– ¿Por qué tuviste que hacer eso Megan? – suspiraba el hombre – Todo estaba saliendo bien.
Ella estaba atada y amordazada. El científico acarició su cabeza y sonrió.
– Has dormido bastante, hemos encontrado una nueva ubicación para seguir jugando –sonrió – Si vuelves a intentar escapar no dudes que mataremos a todos tus amigos. Bajarla y atarla a la silla – ordenó.
Colocaron todo en una nueva nave alejada. Megan estaba atada y bastante tocada. Le costaba mantenerse con los ojos abiertos.
El científico colocó todo como estaba y los secuaces bajaron las gemas y se las entregaron a Thanos. Tomó el teseracto y retiró de él la gema del espacio situándola en uno de los compartimentos, e hizo lo mismo con la gema de la mente.
Las dos gemas se iluminaron de golpe. La energía pasó por varios conductos hasta llegar a la silla y se empezó a trasferir al cuerpo de Megan, como había pasado con la otra. Ella se agarró fuertemente a la silla gritando y convulsionando.
– Aumenta – añadió Thanos.
El científico aumentó la potencia. Megan se retorcía y gritaba, apretaba sus manos intentando no sentir tanto dolor.
– Más.
– Pero... Señor... Nunca hemos hecho esto, no es buena idea...
– Al máximo – Thanos miró serio al hombre.
Él le hizo caso y puso el aparato al máximo cuando una pequeña explosión les alertó.
– Paralo – dijo Thanos – las gemas pueden sufrir daños.
El científico pulsó varios botones – no se apaga – dijo tirando de una palanca – ¡desconectar el cable rojo de la esquina! – gritó a uno de los esbirros de Thanos.
La máquina se estaba sobrecalentando.
– Va a explotar, tenemos que salir de aquí – le dijo a Thanos.
– No sin las gemas – gritó él.
– Thanos, si explota moriremos, larguémonos de aquí, después volveremos a por las gemas y a por ella si sigue viva.
Thanos cogió la gema del espacio y la volvió a introducir en el teseracto, se lo dio al científico y caminó hacia la máquina para coger la gema de la mente, la guardó en el interior de la piedra que la contenía y se iban a ir cuando la máquina explotó y Thanos perdió de vista la gema.
Salieron del lugar y se subieron a la nave que tenían camuflada. Thanos con un enfado notable agarró al científico ahogándolo.
– Confié en ti, me dijiste que estaba todo preparado, como volvamos y no esté te mataré – dijo tirándolo al suelo – No puedo perderla si no los vengadores no trabajaran para mí.
– Señor, eso no pasará, cuando todo quede reducido a cenizas volveremos.
– Mas te vale.
.
.
– ¡Megan! – gritaron Tony y Loki siguiendo la señal de Jarvis.
– La señal se corta aquí Tony – dijo Banner colocándose las gafas.
– Bruce mueve tu pie – dijo Loki agachándose y cogió la pulsera.
– Toma – le dijo Loki a Tony, entregándole la pulsera.
Tony se sentó en el suelo y cogió la pulsera, apretó el corazón y empezó a toquetear cosas.
– ¿Qué está haciendo? – preguntó Loki.
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El mundo de los colores
RandomVivimos en una sociedad en la que la vida es monótona, aburrida y en blanco y negro hasta que conoces a tu alma gemela y por fin puedes apreciar los colores de la vida.