-56-

772 54 19
                                    


    Erwin abre los ojos lentamente, acostumbrándose apenas a la fuerte luz del sol que entraba por la ventana, habían olvidado cerrar por completo las cortinas.

— Erwin —dice ___ suavemente, con un dulce tono de voz. Erwin la mira con los ojos entrecerrados— Son las seis apenas, sigue durmiendo, aún tienes tiempo de descansar.

   El rubio besa sus labios, aún medio dormido, y acto seguido, la abraza fuerte contra su cuerpo.

   El rubio besa sus labios, aún medio dormido, y acto seguido, la abraza fuerte contra su cuerpo

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.

 

— Te adoro —susurra el rubio, con la voz ronca.

— Yo más —sonrie un poco, pone las yemas de sus dedos sobre el rostro de Erwin y lo acaricia lentamente— Que bello eres.

   El solo sonríe y abre un poco los ojos, estaba muy cansado, apenas podía mantenerse despierto.

— Descansa cariño, lo mereces —ella vuelve a besarlo.

   Y así vuelven a la misma posición de antes y siguen durmiendo, aún faltaba una hora para que empezaran su día en el cuartel.

(...)

— Ya llegué —anuncia ____ entrando con una taza café a la oficina.

   Cómo siempre, Erwin se mantenía muy ocupado en la oficina y su novia iba a hacerle compañía y ayudarlo en lo que fuera necesario. A pesar de haber descansado muy bien anoche, él aún necesitaba algo para seguir manteniendose despierto.

— Ten —ella deja la taza a su lado.

— Muchas gracias cariño —dice Erwin sonriendole. Toma la mano de la pelinegra y se levanta para poder abrazarla.

— ¿Que pasa Erwin? ¿Estás muy cansado verdad? —lo abraza con cariño.

— Si, muy cansado. Solo quiero volver a la cama a seguir durmiendo contigo, extraño las mantas calentitas.

— Mañana nos espera un día muuuy cansador, la misión nos dejará cansadísimos, así que aprovechemos esta noche para dormir como nunca.

— Acepto, ¿habrá cariñitos?.

— Por supuesto que los habrá —afirma la chica— Se me hace raro que me pidas cariños. Te ves muy rudo, ¿quien diría que te tendría pidiéndome cariñitos? —Erwin se sonroja.

— Es que... Bueno,.tu me tienes así de tonto y enamorado —el rubio besa su frente— Gracias por el café cariño.

— No es nada, ¿necesitas algo más? no quiero dejarte aquí solo —ella vuelve a abrazarlo.

Stay With Me - Erwin SmithDonde viven las historias. Descúbrelo ahora