Capitulo 14 Jungkook I

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Mi cabeza iba a explotar de ver tantos pendientes que tenía durante todo este mes, era noviembre, casi diciembre y con aires a enero. Le había dicho a Taehyung que dejará todo para navidad y año nuevo pues siempre me las pasaba solo trabajando, al siguiente día mi secretario y mi mejor amigo, estaba tocando mi puerta con un regalo atrasado en la mano, el pasaba esas fechas con su novia pero ahora las pasaría con su hermana aquí y en mi casa, y conmigo si lo veía de esa forma.

— Adelante Kim.

La silueta de un chico con una camisa azul marino con diseños de palmeras en blanco un pantalón de tela y su cabello rizado color zanahoria estaba enfrente de mí.

— A lo que viniste— exclamé, teniendo la vista en los papeles de mi mesa, leyéndolos con mucha atención pero no podía mucho menos que tenía a un Taehyung parado, sin soltar ni hacer un movimiento.

— Vengo...

— ¿Vienes?—hablé casi al mismo tiempo que él.

— A disculparme.

— ¿Disculparte?— dejé lo que estaba haciendo para recostarme sobre el respaldo de mi silla, y mirarlo— adelante, te escuchó Kim.

— Hemos sido amigos desde hace años, hemos discutido por cosas más importantes pero— cambió el tono de voz a uno tipo niño berrinchudo y comenzó a patalear de repente— ¿Por qué tenía que ser con mi hermana?, desde que esa androide llegó te has vuelto más amargado y celoso— rodó los ojos.

— ¿Tienes celos porque le permito más cosas a ella que a ti?— cuestioné.

— ¡Yo, llegué más primero que ella!— gritó de pronto, metiéndose más en su papel de alguien a quien le gustaba hacer rabietas y escándalos por nada.

— No me voy a enamorar de ti o ¿eso es lo quieres?— pregunté sonriendo coquetamente y el negó de inmediato.

— Significa que te enamoraste de esa robot, amor, eso fue, por eso la dejas hacer lo que quieras, acaso— empezó a susurrar, sentarse en la orilla de mi escritorio y hablar solo para nosotros dos escucháramos— ¿No te da miedo que ande por la casa sola por la noche a oscuras?— fingió temblar e hizo una mueca de horror— su ojos son grandes y su maquillaje en un asco.

— No es una muñeca Taehyung es una robot, mi robot— corregí y el rizado rio a carcajadas que hasta las lágrimas por sus párpados y el dolor de estómago se hicieron presentes.

— De acuerdo; de acuerdo, pero haré que pienses en otras cosas que no sea el trabajo y esa robot.

— ¿Vas a drogarme?

— Aún mejor— caminó hasta una repisa que estaba en lo alto pero no era ningún problema para él, pudo alcanzarlo bueno, cabe decir que dio unos cuantos saltitos para poder tomar esa botella.

— ¿Desde cuándo esta eso ahí?— pregunté confundido.

— Estás tan metido en tus obligaciones y en tus miedos que te olvidas que también existe un alrededor— argumentó Taehyung, tomó dos copas que estaban sobre un librero.

— ¡Alto!

— ¿Que-é?— antes de servir la bebida alcohólica, detuve a Taehyung.

— ¿Están limpios?— pregunté con temor.

— ¿Limpios, enserio?— entre cerró los ojos Taehyung, incrédulo.

— Que sí los lavaste, las copas— respondí desconfiando.

— No, digo sí, ya toma— me pasó la copa por enfrente sin derramar o cortar la distancia, sobre todo, antes, de mi caja de guantes, tomé uno de los mencionados y me lo puse rápidamente en una sola mano para evitar infecciones o resfriados.

20'CUBES ;jkDonde viven las historias. Descúbrelo ahora