Lan Wangji se encontraba en la montaña, en dónde tenía a sus lindos y blancos conejos. Uno de ellos se acercó hasta él y decidió tomarlo en sus brazos.
-Hola pequeño conejo.-Lo acarició con delicadeza.- Eres muy suave, ¿Tú también estás solo?
Se había sentado sobre el pasto, no sin antes de haber puesto un pequeño pañuelo para no ensuciarse, hablaba con el conejo como si este lo comprendiera.
-Eres tan blanco como el jade.-Sus manos pasaban suavemente sobre el pequeño cuerpo del conejo.
Después de unos momentos, aquel lindo animal empezó a moverse en los brazos de su dueño, el segundo Jade lo bajó y este corrió, como si estuviera huyendo de el.
-Creo que alguien te debe estar esperando.- Suspiró.
Se paró y recogió el pañuelo, sacudió sus túnicas, tomó a Bichen y se encaminó de regreso. Muchos discípulos lo saludaron en el camino, y respondió por cortesía.
-Hanguang-jun.- Un discípulo hizo una reverencia.- Zewu-Jun lo está buscando.
-Gracias, iré con el en unos momentos.
Después de agradecer, caminó hasta el estudio de su hermano.
-Wangji.- Sonrió.-Necesito hablar contigo. Toma asiento primero, ¿No crees que debes dejar de sufrir? No digas que no, te conozco y sé que lo haces aunque no lo demuestres. El señor Wei encontró con quién compartir momentos de su vida.
-No puedo Xichen, Wei Ying era todo para mí, pero se fue con el líder del clan Jiang. ¿Cómo te sentirías si estuvieras en una situación así?
-Te entiendo, sé que no es fácil olvidar a quién estuvo contigo, y vivió contigo. Pero no puedes estar así, estás olvidando tus responsabilidades. Nuestro tío está preocupado por ti. Poe favor hazlo, olvídalo Wangji, el ya no te necesita. Aunque suene duro es la realidad. Debes seguir con tu vida, te dejaré para pensarlo.- Sonrió una última vez para salir.
Lan Wangji se quedó sentado, el sabía que estaba mal, pero también sabía que debía dejarlo ir, Lan Xichen tenía razón, el ya no lo necesitaba aunque sonara duro. Había encontrado a quien de verdad amaba, sin embargo aún lo extrañaba, extrañaba despertar y verlo a su lado, besar sus labios y hablar con el. No creyó que la persona a quien tanto odió al principio, ahora fuera su debilidad.
Tardó unos minutos más en recobrar el sentido, suspiró profundamente y cerró sus ojos.
-Wei Ying... ¿Por qué? ¿Por qué me haces sufrir tanto?.-Una lágrima cayó directo a su mejilla.
No podía dejar que lo vieran así, secó inmediatamente aquella gota, miró el estudio con paciencia y examinando todo con su vista, habían muchos libros. La mayoría del clan Lan, no tenía necesidad de tocarlos, se paró suave y lentamente, seguido de abrir la puerta para salir.
No tenía ganas de ver a nadie, casi corriendo llegó hasta el Jingshi. En dónde se encerró durante todo el día, tocaba su Guqin y de vez en cuando miraba hacía la ventana, recordando las veces que estuvo aquí con Wei Wuxian.
-¡Lan Zhan! El Jingshi es muy grande, y aún así no tienes muchas cosas para ser tu habitación.
Sacudió su cabeza levemente para deshacer ese recuerdo, sus dedos subían y bajaban de las cuerdas, hasta que el sonido de alguien tocando la puerta lo interrumpió.
-Wangji, siento molestarte... No has comido ni salido en todo el día, podría hacerte daño.- Lan Xichen habló desde afuera.
Caminó hasta la puerta, la abrió lentamente y sin prisa, ahí estaba el jade mayor. Con su mirada preocupada por el menor.
-Adelante.-Lan Wangji se hizo a un lado para dejarlo pasar.
-Wangji, debes comer algo, por favor.-Rogaba, de la bandeja que llevaba sacó un tazón de color blanco, en dónde colocó un poco de sopa para el.- Hazlo, como un poco.
El segundo Jade no podía negarse, la mirada preocupada de su hermano mayor lo decía todo, le rogaba y aunque no quisiera tenía que hacerlo. Al extender su mano para tomar la cuchara, esta tembló dejando caer el utensilio. Avergonzado se agachó a recogerla.
-Traje otra.- Lan Xichen extendió la cuchara limpia.
Lan Wangji la tomó, esta vez con más firmeza, la sumergió dentro de la sopa y la llevó hasta su boca.
-Gracias.
-No tienes que agradecerme, me preocupo por ti.
-Lo siento pero no... No puedo olvidarme de él, formará parte de mi pasado y no puedo olvidarlo. Cada momento que compartimos juntos...
-Wangji, si no lo haces... Seguirás sufriendo, te castigarán por no cumplir con tus deberes. Es por tu bien.
Siguió comiendo mientras el mayor hablaba, estaba mal lo sabía, pero no quería olvidarlo. Su mente se negaba, y su cuerpo también. Simplemente era un NO.
Lan Xichen extendió que no quería seguir hablando, y esperó a que terminara de comer para retirarse.
- Estaré en el Hanshi si me necesitas.- Como siempre, le dedicó una sonrisa amable y cálida, seguido de salir.
Debían ser más de las 10:PM, pues Lan Wangji estaba bostezando a cada rato y sus ojos comenzaban a cerrarse.
Como pudo, cambió su tunica azul clara por una más liviana para dormir. Se recostó sobre su cama, aún con los recuerdos de Wei Wuxian en su mente.
{...}
Perdón si tardé mucho en actualizar, pero no venía la inspiración :(
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Los caminos de la vida
FanfictionWei Ying ya no sentía lo mismo por Lan Zhan, sus sentimientos eran para otra persona. Alguien con quién había crecido desde pequeño... Jiang Cheng. Historia ChengXian (Jiang Cheng y Wei Wuxian)