El atardecer abrazaba con calidez el viejo edificio, los pasos sonaban por el piso de mármol dejándose escuchar por las abandonadas instalaciones como un eco.
Dos jóvenes ubicadas en una desolada y solitaria aula charlaban con despreocupación mientras el sonido de los pasos se acercaban. La joven peli roja miraba la ventana charlando de amores sin importancia mientras su acompañante una joven de rubia cabellera la escuchaba sin prestarle tanta atención tomando un cazo de café cuando de repente volvio su vista a la puerta.
–Kore ¿Acaso me estás escuchando?– farfullo molesta la joven peli roja con el seño fruncido.
La mencionada solo volvió su mirada hacia ella con expresión seria.
– Entiendo... entonces nos vemos luego kore–
–realmente se hacer esto, no es más que una condena– suspiraba la joven peli castaña desde el marco de la puerta– ¿Realmente lo disfrutaste?–
–un fracaso más que más da Akane un destino ya escrito es lo que se ve– declara desde el pupitre la joven peli rubia.
–que es la vida sin ello, fracaso y error no es más que un ciclo sin fin... ¿ lo sabes no kore?– mirando a la nombrada con su semblante cansado.
–vamos no lo dijiste o ¿si?– volteando a la ventana
–me mal interpretas kore, sabes a quien me refería, después de todo si las paredes pudieran hablar...– dice entrando al aula con pasos decididos y tomando asiento enfrente de la nombrada.
–quien diría que tienes una lengua venenosa, ¿escupes tanto veneno Akari o son solo tus inseguridades?– mirando a la joven con una sonrisa burlona
–valla quieres un lío no es así kore towa– levantándose del asiento con cierto enfado.
–valla no lo tomes a mal después de todo solo es una charla ¿no es así vieja amiga?– cambiando su expresión.
–después de todo solo es una charla– se sienta de nuevo en el asiento – un destino escrito ¿será posible cambiar?
–no lo sabremos si no lo intentamos, pero... ¿Pagarías el precio por el?– mirándola curiosa
–así es, lo prometimos ese día, sin importar que...– mirando a su amiga – pagaríamos los pecados y limpiaremos la sangre de sus manos
–y de las nuestras también no lo olvides akari– mira al reloj de la pared– al parecer el tiempo no está de nuestro lado por lo que puedo notar.
–dejemos esto hasta aquí por ahora...– Akari se levanta para marcharse –como siempre un gusto verte kore – dice saliendo por la puerta
–lo mismo digo akari– levantándose y saliendo por otra puerta –hasta la próxima vez Akari
Mientras la joven akari caminaba por los pasillos en busca de la salida un sonido familiar la alertó, reviso con rapidez sus bolsillos y encontró su celular sonando
– ¿Quién será?.– Respondió con clama– ¿bueno?, Oh hola Eduard ¿Paso algo?... Acabo de ver a kore... Te veo en el café..
Cuelga suspirando ligeramente para ir en camino a verlo...
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una muerte predestinada
Science FictionUn futuro escrito, una carrera por saber si la incógnita sera real o se podrá cambiar. ¿Será acaso una muerte predestinada?