Mi corazón te pertenece solo a ti {Jason x Nathan} Segunda temporada.

Cap 4.

Kagekao entro a la habitación de Nathan como si se tratara de su propia habitación y sonrió al ver al menor acostado en la cama.

-¿Que quieres Kagekao?

El nombrado ladeo la cabeza y se acerco.

-¿Como sabias que era yo?

Nathan abrió los ojos y lo miro.

-Splendor, Papa y Puppeteer tocan las puerta, Candy abre de golpe mientras grita mi nombre, Jack abre la puerta despacio, haciendo que esta rechine, y Jason...El entra mientras me llama "cariño"- Explico y volvió a cerrar los ojos.

Kagekao sonrió burlón.

-Deberías ir a tomar una ducha.

El menor frunció el ceño y lo volvió a mirar.

-Estuviste entrenando hace un rato ¿No? Una ducha te relajara

Nathan suspiro y le dio la espalda al mayor.

-No me jodas- Se quejo casi que en voz baja.

Kagekao se le tiro encima, provocando que Nathan se quejara.

-Kagekao...Estas gordo, quítate.

-¡¿Ah?! ¿Gordo yo? Que ofensa querido Nathan.

El nombrado no pudo evitar sonreír de forma leve ante aquello.

-Solo quítate de encima mascarita.

Kagekao obedeció y se levanto, para luego, cargar a Nathan al estilo princesa.

-Oye, suéltame- Se quejo, aunque no hizo nada para poder zafarse.

-Iras a tomar una ducha aunque me toque obligarte.

Nathan frunció su ceño de forma leve esta vez, apoyo su cabeza en el hombro del mayor y cerro los ojos.

Jason, el cual iba subiendo por las escaleras, vio al par, y no pudo evitar ladear la cabeza mientras fruncía el ceño, pero no le dio importancia al escuchar las palabras del de la mascara.

~

Pasaron unos cuantos días, en estos momentos, todos los habitantes de la casa se estaban preparando para salir a matar, creían que era una buena noche en la cual podrían divertirse.

-¿Ya están todos listos?- Pregunto Splendor mientras miraba a todos los presentes.

-Iré con Helen, así que saldré ahora.

Splendor asintió ante aquello y Puppeteer salió de la casa en total silencio.

-¡Jason, vayamos juntos a matar!- Pidió la bufona con una enorme sonrisa en su cara.

-Claro- Le sonrió.

Y dicho eso, apareció la puerta azul que usaba como portal, los dos entraron y desaparecieron.

-Nathan- El nombrado miro al mago- ¿Vas a salir?- Pregunto al ver como el menor se había quedado viendo hacia donde había estado la puerta azul.

Candy se acerco a Nathan y lo tomo por uno de sus brazos.

-Nathan vendrá conmigo hoy- Sonrió y lo llevo afuera de la casa mientras le hacia señas a Laughing.

Aunque Nathan fue obligado a salir, no se resistió al momento en que Candy lo jalo con el por el bosque.

-¿Podemos hablar?

Nathan lo miro de reojo antes de contestar.

-No creo que tengas a nadie mas con quien hablar en estos momentos.

Candy sonrió ante aquella respuesta, pero la sonrisa no duro mucho tiempo en sus labios.

-No tienes que preocuparte por ella- Nathan lo miro, pero esta vez con confusión- Mi hermana no esta interesada en dañar tu relación con Jason.

El mayor no pudo evitar voltear a ver a Nathan cuando lo escucho reír.

Era una risa llena de sarcasmo y dolor.

-A mi no me interesa eso- Fue su respuesta al dejar de reír.

-Te veías molesto todos estos días.

Una sonrisa dolida se planto en el rostro de Nathan.

-A pesar de saber que ese es el comportamiento normal de Jason...Me molesta un poco que se comporte así con ella, y es una estupidez- Soltó una risa leve- Después de todo, se supone que debo confiar en el, pero es tan tan...Molesto.

Candy no pudo evitar sentir pesar ante aquel tono dolido del contrario, iba a hablarle, pero el otro se le adelanto.

-Bueno, aquí se separan nuestros caminos.

El mayor miro hacia el frente, notando como estaban en la salida del bosque.

-Nos vemos Nathan.

El nombrado le dedico una pequeña sonrisa y asintió antes de irse.

Laughing salió de entre algunos arboles y abrazo a Candy por los hombros.

-¿Crees que deberíamos hablar con Jason?

El bufón suspiro y se apoyo en el pecho del payaso.

-No lo se...

.

.

.

-¿Y si nos besamos?

-¡Jack!

Ambos soltaron una carcajada ante aquello.

-Mejor vámonos ya- Ordeno mientras empezaba a caminar.

-Como usted ordene mi rey.

Volvieron a reír ante aquello.

~

Nathan caminaba por las calles en total silencio, estaba atento a cualquier ruido para poder atacar a las personas que anduvieran por ahí.

-Segundo callejón a la izquierda.

El de ojos heterocromáticos acelero su andar hasta llegar a dichoso callejón, entro a este sin hacer ruido, y grande fue su sorpresa al ver quienes estaban ahí.

Se trataban de dos niños no mayores de 12 años.

Sintió como su corazón se sacudía y retrocedió.

-Mátalos.

Cubrió sus oídos ante aquello.

¿Por que? ¿Por que a niños?

-S-señor...¿Podría ayudarnos?

Nathan los miro con terror.

La niña se acerco al de ojos heterocromáticos, esperando que este aceptara ayudarlos.

-Mátalos, mátalos ¡Mátalos!

Nathan se abalanzo sobre la niña mientras sentía como la rabia se apoderaba de el.

Continuara...