Después de una semana de clases sin descanso, con tareas, proyectos y algunos pre-examenes, se acercaba la semana más tocha de todas, con los exámenes que abarcaban todos los temas habidos y por haber, y lo curioso era, que a pesar de ser una semana tan pesada en la que tienes que "estudiar" todo lo que te han enseñado en dos meses tenías bastante tiempo libre, porque no había clases, al menos no formales, ni tareas, ni ninguna mierda de esas, pues los profesores estaban muy ocupados.
Hoy era jueves y tenía que hacer si o sí un proyecto, el último de todos afortunadamente, pues mañana es la fecha de entrega, había tenido una semana para hacerlo pero era en equipo y como siempre, nunca se puede quedar para reunirnos, que si uno tiene que ir a los extra-escolares, que si otro tiene que salir con su familia, que el otro tiene que ir al médico, en conclusión NUNCA pudimos reunirnos, tampoco me tenía preocupada porque era un simple video de duración de dos a cinco minutos en el que tiene que salir los cinco estudiantes que lo conforman, nada complicado, y HOY aunque sea a rastras los llevaría a todos a algún sitio para grabar, aunque fuera allí mismo en el instituto, no esta de más decir que el video quedaría cutre debido a la falta de producción pero me aseguraría de que cumpliera todos los puntos del encuadre para así tener un puntaje bueno, si no el mejor, me conformaría con más de la mitad de los puntos, ya me quería quitar ese pendiente.
Ahora el pequeño detalle era reunir a todo el equipo, al menos dos de ellos no iban a ser muy complicado, Isaac y Fátima, al momento en que la profesora de ética había dicho que formarnos equipo de cinco personas, rápidamente giré a verlos y ellos me sonrieron asintiendo, luego de eso dos chicos más aparecieron buscando equipo, al parecer eran amigos de Isaac, y yo no le pude decir que no, cuando me preguntó de forma tímida que si podría incluirlos, Isaac me miró tan suplicante con esos ojitos cafés claro tan tiernos que si seguía mirándolos me ahogaría en ellos, adornados de sus gruesas, largas y negras pestañas onduladas y con un puchero hecho por sus carnosos labios rositas tan bien formados, verlo asi era la cosita más tierna que había visto en mi vida, luego de que le decirle que sí me sonrió y me dió un rápido abrazo, que entre lo sorprendida que estaba no alcance a corresponder y me enojé conmigo misma.
Dos horas antes de la hora de salir, les avisé a los cuatro que hoy teníamos que quedarnos un rato más para grabar el vídeo, algo rápido y después irnos, ellos aceptaron pero aún así sabía que tendría que recordarles a la salida para que no se fueran con corriendo a quien sabe dónde. Estaba en clases de matemáticas y ya quedaba poco para que terminase, me gire a ver a Fátima que estaba a un lado mío
-recuerda que nos quedamos un rato- le dije susurrando, no quería que el profesor nos llamara la atención
-que sí, y no es a mi a quien le tienes que recordar- dijo apuntando con la cabeza hacia donde se encontraba Isaac casi al otro lado del aula con Kenya, me fijé en ambos y como estaban tan distraídos hablando entre ellos, disfrutando de la compañía del otro, trate de no pensar nada malo aunque tenía que admitir que ya iba casi una semana que el no se sentaba conmigo por ir donde Kenya y aunque a la salida nos seguía acompañando podía notar como actuaba diferente, según Fátima todo estaba igual pero yo sabía que no, siempre tardaba en ir con nosotros y cuando caminábamos revisaba su teléfono cada dos por tres, volví a verlos y sentí claramente como mi estómago se revolvió y ardió cuando Kenya tomo una pluma e hizo algo en la libreta de Isaac, él lo vió y sonrió, con esa sonrisa muy suya en la que parece divertido y coqueto a la vez, para ese punto ya estaba tratando de contener mis impulsos de tirarle mi mochila en toda la cara a Isaac para que quitara esa sonrisa- anda que son amigos, no te pongas celosa
- no estoy celosa- me giré a verla con una mueca, ella solo estaba divirtiéndose ante la situación
-claro, solo deja de apretar tu mochila si?Que no tiene culpa de nada- mire mi mochila y la estaba estrujando bastante fuerte, le lance un gruñido de molestia y seguí tratando de prestar atención a la clase y ocasionalmente vigilando por el rabillo del ojo a Isaac y Kenya. Me sentía mal con tan solo verlos, todas las veces que estaban juntos estaban hablando animadamente, sonriendo claramente muy cómodos, en cambio cuando yo estaba con él, no podía mantener una conversación, yo nunca sabía que decirle, muchas veces se rió de mi por qué le hice preguntas un tanto raras o atravesadas en mi intento de sacar un tema para hablar, entablar una conversación con alguien nunca fue mi fuerte, necesito que alguien me esté preguntando, así yo puedo responder y seguir el hilo, pero la otra persona tiene que hacer muy bien su pregunta, porque de eso depende si mi respuesta es larga o corta, me cuesta demasiado expresarme así que me limito a responder únicamente lo que me preguntan. Nunca me había importado eso, pero cuando estaba con Isaac me desesperaba el ser tan lenta y no saber cómo hablar bien con él.
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¡PELIGRO! Trillizos O'Donnell
Teen Fiction¿Que pasará cuándo unos trillizos de 16 años viajen al otro lado del mundo para mudarse, sin supervisión de un adulto? ¿Cuando se den cuenta que los retos de la vida no son tan fácil cuando no tienes apoyo de un adulto? ¿Cuando lo único que tienen p...