Lithium

Capitulo 2

Capitulo 2

Siento como entra el sol por las persianas de mi habitación, me estiro un poco y salgo de mi habitación, hago una trenza mi cabello y bajo las escaleras, mi madre está abajo platicando con Sam, realmente no me interesa lo que hablen, tomo jugo de naranja y un hot cake que encontré, le embarre nutella, los tome y subí a mi habitación, tenía mucho que empacar, ya casi terminaban mis vacaciones y me iría, a la Universidad de letras de Londres, Michael y yo conseguimos trabajos para poder pagar un apartamento mi hermano nos ofreció vivir con el pero como queríamos independencia lo rechazamos, no es como que nuestros padres no se hubieran ofrecido a cubrir los gastos de nuestros estudios pero esto lo queríamos hacer solos y juntos asi que el plan era conseguirlo sin la ayuda de alguien que no fuera alguno de nosotros dos. Tengo mucho que empacar, en verdad deseo irme de aquí, ya no soporto vivir aquí, aparte en Londres vive mi hermano Edwin y hace tiempo que no lo veo. Comencé por hacer mis maletas, no pensé que tuviera tanta ropa, hay prendas que no me eh puesto en años.

-Hey Luv, deberías darme estas faldas floreadas, ya hace mucho que no te las pones y a mi se me verían hermosas.

-Claro, porque no tomas lo que gustes, para que lo guardes en cajas, las escondas y tampoco te las pongas.

-¿Por qué dices eso?

-Porque fui al sótano a buscar cajas y una caja decía tu nombre, la abrí y encontré estas faldas que en realidad son mías, es por eso que no me las eh puesto.

-Bueno, ahora me las pondré.

-Quieres no tocar mis cosas y te agradecería que salieras de mi habitación y cerraras la puerta, si no es mucha molestia.

-¡Hey! Solo quería ser amable dijo con hipocresía.

-¿Qué demonios quieres Sam?

Ella salió a cerciorarse de que mamá no estaba mientras miraba por todo alrededor de mi alcoba cundo termino ella entro de nuevo a mi cuarto y cerró la puerta con delicadeza para no despertar a mi madre y entonces salió la verdadera Sam.

-Mira idiota necesito que me hagas un favor. Dijo en un tono altanero

-En primera no me llames idiota y puedes largarte que no te ayudare a nada. Le respondí irritada

-¡Joder Luvina! Necesito dinero y se muy bien que tu papi te dejo una gran cantidad así que más vale que me prestes.

-¿Dinero prestado? ¿A ti? Ni lo suenes estúpida además yo no tengo ningún dinero de mi "papi" y si lo tuviera nunca te lo daría preferiría aventarlo a los cerdos.

- Te vas a arrepentir Luvina. Se dio la vuelta y salió de mi cuarto dramáticamente como toda una diva.

Solté un gran suspiro y me senté en la orilla de la cama, no tenía idea de cómo es que sabia ella de la pequeña herencia que nos había dejado mi padre era verdad que tenía dinero pero fingí que no, además no me explicaba cómo es que ella lo sabía, quizás fue alguna vez que hablaba con mi hermano al respecto y ella escucho así que decidí que fingiría que no tenía nada y acomode las cajas de la mudanza para ordenar un poco mi cuarto, después me fui a dar una ducha, me quite mi collar que mi padre me regalo cuando nací y lo deje en la mesita de noche amaba ese dije y para no maltratarlo tenía cuidados especiales con él, después baje y me hice un batido le dije a mi madre que saldría con Mich a comprar unas cosas para el departamento pero como estaba en su celular solo obtuve un no llegues tarde y si no llegas a dormir avisa, me entristeció cada vez era más cortante así que decidí salir lo más rápido de ahí.

Eran las 11 de la mañana, era temprano después iría a mi cita a escondidas con la psicóloga y Mich pasaría por mí, mi madre no tenía idea de que comencé a ver a un psicólogo hace un año debido a lo que pase, ella estaba en contra por muchas razones en especial por miedo a que todo se supiera y nuestra fachada de familia perfecta se fuera a la mierda, pero con la ayuda de Mich comencé a ir con Anne mi terapeuta ella me había detectado trastorno de ansiedad con tendencia a la ansiedad social, iba mejorando aunque los flashback y las pesadilla me atormentaran ya podía salir sola en el día sin Michael o mi hermano recuerdo que antes de esto prácticamente éramos inseparables literalmente pues no podía salir sola sin comenzar a tener pánico, si alguno de ellos no estaba ahí comenzaba a ponerme muy ansiosa en especial si había gente a mi alrededor odiaba depender de alguien pero era necesario además ambos eran mis hermanos uno de sangre y el otro de corazón.