vagón, ¿de acuerdo? —Xiao Zhan asintió y para demostrarle a Yibo que había entendido cada una de sus palabras, le sonrió.

Cuando llegaron al metro Balderas, ambos lucharon contra la marea de gente que intentaba subir y no les dejaban bajar. Justo cuando la alarma del metro comenzaba a anunciar el cierre de puertas, Xiao Zhan logró salir, casi cayendo sobre el más joven.

Los dos caminaron junto al tumulto de gente y llegaron al otro lado del metro, con dirección a Universidad.

Tal como había predicho Yibo, la estación se encontraba abarrotada de gente, en su mayoría jóvenes, que iban a clases.

—No te separes de mí y no me sueltes —susurró Yibo a Xiao Zhan al oído.

Se colocó detrás de él y lo condujo hacia las vías, empujando a todos en su camino.

El primer metro de les fue, pero al menos habían quedado al frente.

Los chicos no notaron en qué momento las manos de Wang Yibo habían quedado en la cintura de Xiao Zhan, protegiéndolo y asegurándose de no separarse de él.

Cuando el nuevo metro de detuvo frente a ellos, Yibo contó hasta tres y al abrirse la puerta, empujó al mayor al interior del vagón, luchando contra la marea de hombres que descendían.

Con la fuerza bruta que había aprendido en el último año viviendo ahí, logró llevar a Xiao Zhan hasta el otro extremo del vagón, dónde sin darse cuenta de nuevo, sus cuerpos estaban pegados uno al otro.

—Lo siento —susurró Yibo, con el deseo de que el mayor no se incomodara al sentirle.

—N-No hay problema. Preferible que seas tú a alguno de esos hombres —dijo, refiriéndose a unos señores que seguramente también se dirigían a sus trabajos.

Intercambiaron un par de sonrisas más pero no hablaron durante el trayecto.
Sólo hasta llegar a su destino final, fue como lograron separarse.

°•♡•°

Al medio día, Wang Yibo ya había terminado sus pendientes y se encontró con Xiao Zhan en el patio de la Universidad.

El mayor, se había sentado sobre el césped a dibujar en su cuaderno el edificio de la biblioteca. Detalló lo mejor que pudo el arte y aprovechó también para trazar el sereno rostro de Yibo.

Por la tarde recorrieron Ciudad Universitaria, adentrando en los museos que el lugar ofrecía y aguardaron a que la tarde llegará para regresar a Centro Histórico, donde el mirador del Monumento a la Revolución les esperaba.

Los dos chicos, que compartían una misma carrera, hablaron sobre la estructura del Monumento, leyendas y un poco de historia. Al final de la tarde, el menor invitó a Xiao Zhan a una cafetería cercana a dónde vivía.

En aquel lugar, compraron bebidas frías y churros rellenos de diferentes sabores. Para Xiao Zhan, todo aquello era nuevo y le encantó lamerse los dedos del azúcar que quedaba en ellos.

°•𝑵𝒖𝒆𝒔𝒕𝒓𝒐 𝑫𝒆𝒔𝒕𝒊𝒏𝒐•° | YiZhan °•♡•° [MPreg]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora